El conjunto Blaugrana le dio una paliza al Real Madrid. Le ganó 95 a 75 como local. Con este resultado el conjunto dirigido por Xavi Pascual igualó al equipo Merengue en la primera posición. Pablo Prigioni fue titular y jugó 17 minutos en los que tomó 2 rebotes y repartió 1 asistencia. El mejor jugador del encuentro fue el esloveno JakaLakovic que sumó 17 puntos en el ganador.
El Regal F.C. Barcelona ha vuelto a triunfar en el clásico, en el duelo de colosos contra su archienemigo Real Madrid. Ha sido, además, una victoria múltiple: triunfo (95-75), liderato y de nuevo sensación de superioridad blaugrana ante un cuadro blanco que no acierta a hincarle el diente.
El Real Madrid llegaba al Palau Blaugrana como líder, en su mejor momento y con un Regal F.C. Barcelona algo mermado por las lesiones. En la mente blanca, olvidar su pesadilla de la Supercopa (89-55 para los de Pascual). Sin embargo, los primeros minutos tatuaron aquel recuerdo en la mente de todos los jugadores: 28-15 para el Regal Barça en los primeros 10 minutos, casi idéntico a lo sucedido en Vitoria en septiembre (26-15).
Pero el rodillo blaugrana continuó sin freno, aumentando poco a poco rentas para dispararse por 18 puntos en el segundo cuarto y por 24 en el tercero. Era un monólogo culé, un partido perfecto de los de Xavi Pascual. Les salió todo, desde los tiros imposibles de Grimau o Sada a las ‘bombitas’ de un Navarro de nuevo en plena forma.
Tres hombres marcaron verdaderas diferencias en el inabarcable bloque catalán: Lakovic, Lorbek y el propio Navarro. El base esloveno trituró la defensa blanca con 10 puntos casi seguidos y una excelente lectura de los espacios, especialmente contra los intentos zonales de Messina; el pívot estuvo inmenso en todas las facetas del juego, casi sin fallo; Navarro fue... Navarro. Así, sin más.
El choque coloca líder al Regal F.C. Barcelona, empatado a triunfos con los blancos, pero sobre todo envía un mensaje: sigue teniéndole tomada la medida a su gran rival, y eso puede contar mucho si se ven en la Copa o la Euroliga.
Baile blaugrana desde el inicio El Regal F.C. Barcelona apostó de inicio por cargar de balones a Kosta Perovic, su apuesta interior, y entre el serbio y Erazem Lorbek, su compañero de batalla, dispararon el electrónico desde los primeros minutos: 7-0 y, poco después, 13-3, con Felipe Reyes rumbo al banquillo con dos faltas prematuras. Navarro estaba entonado y asustaba con su mera presencia, anotando y liberando espacios. Tras cuatro puntos generados por La Bomba, Lorbek puso la guinda a un parcial 9-0 para poner al Regal Barça 22-5 y poner el encuentro en jaque.
El Real Madrid, al contrario que en la Supercopa ACB o en la más lejana Copa del Rey, no se rindió. Al contrario. Messina removió el banquillo y en un visto y no visto había puesto en cancha a 11 jugadores. El resultado, un parcial 0-8 con Tomic como principal referente (22-13). Sin embargo, un complicadísimo triple de Sada fijó el 28-15 al final del primer cuarto, déjà vu de la Supercopa directo al mentón blanco.
Lakovic y Navarro asumen el mando Por si fuera poco, Lakovic tomó el relevo erigiéndose en el ‘castigador’ madridista al anotar siete puntos consecutivos, haciendo inútil los intentos de zona 1-2-2 de los de Messina. Y cuando el esloveno, ya en 10 puntos, halló más dificultades para tirar, generó: dos asistencias para soberbios mates de Fran Vázquez y +17: 41-24. El Real Madrid insistía desde el tesón de D’or Fischer, su mejor hombre en la primera mitad, y la defensa. Así, sin elevar el ritmo ofensivo, el Madrid contuvo ligeramente el vendaval catalán y sólo Navarro mantuvo el tono en ataque, llevando el partido al descanso con 49-34 al anotar 6 puntos consecutivos y poner su cuenta en 10.
El Regal Barça sentencia y Navarro da el susto El inicio del tercer cuarto se presumía fundamental: la confirmación del claro triunfo blaugrana o la remontada blanca. Y fue lo primero, un nuevo recuerdo (super)copero. El Regal F.C. Barcelona entró en cancha como un ciclón y rápidamente puso los 20 de ventaja con una nueva canasta de Navarro (55-35).
El partido ya estaba visto para sentencia, y aun quedaban 18 minutos. La duda estaba en qué pasaría, de cuánto ganaría el Barça y qué veríamos en todo ese tiempo. Y lo primero fue un susto en toda regla: choque entre Ricky y Navarro y el de Sant Feliú, pitando hacia el vestuario con lo que por momentos se temió que fuese una fractura en la nariz. Afortunadamente se quedó en una fuerte contusión y Navarro volvió al banquillo sólo unos minutos después.
Mientras el Palau sufría por la nariz de Navarro, Lakovic continuaba dando picotazos en modo de puntos y asistencia, y Lorbek y Grimau brillando en todas las facetas. El marcador empezaba a asustar (67-43, m. 26), pero Sergio Rodríguez encontró el ritmo y Tucker la puntería para hacer un tímido parcial 0-8 que devolvía anímicamente al Madrid al parqué.
Sin historia en el último periodo Pero un nuevo acierto de Navarro y el paso adelante de Morris con tres triples seguidos devolvían una cómoda renta a los culés (83-57), en los que seguía intentándolo sin acierto el debutanteAlan Anderson, que acabó con –7 de valoración.
El Regal Barça llegó a ponerse 26 arriba (86-60), con otros tres puntos de Morris (ahora un 2+1), y los últimos cinco minutos se convirtieron en anécdota. Si acaso, mereció la pena ver en acción al luchador Felipe Reyes, ese hombre al que le duele cada minuto en desventaja.