El Caja Laboral sorprendió y se quedó con el primero

El imbatible Regal F.C. Barcelona ya no es imbatible. El Caja Laboral logró una victoria épica en el Palau Blaugrana, 58-63 para fijar el 0-1 en la serie y poner en jaque al multicampeón equipo blaugrana.

El Caja Laboral llevaba días avisando. “Podemos ganar al Regal F.C. Barcelona”. Una afirmación tan lógica parecía todo un atrevimiento en estos días de tiránica hegemonía culé, de un Regal Barça al que nada parecía detener en su insaciable camino hacia las cinco copas. Bien, tenía razón.

No sólo ganó en el Palau sino que lo hizo dos veces. Lo hizo al comienzo del partido, con 16 minutos sublimes, comenzando con un parcial 0-12, mandando por 14 y dominando por 22-34 mediado el segundo periodo, y luego remontando cuando el Regal Barça parecía haber devuelto la normalidad al choque, con un 48-41 en el tercer periodo. Entonces apretó en defensa y jugó con cabeza fría para decidir en unos formidables últimos tres minutos.

Huertas asumió el control y con un triple, una suspensión a 1:08 y un robo crucial acto seguido, dio a los suyos el impulso necesario para ganar.

El Regal Barça no caía en casa en liga desde el 3 de enero de 2009, precisamente ante este mismo rival. También hacía mucho tiempo que no se quedaba en tan pocos puntos (58) ante su público. Ahora tendrá que remontar y a favor del Caja Laboral juega un dato de una poder histórico abrumador: 26 finales disputadas y 24 en las que el campeón fue quien se llevó el primer partido.

En un abrir y cerrar de ojos, el partido estaba 0-12 (m. 4). Poco después, la diferencia alcanzaba una atrevida máxima de 14 para los vitorianos (4-18, m.7). Pero... ¿Cómo? El Caja Laboral apeló a la presencia interior de Splitter y a la inspiración de dos de los jugadores más impredecibles de la final, Marcelinho Huertas y Mirza Teletovic. Dos canastones del base y dos triplazos lejanos del bosnio significaron el 0-10. Entre tanto, el Regal Barça no atinaba en nada. Pero nada de nada.

Estaban pasando factura los ocho días de inactividad desde el 3-0 al Unicaja y la pérdida de ritmo competitivo. O simplemente no le entraban los tiros. Rompió el hielo Ndong, con un palmeo y en el octavo intento blaugrana, pero la cosa no mejoró hasta que no tomó la alternativa el (profundo) banquillo, con triples de Mickeal, Lakovic y Basile como aire fresco para acercar a los de Pascual con un parcial 9-0 (13-18).

Otro triple del transalpino cerraba el primer periodo con 16-22, y cuando Morris acercaba a los suyos a cuatro (18-22), parecía que el partido reconducía su lógica inicial. Pero nada más lejos de la realidad: el Caja Laboral tenía en Splitter a una mina de oro ofensiva, jugando constantemente pick&rolls y aprovechando la capacidad del pívot para anotar o encontrar a sus compañeros si hallaba ayudas defensivas. Con su 12º punto y dos triples de un atinado English, el cuadro visitante retomaba un prometedor +12.

Entonces, el trío formado por Ricky, Navarro y Mickeal, los tres principales ases blaugrana, sumaba un total de –5 de valoración, con todos ellos en negativo. Pero fue precisamente su retorno a pista lo que cambió de nuevo el panorama, esta vez de forma radical con un parcial 10-0. Juan Carlos Navarro sacó faltas y encadenó cinco puntos, Ricky anotó un triple desde el lateral y Ndong puso su parte para irse al descanso con 32-34 y sensación de que el partido tomaba un cauce blaugrana.

Y así fue, con un vendaval catalán tras el intermedio. Ndong igualaba en un contraataque y un triple de Navarro daba la primera ventaja del partido (37-36 a 8:47 del final del tercer periodo). El Regal Barça tenía el control y Ndong volaba con un gran alley-oop... todo lo contrario que Ricky, que fallaba un mate en contraataque. Pero el Barça parecía poder permitírselo, ya que tenía el control total (43-36, m. 24), había convertido su defensa en una muralla y el Caja Laboral sólo era capaz de sumar dos puntos en los primeros cinco minutos del periodo.

Pero la frescura de Pau Ribas y una gran canasta de Teletovic cerca del final del tercer periodo mantuvieron al Caja Laboral con opciones (48-45), antes de que el genio bosnio clavase otro triple inexplicable para empatar a 48 con 9:40 de partido por jugarse.

El Regal Barça había entrado en otro bache, no le salía nada, pero el Caja Laboral no supo aprovecharlo. Dos puntos de San Emeterio y una pírrica ventaja (48-50) fueron lo único destacable en casi tres minutos, y entonces Navarro y Lakovic sacaron al Barça del letargo con dos triplazos (54-52).

Pero ahora el Caja Laboral sí atinaba en ataque y, en consecuencia, se llegaba a los últimos cuatro minutos con 56-56.

Entonces, una canasta de Oleson y un triple de Huertas dieron a los baskonistas un impulso vital: 56-61. Quedaban tres minutos, pero al Regal Barça se le acumulaba la tensión, y sólo podía sumar dos tiros libres de Navarro (58-61). Huertas se convirtió entonces en el héroe, enchufando una mágica suspensión a 1:08 y robando el balón de forma instantánea para acercar la victoria.

El Regal Barça ya no pudo hacer más y la victoria se fue a Vitoria por 58-63.

Fuente: ACB.com