Olvidar el pasado, mirar el futuro

La semana comenzó mal. Los fantasmas volvían a hacer de las suyas asustando a toda la capital. Antawn Jamison, por un problema en su hombro que lo dejará afuera un par de semanas más como mínimo, no iba a ser de la partida anoche en Dallas. Y este equipo, arruinado literalmente por las bajas en las últimas tres temporadas, ya sufría de antemano.

Pero fueron todas sonrisas, al menos en el debut. Lograron derrotar a uno de los máximos exponentes de la conferencia Oeste, los Dallas Mavericks, por 102 a 91 en condición de visitante recordando viejos tiempo. Si, Gilbert Arenas volvió a ser figura en Washington. El base solo había jugado 15 partidos en los últimos dos años, pero anoche se destacó con 29 puntos y 9 asistencias en el estreno de Flip Saunders como entrenador de los Wizards. “Lo hice bien. El entrenador me pidió que fuera yo mismo, que no permitiera que los de afuera me dijeron cómo tenía que jugar”, contó el “Agente 0”.

A pesar de sus problemas de faltas, Fabricio Oberto dio una gran mano en defensa. El cordobés se cargó rápidamente en el primer cuarto, y debió abandonar el rectángulo, lo que se repitió en el segundo. En total, el cordobés jugó 17 minutos y totalizó 5 puntos, con 2/2 en dobles y 1/1 en libres, 3 rebotes y 2 asistencias. Salió como ala pivot titular ante la ausencia de Jamison.

Andray Blatche hizo olvidar al ex North Carolina. Desde el banco, este gigante de 2,11 sumó 20 puntos (8/14) y 7 rebotes. Randy Foye, también suplente, sumó otros 19 tantos, al tiempo que Caron Butler metió 16 y tomó 8 rebotes. Los Wizards dejaron a Dallas en un 39,5% de cancha.

Dirk Nowitzki fue el goleador de la noche con 34 puntos, aunque terminó 10 de 25 en tiros de campo. También sumó 9 rebotes. Por su parte, Shawn Marion aportó 16 tantos, José Barea 13 y Jason Terry 12 (4/15).

Washington comenzó con grandes expectativas y no dejó que otra lesión bajara sus ánimos. El próximo viernes, en Atlanta, el equipo de Fabri visitará a quienes terminaran en la cuarta posición del Este el año pasado, y que además son rivales divisionales.


Un arranque pobre para Houston

Los Houston Rockets pagaron muy caro un momento de desconcierto total en el segundo cuarto y perdieron ante los Portland Trail Blazers por 96 a 87 en el debut en la temporada 09/10.

El partido fue muy pobre, plagado de errores y malos porcentajes, quizás por haber sido el primero de un largo camino de 82 encuentrs. Lo cierto es que el local, liderado por los 42 puntos del banco de suplentes, terminó sufriendo luego de haber ido ganando por 20.

Tampoco fue un buen arranque de Luis Scola, quien terminó con 3 puntos (1/6), 4 rebotes y 3 pérdidas. El Luifa no estuvo exento del mal juego de su equipo en los 22 minutos que vio acción.

El primer tiempo tuvo chispazos por parte del local en medio de un trámite discreto. Gracias al aporte de sus sustitutos y el aprovechamiento en defensa de la pobre ofensiva texana, Portland logró sacar 16 puntos de ventaja (46-30) a falta de 4:12 para el final de la primera parte.

Los Trail Blazers tuvieron un comienzo “furioso” en el segundo cuarto tras un parejo primer capítulo (23-23), en el que si bien se vio un juego un poco más prolijo por parte del local, los Rockets lograron nivelar el tanteador cerrándolo con una ráfaga de 8-3. Hasta ese momento, el equipo de Nate McMillan se apoyaba en los 7 puntos de LaMarcus Aldridge y Travis Outlaw, quien entró por el ala pivot cuando éste cometió su segunda falta.

Con un Outlaw imparable (7 pts seguidos), Portland metió un parcial de 11-0 en dicho inicio del segundo cuarto para adelantarse 34-23. Fue el peor momento de los Rockets en el partido: Se veían perdidos dentro del rectángulo de juego, sin una ida clara en ofensiva (3/12 de cancha, 5 pérdidas) ni balance defensivo. El alero fue la figura de la noche con sus 23 puntos (9/14 de cancha). Brandon Roy lo siguió con 20, más 5 rebotes y 5 asistencias, al tiempo que Greg Oden tuvo una gran noche defensiva, con 12 tableros y 5 tapas, pero perdió 7 balones.

Sin embargo, sobre el cierre de la primera mitad los Blazers volvieron a “tambalear” tras perder 5 pelotas en forma consecutiva y fallar un lanzamiento. Por suerte para ellos, aparecieron dos bombazos consecutivos de Steve Blake que dejaron el marcador 54-41 en el descanso largo.

El complemento contó con los mismos condimentos: Impericias y poco básquet. Siete pérdidas y 5/18 de cancha entre ambos equipos. Volviendo a hacer uso de los errores de Houston, Portland logró sacar una máxima de 20 puntos (72-52) gracias a un triple de Rudy Fernández, autor de 8 tantos, 4 rebotes y 2 asistencias.

De la mano de Aaron Brooks (19 pts) y Kyle Lowry (12) - lo mejor de Houston - que anotaron 6 puntos cada uno en el último cuarto, los dirigidos por Rick Adelman metieron un parcial de 13-2 para acotar diferencias, y a falta de 2:12 para el final la brecha fue de 6 (89-82). Sin embargo, con un gran pasaje de Greg Oden, con dos muy buena defensas más un doble (el único que metió en la noche) los Blazers respiraron aliviados y se fueron sonrientes al vestuario. Lo hecho en el segundo cuarto les había alcanzado.

Fotos: Gentileza ESPN.com y Diario Houston Chronicle.

Sebastián Ciano
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