Déjà Vu

El 12 de diciembre, es una fecha en que lamentablemente para Peñarol es muy temprano para decir algo definitivo en la Liga Nacional. La experiencia de la rica historia de la Liga indica que ni los que son buenos pueden darse por hechos, ni los que son malos deban seguir siéndolo. Pero si pudiera trasladarse mentalmente, Peñarol pagaría por estar ahora en abril, al comienzo de los play off. En el nivel que exhibió en este cuarteto de partidos de local que culminó con una gran zaranda nada menos que a Quimsa.

Repasemos: Venía de perder muy mal ante Ciclista Olímpico de la Banda con el debut del “Chapu” Nocioni. Visitó a Atenas en Córdoba para dar una respuesta de carácter y lo logró (59-75) y desde allí edificó una mejoría notable como equipo. Ganó el Súper 8 luchando y poniendo: “a puro huevo” dijo sin eufemismos Sergio Hernández, rompiendo su habitual protocolo. Pero era una verdad insoslayable. Fue por un punto ante Bahía Estudiantes, por dos frente a Obras y tres en la final contra Libertad.

Luego tuvo cuatro partidos seguidos de local y todos contra rivales de fuste, tres de ellos candidatos al título. El primero fue el que más le costó: La Unión de Formosa, luego mejoró su ofensiva contra Regatas, la defensa ante Libertad y jugó un partido completo anoche frente a Quimsa. Es decir no paró de crecer.

El nivel que hoy muestra Peñarol es para el momento del Play Off. Pero hoy es 12 de diciembre y aunque el miércoles ante Obras regresen al equipo Nicolás Lauría y Kyle Lamonte el buen nivel deberá sostenerlo en el tiempo al menos 5 meses más. Aunque la noticia es HOY.

Anoche lo sufrió Quimsa. El conjunto santiagueño buscó variantes de movida con la nueva disposición de Carlos Romano para el quinteto inicial: Aguirre, Robinson y Pellot en la media cancha con Tintorelli y Williams en el juego interior. Un quinteto muy alto, de mucha capacidad para cambiar en las cortinas, en búsqueda de quedar cara a cara con sus defendidos y crear un buen bloque defensivo.

Los sueños iniciales de Quimsa se esfumaron en apenas tres minutos. Peñarol lo atacó adentro (Con Leiva) y afuera (con Leo) y le abrió una brecha importante (13-4). Romano no esperó mucho y mandó rápido a Lo Grippo al campo y Quimsa mejoró por dos situaciones claves. La primera, es que Leiva siguió jugando para golear (erró dos seguidas) y se olvidó de que su presencia aglutina marcas y abre espacios. La segunda fue el tempranero cambio de Castets por Campazzo. Con el aplomo de Aguirre y una mejor distribución del balón, Quimsa cerró el primer cuarto con un parcial favorable 4-19 para pasar al frente 19-23 al final del primer cuarto.

La brecha se abrió hasta los 8 puntos al inicio del segundo segmento (19-27). Peñarol perdió las primeras dos pelotas del cuarto y erró los dos primeros ataques pero renació con su defensa y dos cambios: el ingreso de Barrios y Safar. Esta vez el zurdo no estuvo fino con el aro pero se conectó con Barrios y dio 3 asistencias. Campazzo dio vuelta el juego con su velocidad y Leo metió el triple justo para sustentarlo todo: 31-27 con parcial 12-0 para que Romano pida minuto.

En los últimos cinco minutos del primer tiempo, Peñarol logró sacar otra ventajita con un mejor cierre de cuarto aprovechando que Lo Grippo (0/4 en dobles) y Robinson (2/6) no estaban finos en el segmento. Quimsa tiró 5/18 de campo en el 2do cuarto, mitad por la defensa de Peñarol, mitad por impericia propia.

En el inicio del tercer parcial Peñarol tomó definitivamente las riendas con distancia que oscilaron entre los 10 y los 14 puntos. Negoció esa diferencia porque el regreso de Leiva fue muy bueno (9 pts), haciendo uso de su larga presencia en la zona pintada, el pivote disfruta de un gran momento, encima Campazzo lo busca y lo alimenta permanentemente.

La visita probó con la doble base entre Salles y Aguirre como mejor receta para recuperar un juego que estaba partido por la defensa rival. Fue la mejor solución, porque con Schattmann o Robinson de escolta no tuvo soluciones. Los dos bases se prestaban mejor el balón y Quimsa mejoró su ofensiva (Lo Grippo 10 pts), pero no podía contenerlo a Peñarol atrás.

Al ingresar al último cuarto la distancia era de 9 (66-57) y allí Peñarol tuvo un cierre a toda orquesta con un quinteto de alto nivel: Campazzo, Safar, Mata, Leo y Leiva. Todos aportando soluciones en los dos costados de la cancha. Marcos Mata se burló de sus defensores en los individuales. Leo Clavó dos triples por arriba de la marca, Campazzo defendió, goleó y asistió para ser doble figura y Leiva se comió a todos en la zona pintada. Demasiado para un Quimsa que al verse 14 abajo faltando 7:40 minutos (74-60) ya sabía que no podía controlar tanta destreza.

Romano frenó el juego un par de veces para recordarles a sus dirigidos que la diferencia entre Peñarol y Quimsa importa para la tabla y la revancha, de todos modos la energía que desplegó el “milrayitas” fue la de un equipo lleno de convicciones. Luce arrollador y está en su mejor nivel. Y de no mediar una explosiva aparición de Pellot Rosa (tres triples seguidos a falta de dos minutos) la distancia se hubiera hecho mucho más dolorosa.

Síntesis
Peñarol (95): Facundo Campazzo 16, Derrick Roland 2, Marcos Mata 21, Leonardo Gutiérrez 18 y Martín Leiva 19 (FI) Selem Safar 5, Mariano Castest 0, Pablo Barrios 10, Franco Giorgetti 0, Alejandro Reinick 4. DT: Sergio Hernández

Quimsa (78): Nicolás Aguirre 6, Bernard Robinson 9, Jesse Pellot Rosa 13, James Williams 11 y Damián Tintorelli 9 (FI) Hernando Salles 14, Leonel Schattman 0, Diego Logrippo 16 y Gabriel Deck 0. DT: Carlos Romano

Parciales: 19-23, 42-34, 66-57
Árbitros: D. Rougier y R. Castillo
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”

Foto: Majo Gil (mjgil@pickandroll.net)

Crónica: Pablo Tosal
En Twitter @pablotosal
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