BAHIA BLANCA (De un enviado especial).- Aunque en lo organizativo los imprevistos se seguían sumando y las soluciones tardaban en llegar, el clima de expectativa por la fiesta que el básquetbol vivirá hoy, desde las 20, en el Osvaldo Casanova, atenuaba las preocupaciones. El primer amistoso de la selección nacional frente a Australia camino al Premundial, y los reconocimientos que se realizarán en el entretiempo a las trayectorias de Juan Sánchez, Alejandro Montecchia y Juan Espil con la camiseta celeste y blanca disimularon algunos desórdenes.
La falta de arreglo de los jugadores por sus viáticos, algunas deudas, la incertidumbre por si se sumará un amistoso más en México antes de llegar a Puerto Rico y los detalles sobre cómo montar el show de esta noche se contrapusieron a las sorpresivas y gratas visitas durante el almuerzo. Una fue la de Manu Ginóbili, que apareció temprano por el hotel Land Plaza y con cara de haber disfrutado una larga noche de cumpleaños. “¡Uf, fue grande, fuimos como 50!”, contó. Manu comió con la delegación y después llegó Espil para saludarlos. Todo esto, en medio de muchas cámaras de TV y periodistas.
“No creo que jueguen Ale, Pepe y Juan. Va a ser medio complicado”, dijo el entrenador Sergio Hernández sobre la posibilidad de que los agasajados se pusieran la camiseta argentina y jugaran 2 o 3 minutos frente a Australia.