Las dificultades para encontrar relevo a Ricky Rubio obligan a ampliar las opciones. Entre las prioridades figuran Jeremy Pargo, Vassilis Spanoulis y Marcelinho Huertas como candidatos. Pero ya se piensa en un Plan B. Pablo Prigioni y Bo McCalebb, aparecen como alternativas a los grandes objetivos para el puesto de base del último campeón.
Sustituir a un crack como Ricky Rubio no es fácil. El FC Barcelona Regal lo sabía, pero lo cierto es que no esperaba topar con tantas dificultades como las que está encontrando para cubrir la marcha a la NBA del joven prodigio de El Masnou. Jeremy Pargo, Milos Teodosic, Vassilis Spanoulis, Marcelinho Huertas,... todos los nombres que el equipo azulgrana tenía escritos en lugar prioritario de su agenda para rellenar la vacante en la posición de base han ido difuminándose poco a poco por las más diversas circunstancias. Por ello, el club azulgrana ha empezado a estudiar un plan B, en el que han cobrado fuerza los nombres de Pablo Prigioni y Bo McCalebb.
El base argentino, que ha finalizado su compromiso con el Real Madrid, y el ´playmaker´ del Montepaschi Siena no eran objetivos preferenciales del Barça Regal por diferentes motivos. El primero es un jugador que siempre ha gustado a Xavi Pascual, pero se considera que está en la recta final de su carrera. A sus 34 años su rendimiento ha ido menguando progresivamente a la vez que aumentaban sus problemas físicos. De hecho, el ex madridista está estos días recuperándose de una pubalgia para intentar sumarse en breve a la concentración de la selección argentina.
Nadie discute la facilidad de Prigioni para leer el juego y encontrar al compañero desmarcado, ni su garra o su experiencia, pero existen dudas sobre su capacidad para llevar el timón de un equipo como el azulgrana, al que le gusta correr y mover el balón con velocidad. A su favor está que conoce perfectamente la Liga ACB y que no es una operación muy costosa, ya que no habría que pagar traspaso y el caché del argentino se ha reducido notablemente.
Además, Prigioni dispone de pasaporte español, lo que resultaría muy valioso al Barça Regal si finalmente se aplazan las negociaciones y se opta por prorrogar excepcionalmente por una temporada el marco de contratación vigente hasta ahora. A día de hoy el equipo azulgranacuenta con cuatro nacionales (Sada, Navarro, Rabaseda y Vázquez), uno menos de los que necesitaría en una plantilla de doce jugadores bajo la última reglamentación.
McCalebb, muy difícil
El caso de Bo McCalebb es totalmente diferente. El estadounidense es uno de los mejores bases del basket europeo y está en el mejor momento de su carrera. Es rápido, potente, listo, tiene pasaporte europeo (macedonio) y sólo tiene 26 años. El problema es que tiene contrato con el Montepaschi, un equipo que sabe blindar muy bien a sus perlas. Ya lo hizo hace un tiempo con Terrell McIntyre, al que el Barça nunca logró sacar de Siena en sus mejores años, y ahora vuelve a pasar con McCalebb.
La salida no es imposible, pero el Barça ya sabe que la operación, incluida la ficha del jugador en el primer año, puede ascender hasta unos 4 millones de euros. Una cantidad muy elevada, y más en época de recortes como la que vive la sección. Eso sí, el club azulgrana se aseguraría un base de primer nivel con muchos años de gran basket por delante.