Espil +4 = victoria

Boca Juniors sufrió de lo lindo para doblegar a Independiente de Neuquén por 94-87 en tiempo suplementario. Los dirigidos por Fernando Duró se metieron en cuartos de final y ahora enfrentarán a Peñarol (Sergio Hernández estuvo en la platea observando el partido).

Uno dirá que el básquet es un juego de equipo y que el partido lo ganó Boca. Pero en realidad no lo ganó Boca. Anoche el partido lo ganó el experimentado Juan Espil que se cargó el equipo al hombro y, desde el comienzo del último cuarto hasta el final del encuentro, convirtió 24 unidades.

El partido se abrió a puro gol (5-5 con 100% de efectividad), pero rápidamente los equipos perdieron la brújula, dándole paso a los yerros y a las pérdidas de balón. Independiente fue el que menos errores cometió en la conducción y con un par de robos estableció una pequeña ventaja (10-5 en 4:15) que obligó, sin dudar, a que Fernando Duró solicitara un tiempo muerto.

Boca mostró problemas en ambos frentes. En ofensiva seleccionó mal los lanzamientos y perdió balones; mientras que en defensa flotó la marca ante los pivots que salieron a tirar (Jervaughn Scales y Brice Assie) y sufrió varios triples que acrecentaron el margen a favor de los neuquinos (13-5).

El resurgir xeneize coincidió con los triples de Juan Espil (2/3) y Gabriel Fernández (2/2). Boca se sintió cómodo cargando el peso de las ofensivas en el perímetro y redujo la brecha (18-23). El cierre del cuarto fue parejo y la visita se vio arriba por 27-20.

El juego ingresó en una meseta y el tablero se movió poco y nada. En 3:05 Boca salió ganando con un pobre parcial de 2-0. Errores y desatenciones a la hora de mover el balón fueron algunas de las causas del flojo segundo cuarto.

Pese a que el cuarto fue horrible, Independiente volvió a acrecentar el margen. Un triple de Leandro Lauro y una penetración de Scales llevaron la diferencia a 11 (34-23); ante un Boca desorientado y escaso de gol en todas las posiciones.

Por como se dio el cuarto, los dos equipos merecieron la eliminación. Escasa efectividad de campo (4/15 para Boca y 4/13 para el rojo) y pérdidas por doquier (6 y 5). Independiente aguantó, Boca no pudo y el resultado fue de un flojo 43-32 para los visitantes.

Boca remontó a base de triples durante los primeros minutos del complemento. El xeneize revivió y rápidamente se puso en juego (42-48).

Independiente lució confundido y dependió de sus individualidades. Así el rojo se entregó a Agustín Carabajal (7) y Assie (5); mientras que Boca confió en su juego y pasó al frente por su esfuerzo defensivo (Juan Pablo Sánchez y Carl Edwards se turnaron para correr por todo el campo a Cedric Moodie) y por dos patriadas de Edwards (52-51).

La levantada xeneize se dio con Leandro Masieri trabajando como un falso pivot (8 en el cuarto) y con Fernández como único interno. Duró le dio descanso a Derrick Alston e hizo que su pivot llegara entero a la definición y con su equipo en plena carrera por un lugar en los cuartos de final (54-59).

En menos de 4 minutos del capítulo final el rojo se puso con cuatro faltas y Boca aprovechó para descontar con más amor propio que buen juego (64-65). Ante la ausencia de Sánchez, Nicolás Aguirre se encargó de perseguir a Moodie (no marcó en todo el complemento ni en el suplementario). Boca protegió el perímetro y se olvidó de la pintura, lugar donde Assie sumó (8). Pero el local siempre fue por más y con un triple de Espil, desde el córner izquierdo, empató en 70 a falta de 3:50.

Independiente no acusó cansancio físico, pero si bajó su nivel cuando dejó de jugar al básquet y protestó fallos. Federico Marín se fue por cinco personales y con dos libres de Espil, el líder de Boca, los xeneizes pasaron a comandar las acciones por 74-73 a 2:10 para el sonido de la chicharra.

Assie marcó un doble y conquistó el adicional por falta (76-74), pero Fernández lo igualó con dos libres (76-76). Assie dejó solo a Scales en la pintura y el nacionalizado no falló (76-78). Espil marró de tres y Assie, queriéndose convertir en héroe, falló un triple cuando debió buscar la pintura. Boca recibió una vida más y Espil lo empardó en 78 a falta de 27 segundos.

Independiente consumió segundos y cuando la posesión se moría Carabajal tiró de tres. El base erró. Espil peleó el rebote y ganó la posesión. Luego del minuto, el local repuso y Espil perdió el balón para viajar al suplementario.

La prórroga fue un intercambio de aciertos y errores. Una buena por dos malas. Espil y Edwards se adueñaron del balón en el local; mientras que Assie fue la apuesta del rojo, para sumar y para eliminar por cinco faltas a Alston (85-82 a 2:43).

Boca lo fue cocinando. Manejó el trámite y fue Espil dependiente. Independiente falló libes claves; mientras que el local, mediante Espil, aprovechó todo lo que tuvo a su alcance. Para no ser menos, a falta de 45 segundos, Espil lo liquidó con un triple desde el córner derecho (94-87). Boca fue más que el rojo y Espil se ganó el pasaje a cuartos de final.

Síntesis

Boca Juniors (78) (94): Nicolás Aguirre 5, Juan Espil 31, Carl Edwards 22, Gabriel Fernández 13 (x), Derrick Alston 8 (x) (FI), Juan Pablo Sánchez 2, Leandro Masieri 8, Fernando Calvi 5, Raymundo Legaria 0. Entrenador: Fernando Duró.

Independiente (78) (87): Agustín Carabajal 20, Cedric Moodie 10, Federico Marín 11 (x), Brice Assie 23, Jervaughn Scales 10 (FI), Jefferson Agba 4, Juan Levrino 0, Martín Melo 3 (x), Leandro Lauro 6. Entrenador: Mauricio Santángelo.

Parciales: 20-27, 32-43, 54-59 y 78-78.
Árbitros: Diego Rougier y Juan Fernández.
Estadio: Luís Conde.
Así quedaron las fechas y las llaves de cuartos de final (clic aca)


Foto: Marcelo Endelli – www.endellifotografia.com.ar

Juan Manuel Rodríguez
www.pickandroll.com.ar