“Son más los que me apoyan que los que me critican”
En el diario Clarín de hoy, también hay una extensa nota Emanuel Ginóbili que vale la pena leer. En ella cuenta que aún recibe algún mensaje que lo llama “mercenario” por no ir al Mundial, pero, en general, lo respaldan.
Desde el piso 16 de un hotel pegado al Obelisco, el mediodía de Buenos Aires luce soleado y congelado. Recién llegado a la Argentina, Emanuel Ginóbili charló mano a mano con Clarín con su ausencia en el Mundial de Turquía como música de fondo.
¿No te pica el bichito de querer jugar? Claro que pica, porque es lindo compartir cosas con los chicos. Pero el Mundial dura un mes y medio, por la preparación previa, y no empieza cuando se tira la pelota al aire. Y para eso no estaba listo este año. Ya van dos años sin pretemporada, por la operación (tobillo) y por la fractura (peroné). En dos semanas cumplo 33 años y no me da para jugar todos los años. Prioricé y la gente no termina de entender que en el básquetbol, unos Juegos Olímpicos importan más que un Mundial. Quiero disfrutar a mis hijos. Sé que me voy a comer los dedos, pero no fue algo que decidí porque sí, de rebelde o caprichoso.
¿Por qué priorizaste jugar otros Juegos Olímpicos? -Desde que viví el primero, siempre quise jugar otro. Si jugara el Mundial, arriesgaría mi presencia en el Preolímpico del año próximo. Prefiero ser un poco más pensante que emocional, esperar y jugar el año que viene. Es una decisión que muchos discuten por la gran chance que tiene Argentina por la cantidad de bajas. Y si hay tantas bajas, es por algo.
¿Te sorprende? No, porque no es fácil jugar todos los años. Argentina tiene un grupo único e increíble que viene jugando con pocas bajas. España también. Pero de la NBA no me sorprende. En Estados Unidos, los Juegos Olímpicos tienen un valor superlativo. No entienden todavía qué es el Mundial.
¿Por qué la FIBA no cuida su producto y sucumbe ante tantas bajas de jugadores NBA? No puede hacer nada, pero me alegro de que no haga nada. Como atletas, los Juegos tienen que ser lo más grande y algo único.
¿Te cuestionás tu elección? Hay momentos, pero termino convenciéndome de que sí, pero sé que va a llegar un momento de tristeza y desilusión. Sentiré que un poco dejo en banda a los chicos. Que van a ir a la batalla con un soldado menos después de lo que pasamos. Me va a costar, pero tomé la decisión correcta.
Una hoja de papel se levanta frente a Manu. Es la página 42 del miércoles 20 de enero, cuando en Clarín anticipó: “Sé que si no voy al Mundial, me van a terminar matando”. Manu suspira y responde: “Las críticas no terminan de entender mi proceso de decisión. Acá lo reventaban a Messi porque no jugaba bien en la Selección. Pero en Argentina somos así: pasionales, temperamentales, eufóricos”.
¿Cómo reacciónó el “hincha común” que se contactó con vos? Estoy un poco sorprendido. Son más los que apoyan mi decisión, me agradecen lo que pasó y dicen que están conmigo, que los que critican. Igual todavía me llegan mensajes acusándome de “mercenario”. Ahora es muy fácil bardear por Twitter o Facebook. No fueron tantos como pensé. Pero esperá que la pelota esté en el aire porque ahí espero alguno más… Dijiste que San Antonio no tuvo voz ni voto en tu decisión, pero Tony Parker reconoció que se bajó por las sugerencias de los Spurs...
Ellos no quisieran que juegue nunca para Argentina porque te tienen en una caja de cristal y no quieren que te lesiones. Quieren defender su producto para la temporada y no quisieran ni que manejaras un auto. En 2008 no querían que jugara porque estaba lesionado, pero me puse firme porque no me lo pueden prohibir y porque unos Juegos Olímpicos son lo más importante. Este año tampoco querían que jugara. Si me ponía firme, jugaba. Pero preferí estar en 2011 y 2012.
¿Te “autocensuraste” al no jugar ahora y avisarles que estarás en la Selección en 2011 y 2012? Se los dejé claro porque sé su postura. Mi intención es ser frontal y que no haya sorpresas para evitar un conflicto innecesario.
¿Cómo imaginás el Preolímpico 2011 en Argentina? Con una gran alegría. Tenía enormes ganas de jugar en el país. La última vez fue en 2001, cuando éramos un grupo de chicos con potencial y no se sabía qué iba a pasar. Jugar algo tan grande ante tu gente es genial.
¿Te imaginás lo que será Mar del Plata con la NBA en acción? Espero que no tengan que venir. Tendremos que ganarles a ellos, a Brasil o al que toque. Ojalá que los chicos salgan campeones del mundo y lo juguemos sin la presión de tener que clasificar.
¿Cómo te sentirás si Argentina sale campeón mundial sin vos? (risas) Con un sentimiento raro. Lo pensé. Estaría súperfeliz como hincha, por conocerlos y quererlos, pero perdérmelo sería durísimo. Igual voy a hinchar y a ponerme nervioso como siempre.
Scola dijo en Clarín que pueden ser campeones sin vos. ¿Coincidís? -Sí. No quiero sonar arrogante diciendo que Argentina es superior a Estados Unidos, pero son ganables. Estados Unidos perdió el favoritismo. Sin Kobe (Bryant), Wade, Lebron (James), Bosh y otros, la mayoría no jugó un torneo FIBA. Es un cambio brusco. Tienen una capacidad atlética, física y técnica superior a España, Argentina, Lituania y los demás, pero la van a tener complicada.
¿Y España sin Pau Gasol? -España es el favorito número uno. Tiene más recambio que nosotros, que vamos flaqueando en cantidad de jugadores. Pero en semifinales le podés ganar a cualquiera.