Es la hora de jugar

Sin haberse disputado siquiera un segundo de la temporada 2010/2011 ésta ya estuvo plagada de emociones fuertes, que tuvieron lugar durante el receso, más precisamente en el mercado de agentes libres.

El armado del plantel de los Miami Heat le dio de comer a todos los medios especializados. Fue una verdadera novela la salida de LeBron James de los Cleveland Cavaliers y su posterior llegada a South Beach, en donde intentará materializar su sueño de campeón.

Entre comentarios más negativos que positivos, el “Rey” partió hacia Miami para juntarse con Chris Bosh y Dwyane Wade y así formar un verdadero equipo de estrellas, cuyo techo no será otro más que el título de la NBA.

Junto a ellos, varios equipos de la conferencia Este lograron reforzarse de muy buena manera, como Chicago con la adquisición de Carlos Boozer, los Knicks con la de Amare Stoudemire o Boston sumándole a su banco jugadores de la talla de Shaquille y Jermaine O’Neal.

Asimismo, los Bucks de Delfino volverán a la carga con un plantel que retuvo la estructura que le dio alegrías el año pasado y añadió piezas que auguran una buena temporada; Orlando se mantiene como firme candidato, al tiempo que Atlanta será un dolor de cabeza para cualquier equipo si es que logra adaptarse a su nuevo entrenador.

En el Oeste, los Lakers profundizaron aún más su plantel para tratar de alcanzar el tricampeonato, algo que solo consiguieron con los títulos en 2000, 2001 y 2002; Luego hay que remontarse a la década de cincuenta, cuando se alzaron con los campeonatos del 52, 53 y 54, pero todavía en Minneapolis.

Los San Antonio Spurs volverán a meterse en la conversación con Emmanuel Ginóbili, Parker y Duncan bien físicamente, más la llegada de Tiago Splitter. Dallas intentará dar ese salto de calidad para el que se prepara cada año mientras que Houston, con la vuelta de Yao Ming, dirá otra vez presente.

Sebastián Ciano
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