El Madrid ganó y sigue con vida

El Madrid todavía no está muerto. O al menos Vistalegre todavía no quiere enterrarles. Y dos jugadores blancos todavía no quieren vacaciones. Dos tipos que representan a la perfección el estilo de un equipo que, para bien o para mal, a día de hoy, vive de eso. Y hoy, sirvió para forzar, como poco, el cuarto partido ante el Caja Laboral. Pase lo que pase en el resto de la serie, Llull y Felipe Reyes se podrán ir a casa con la satisfacción de haber podido ganar al conjunto vitoriano. Tal y como llegaba la serie, hasta eso parecía complicado.

El público que asistió al coso no se habrá arrepentido de haber pagado su entrada, porque el partido que allí se vivió fue, simplemente espectacular. Hubo buenos ataques, buenas defensas, aciertos y errores garrafales. De todo y opciones para ambos equipos... hasta que apareció Sergio Llull. Dos triples consecutivos del base y otro de Prigioni incendiaron Vistalegre y tumbaron al Caja Laboral. Un parcial de 17-5 que provocó que el marcador pasara del 63-62 al 80-67 en los últimos minutos.

El protagonismo final fue para Llull, pero fue Ante Tomic el que opositó a héroe desde el arranque. 10 puntos consecutivos del croata en el primer cuarto mantuvieron a flote al Madrid, nadando entre las dudas que provocaron las primera ventajas del Caja Laboral. A los blancos se les veía atenazados, con ganas de resarcirse, pero mucho miedo al error.

El conjunto vasco siguió plantando cara pero se mantuvieron los problemas para frenar a Splitter. Jaric demostró una vez más que ha dejado de ser útil para el Madrid y Messina parece haberse dado cuenta. Más minutos para Vidal y buen final de cuarto para el Madrid, pero insuficiente para llegar con ventaja al descanso (37-38).

Los blancos tiraron de galones con un 6-2 de salida y el Caja Laboral encontró la forma de frenar a Tomic, a base de continuos dos contra uno. Y ahí emergió la figura de Felipe Reyes. El cordobés se creció y el Caja Laboral equivocó su estrategia, abusando de los triples.

Y en estas, el Madrid se puso siete arriba en el último cuarto. Justo antes de que el Caja Laboral tuviese la victoria más cerca que nunca. Los de Dusko, haciendo su juego, con Splitter mordiendo abajo y un parcial de 0-10, tomaron el mando del partido. Con Prigioni desquiciado, el Madrid acumuló innumerables faltas y pérdidas que dieron alas al Caja Laboral.

Todo hasta que llegó Llull. Prigioni empata con un 2+1, Llull anota dos triples seguidos y el Madrid se lleva la victoria. Parece fácil, pero tiene mérito, porque el Caja Laboral demostró ser un equipo capaz de tumbar a los blancos. Al final, se equivocaron con sus ataques y el Madrid salva el ´match-ball´. El viernes se la vuelve a jugar.

. Pablo Prigioni (Real Madrid) titular: 9 puntos (1/1 en libres, 1/2 en dobles y 2/4 en triples) 2 rebotes, 4 asistencias, 2 recuperos, 5 pérdidas y 3 faltas en 25:08 minutos: Valoración 7.

. Walter Herrmann (Baskonia) suplente: 3 puntos (0/1 en dobles y 1/3 en triples) 3 rebotes, 1 pérdida y 1 falta en 15:41 minutos: Valoración 3.

Fuente: Marca.com