Ayer el magnate ruso MIkhail Prokhorov llegó a un acuerdo para comprar el 80 % del paquete accionario de los New Jersey Nets. Asimismo participará en un gran proyecto que la franquicia viene pensando desde hace unos años. Su desembarco podrá marcar a fuego la NBA no solo por ser el primer dueño extranjero en la historia, sino porque consigo trae ideas “revolucionarias”. Falta la aprobación de la liga.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
Roman Abramovich ya tiene un fiel contrincante en esto de invertir cantidades abrumadores de dinero en el deporte profesional. Al empresario dueño de Chelsea (equipo de la Premier League de fútbol de Inglaterra) se le suma el ahora famosísimo Mikhail Prokhorov, el ruso más rico del mundo según la revista Forbes.
Prokhorov, presidente de la firma Onexim, compraría el 80% de las acciones de los Nets, cuyo dueño es el empresario inmobiliario Bruce Ratner, en 200 millones de dólares. Sin embargo la inversión sería aún mayor, ya que también estaría involucrado en la construcción de un nuevo estadio en Brooklin junto con una especia de barrio residencial.
Atlantic Yard (así se llamará el proyecto) contaría con un condominio de viviendas, centros de compras y – por supuesto – el ansiado estadio. Para eso, la suma a desembolsar llegaría a los 700 millones de dólares, claro que su fortuna está valuada en 9.5 billones.
El empresario europeo en un fanático del básquetbol que salvó a CSKA Moscú de la quiebra y lo llevó a ser una de las potencias más grandes de toda Europa. Ahora, con su eventual arribo a la NBA intentará captar a algunos de los integrante de la tan deseada clase de agentes libres de 2010 - LeBron James, Dwayane Wade y Chris Bosh – como uno de sus principales objetivos.
Si bien el arreglo todavía necesita la aprobación de la liga, que tiene el derecho a vetar el acuerdo si quiere, ya se especula con ciertas “movidas” que Prokhorov tiene en mente. Una de ellas es la de contar con los ex jugadores lituanos Arbidas Sabonis y Sarunas Marciulonis como parte de la organización, y se rumorea que su anhelo sería contar con el gran Ettore Messina como entrenador de los Nets en un futuro, lo que convertiría al italiano en el primer entrenador extranjero en la historia de la NBA, con todo lo que ello implica.
Hace tiempo que las fronteras de la NBA se abrieron para unificar el mundo del básquetbol. Hoy el negocio llegó tan lejos que capitales extranjeros intentan entrar en el seno de la mejor liga del mundo.