Por estar nuevamente entre los cuatro

Dar vueltas por el mundo y los torneos y no caerse de las semifinales desde hace 8 años es una hazaña de nuestro básquet que hoy busca mantenerse en esa condición reservada para los privilegiados.

Contra Lituania desde las 15 horas argentina (21.00 aquí en Estambul) con transmisión para el país de Canal 7, TyC Sports y Direct TV. Un plato de jueves a la tarde muy lindo para desgustar.

Y lo sabemos, vale la pena ver a la selección que reescribe su historia dorada a cada paso, con angustias y proezas. Vale la pena saber si Scola podrá seguir en metiendo de a 30 para darle la victoria a su selección. Vale la pena acompañar a un grupo que no le sobra nada y hace la unidad su bandera.

Argentina tiene elementos para soñar, y no porque ahora las casas de apuestas internacionales que lo daban como favorito a Brasil sobre nosotros, hayan cambiando el rumbo y ahora el favorito sobre Lituania sea la Argentina. Las pruebas para soñar es el juego, es la inteligencia táctica, es la ejecución de un plan y el temple de los jugadores. ¿Alcanza para ganarle a Lituania?. Si claro, también nadie puede discutir que será un partido de mucha paridad y dosis de sufrimiento.

Argentina tiene un plan trazado que es la fórmula para jugarle a un equipo más joven, cortar la posibilidad de convertir el partido en un correcalles, de quitarle vértigo, de obligarlos a los lituanos a jugar cinco contra cinco. Y desde allí someterse a otra clase de problemas.

Algunas situaciones del partido con Brasil podemos tomarlas como elementos indispensables a corregir. El cuerpo técnico y los jugadores coincidieron que a Brasil se le ganó con el plan trazado. Pocos injerencia de Tiago y de Anderson, nula capacidad de los internos de dañarnos y darle el tiro a Leandrinho y las responsabilidades a Huertas. Todo bien, así salió, pero Brasil hizo 89 puntos.

Argentina ganó porque tiene al extraterrestre (como bien lo definió Juan Gutiérrez), pero un plan defensivo que sale bien a 89 puntos me sabe a poco. A León Najnudel no le gustaban las previas, “para ganar hay que meter más goles que el rival”. Argentina parece aplica este concepto. Si el tanteador se da alto lo toma y lo usa. Arriesga un poco más (como los dos triples de Jasen) y si se da de bajos puntos arriesga menos y juega más.

No se puede esperar siempre 30 puntos de Scola (quiero olvidarme que hizo 37) para poder ganar, aunque este hecho parece estar en el ADN de esta selección. Depende de la producción del ala pivote. ¿Y sino que? Hasta ahora sólo en el primer partido con Alemania, Luis estuvo por debajo de otro jugador en el goleo. Y ganamos igual.

El problema lo tiene Lituania ¿verdad?. Es una situación difícil de trabajo porque Scola debe ser el jugador más scouteado del mundial y sin embargo la mete igual. Ojalá que en el partido Fabricio Oberto se sienta tan importante adelante como siempre lo es atrás. Argentina en esta recta final de tres partidos, para salir campeón tiene que poner 100% a un par de jugadores. Deben sumar más en ataque Prigioni y Oberto, para abrir nuevas vías de gol. Se puede ganar con muchos puntos de la figura pero es difícil salir campeón así.

Jasen que tiene el disfraz de Nocioni es otro que debe ir para adentro a buscar faltas, puntos, huecos, tiene que ser el perimetral que nos falta para complementar el trabajo todoterreno de Delfino. Argentina puede jugar mejor, crecer en su juego, incluso mientras busca en un partido de suma exigencia, la victoria. Honestamente creo que no hemos visto lo mejor y todos saben que pueden dar más. Es bueno decir que se puede dar más en el juego sin mirar el resultado siendo Argentina el tercer equipos más goleador (84.3 pts) del torneo detrás de USA y Serbia.

La defensa Lituana es dura con apenas 68 pts en contra, tiene buenos fundamentos individuales y gran talla para cerrar espacios. Es difícil tomarle rebotes ofensivos, lo que genera que empecemos a depender de los buenos porcentajes y además la defensa lituana es la provocadora de su mejor parte ofensiva: el ataque rápido. Son 3eros en el campeonato detrás de Estados Unidos y Puerto Rico en rebotes totales (39.2 por partido). En dicho aspecto Argentina comparte el lugar 16to con China y Nueva Zelanda con 33.8 rebotes por juego.

Ofensivamente ya hemos analizado a Lituania (78.2 pts por partido) en la nota pasada, ahora queda esperar el cúmulo de nervios que pueda o no tener una selección tan joven. Que el marco del partido los supere. Ayer cuando Eslovenia salió a la cancha contra Turquía dejó en evidencia que perdería. Miraba las tribunas y se reían. A los jóvenes eslovenos se les cayeron 15 mil turcos encima. Hoy no será igual, pero las instancias decisivas no son para cualquiera. Argentina tiene ese plus de la experiencia.

A primer Estados Unidos – Rusia será el aperitivo. Un seleccionado que debemos mirar con atención, porque cada vez está más firme. No tiene que ver ya con las individualidades sino como está jugando en equipo e interpretando la intención del juego FIBA, aprendiendo a jugar mundiales. Son cinco NBA de lujo todavía lo que presenta su quinteto inicial. Hasta aquí USA tiene el equipo más goleador (96 pts de promedio), más rebotero (41), mejor pasador (19.3 asistencias) y que mayor cantidad de pelotas recuperas por juego (10.8) ítems que meten miedo.

Además se le abrió una llave con relativa comodidad a los Estados Unidos teniendo que enfrentar a Angola (cuyo objetivo, aunque parezca mentira era perder por 20) y ahora a una selección rusa que no cuenta con figuras como Holden y Kirilinko. Rusia ya no domina como la potencia de otras épocas aunque su fuerte liga local siga sacando talentos. Este equipo carece de un goleador y reparte el gole: Timofey Mozgov con apenas 12.5 es el máximo anotador seguido por Kaun con 10.2 y Monya con 10.1.

Desde Estambul – Pablo Tosal
En Twitter @pablotosal
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