Luz verde

La primera mitad de este cuarto inicial encontró, como se previa, a Brasil dominando las acciones con el pivot Rafael (no fue titular Splitter) haciéndose fuerte en el poste bajo y consiguiendo seis puntos en cuatro minutos. Sin embargo, Cuba se animó en estos primeros minutos. Lo hizo de la mano de su mejor jugador.

El interno Luis tomó responsabilidades y pudo hacer daño en el poste bajo. Cuando el reloj marcaba 4 minutos para el final del período Brasil ganaba 19 a 11. Rubén Magnano continuó con la rotación de jugadores que se planteó antes del partido. Ya en este cuarto ingresaron jugadores cómo Torres o Dos Santos que hasta el momento habían tenido poca o nula participación.

A pesar del trabajo de Luís en la “Zona de gigantes” Cuba se encontraba permanentemente con sus limitaciones tanto defensivas como ofensivas. Mientras tanto, el equipo Verdeamarelho, integrado en su gran mayoría por suplentes tampoco deslumbraba ni se llevaba al rival por delante pero con lo que hizo le alcanzó para irse al primer descanso corto ganando por 6: 26 a 20.

El inicio del segundo cuarto fue parejo. Tanto el período anterior como los primeros minutos de este no mostraron a un Brasil arrollador. Todo lo contrario. Es cierto que el conjunto sudamericano jugó todo este tiempo con suplentes pero no comenzó como se esperaba. Cuba, mientras tanto, repartía su goleo entre el dominante Luis(figura indiscutida del cuarto) y los perimetrales Piñeiro y Mestre, de buen trabajo. Promediando el cuarto la diferencia brasileña era de sólo 3 puntos (33 a 30). Para el cierre, con puntos llegados de la mano de Benite, Brasil logro alejarse en el marcado a 15: 52 a 37. El goleador de este primer tiempo fue Luís con 20 tantos.

Por lo que se vio en el inicio del tercer cuarto a Magnano no le gustó el funcionamiento de los suplentes de Brasil. Por eso para empezar saltó a la cancha con Huertas, Splitter y Machado. Y, claro, la ventaja se estiró por que se le hizo imposible a la defensa cubana detener la envestida de los de verde. Llegando a la mitad del cuarto Brasil sacó 20. El ataque cubano empezó lentamente a apagarse y la defensa comenzó a hacer agua por todos lados. De esta manera, el cuarto terminó 73 a 51 a favor de los de Sudamérica.

En el último cuarto Brasil salió confiado y Cuba se acercó peligrosamente a 8 cuando restaba un minuto y medio. Sin embargo a los de Ariel Amarillo no les dio y Brasil lo cerró con oficio. El resultado final fue 93 a 83. De esta manera Brasil consiguió ser segundo en su grupo con tres victorias. Mientras que Cuba se fue del torneo sin triunfos.

Martín Candalaft
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