Los Heat se sacaron la mufa justo ante los Lakers luego de perder cinco partidos en forma consecutiva. El resultado final fue 94 a 88 en el marco de un partido muy parejo y cambiante. Dwyane Wade fue determinante en el último cuarto mientras que Bosh encabezó a los suyos con 24 puntos, al igual que Kobe. El equipo de Spoelstra mostró síntomas de vitalidad y se clasificó a los playoff.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
Era una de esas noche que podía llegar a marcar la temporada, al menos eso se deducía del ánimo que mostraban en Miami luego de las cinco derrotas consecutivas con la que recibían nada menos que a los Lakers, el bicampeón defensor. Muchos preveían una catástrofe si se sucedía una sexta derrota, aunque sonara injusto ya que era muy factible ante un gran equipo.
Pero los locales mostraron cierta mejoría, y con mucho carácter en el último cuarto se llevaron una gran y reconfortante victoria ante Los Angeles por 94 a 88 que, al menos por un rato, les hizo sacar la cabeza del pozo.
Fue un encuentro muy parejo y electrizante, con 18 cambios de liderazgo y 16 empates, digno de dos equipos que de volver a enfrentarse lo harán en una eventual final de liga. La serie de temporada regular fue para los Heat 2-0.
En Miami, cada miembro de la terna de estrellas encontró su momento para brillar y ser importante para el equipo. Chris Bosh, uno de los más comprometidos durante la semana en la causa de sacar el equipo adelante - según contó el técnico Erik Spoelstra -, guió a los Heat con 24 puntos, producto de 10 de 17 en tiros de campo. Fue el sostén de los de South Beach, sobre todo en el primer tiempo, cuando ni LeBron ni Wade lograban engranar.
James, por su parte, hizo un partido inteligente sobre el final. Llevaba 10 puntos promediando el tercer cuarto, pero en vez de querer recomponer su imagen ante los Lakers y tratar de ganar el partido solo, algo que quizás hubiese intentado en Cleveland, supo que no era su momento y se dedicó a armar juego y asistir, por lo que terminó con 9 pases gol. Asimismo, cerró su planilla con 19 puntos (7/17) y 8 rebotes.
Wade, mientras tanto, terminó siendo determinante y fue el que se llevó la nota final de la transmisión de TNT. El escolta terminó la noche con 20 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias y 4 recuperos en 39 minutos; Lanzó solo 9 de 23 de cancha, sin embargo, en el último cuarto brilló para darle la victoria a Miami: Clavó 8 tantos y fue autor de la jugada de la noche, al robarle un balón clave a Bryant a falta de un minuto y medio para el cierre.
Fue la tercera vez dentro de los cinco minutos finales en la que Miami pasó al frente gracias a Wade. Primero les dio la ventaja 82-80 con una penetración y 4:56 en el reloj. Luego, otra “escapada” del número tres puso al frente a los Heat 84-82 con 4:26 por jugarse. Más tarde apareció Kobe con dos triples, sus únicos 6 puntos del cuarto. El segundo pareció lapidario, de 8 metros y ante la marca, que igualó el juego en 88 con 2:26 para el final.
En la jugada siguiente Bynum tapó a Bosh y aparecieron los fantasmas de la derrota, pero rápidamente los esfumó Wade con esa jugada defensiva que terminó en volcada de LeBron que puso el marcador 90-88 y significó el triunfo de Miami, que con un récord de 44-21 ya aseguró su presencia en los playoff.
En Los Angeles, que venía de 8 victorias consecutivas, los máximos anotadores fueron Bryant y Pau Gasol con 24 y 20 puntos, respectivamente. Por su parte, Bynum fue autor de 13 tantos y 12 rebotes. Con esta derrota, los dirigidos por Phil Jackson - terceros en el Oeste - ampliaron su desventaja con respecto a Dallas (derrotaron a New York) a un juego y medio.