Quilmes (1) - 9 de Julio (2) (4to juego - Permanencia)

El miércoles se jugó un partido emocionalmente muy alto, para los jugadores, para los hinchas, para todos. Reponerse de esa situación de desgaste es la principal clave para hoy. El descanso, la confianza y los estímulos son la parte más importante de la previa del juego cuatro.

Mantener la tranquilidad no es algo que se pueda lograr solo con pedirlo, con declararlo. Los nervios no se manejan, se sufren y ambos equipos buscan (dentro de ese contexto de nervios) sacar lo mejor para hacer lo que se pueda. Por eso el tercer punto fue distinto. Porque podía tener un final la serie, porque podía irse al descenso Quilmes y podía salvarse 9 de Julio.

La situación extrema de tener en 40 minutos la posibilidad de que se llegue a un final condicionó a los dos. Y esas situación se reflejó en el juego de los dos equipos y en algunas individualidades. El caso de Matthews por el local, el caso de Cowan por la visita.

Así también lo piensa Beto Martínez, el entrenador de Quilmes que sostiene que “Acá pasa mucho por la inteligencia emocional, que es muy importante para los momentos en los que uno tiene su ventaja. Hay que saber aprovecharla, porque después vienen los momentos malos. Hay veces que los jugadores se paralizan y, cuando ven el video, no pueden creerlo. Pero eso pasa en este tipo de instancias, en las que hay mucho más por perder que ganar. Es muy traumático. Uno debe tener equilibrio para saber transmitirles confianza. Porque también tuvimos que tener una reacción para ganarlo. Los 19 puntos que habíamos sacado se esfumaron en algo más de un minuto. Y no sólo fue por los nacionales, también incluyo a los americanos”.

De todos modos, en ese contexto de tensión hubo un jugador muy distinto a todos, que marcó la diferencia y declaró quien debía ganar: Phillip Mc Hopson en su mejor actuación individual de la temporada. Sumó puntos, rebotes y asistencias, pero más que nada tomó la decisión que pocos tomaron: la de cargarse la responsabilidad de tomar decisiones.

Al respecto el entrenador de Quilmes lo ve así: “A principio de temporada se dio con que no podía (por Mc Hopson) con las expectativas que se había creado para jugar la Liga Nacional. Él mismo notó que no era fácil, y que no iba a ser como en el TNA. A su vez, son cosas que se fueron dando, madurando y puliendo. Y hoy es la verdad, porque en los playoffs se ve la verdad del jugador. Ahí se sabe quién es quién. Los managers saben que, a la hora de fijarse en un jugador, tienen que apuntar a esta etapa de la competencia. Anoche le di confianza para que tomara las decisiones finales y tuvo un gran juego. Las supo ejecutar bien y con inteligencia, porque no es sólo cuestión de tirar. Supo tomar los tiempos del partido y entregó asistencias faltando dos segundos”.



Es de esperar que 9 de Julio haya trabajado mucho en dispositivo “anti Hopson” para esta noche y buscará tapar la principal vía de gol quilmeña, para ello deberán aparecer otros protagonistas, como Clarence Matthews que dijo ausente en el juego 3 de la serie. Beto Martínez sostiene que “Matthews era la figura del equipo, la primera opción y creo que eso le pesó. Él, en la Liga Nacional, nunca tuvo protagonismo. Ahora tenía que hacerlo y creo que le pesó. Vamos a hablar con él y le vamos a dar nuevamente la confianza que necesita para que pueda jugar naturalmente. Pese a eso y estando mal, igual preocupó al rival. Lo mismo que Truscott, que falló tiros muy fáciles abajo del aro producto de los nervios. Yo charlo mucho con los americanos. Antes de que lleguen los estudio mucho. Por ahí en la serie regular anotan 20 puntos, pero lo mismo les pesa. Ellos saben que están jugando un partido a todo o nada y que su planilla va a estar en el mundo como un éxito o una frustración. A eso el jugador lo siente. Uno tiene que ser positivo y tratar de exprimir lo mejor de cada uno”.

El propio técnico pone énfasis en la situación emocional del play offs y recuerda que “Es la tercera vez que juego esta instancia, no es la primera vez. Hasta aquí, todas las veces fueron con éxitos. Por eso sé lo que les pasa emocionalmente. Esto no se puede explicar, hay que vivirlo. Del otro lado, (Jazwin) Cowan no tuvo una noche feliz. Pero en Río Tercero, junto a (Josimar) Ayarza, se transforma. Pasa de los dos lados. El que menos dude y tenga más naturalidad para ejecutar se va a llevar la serie. Lo que nos falta a nosotros es un techo, porque no llegamos al máximo de nuestras posibilidades. En cambio, me parece que 9 de Julio es eso. A su vez, eso no quiere decir nada. Hay que ir juego a juego. Y la ventaja la tienen ellos”.

Por su parte 9 de Julio necesita que aparezca Jaz Cowan que tuvo un partido flojo en el primer juego (1/6 de campo en 19 minutos) y es clave en la estructura de su equipo. Las soluciones llegaron en manos de Martina y Masieri pero sin los extranjeros no podrán sumar chances importantes de ganar la serie. Tampoco Clamcy fue el de Río Tercero aportando muy poco. Solo Ayarza estuvo en las líneas esperadas (13 puntos aunque nada desde el tercer cuarto en adelante)

Lo mejor del conjunto “patriota” viene de su media cancha con Diego Gerbaudo, Gastón Torre y Gastón Luchino. Hasta acá vienen soportando el peso de la serie. De todos modos entre la actuación de Masieri y Martina, más los muy buenos minutos que sumó Orlietti, el entrenador Seba González sabe que tiene respuestas en el banco de suplentes al momento de ser llamados a actuar.

Lo que deberá buscar hoy el visitante es jugar con los nervios del local y no al revés. Le pesó mucho el comienzo del partido y no aprovechó el mal arranque de Quilmes. Le perdonó la vida cuando Quilmes hizo solo 5 puntos en los primeros 6 minutos de juego. El propio conjunto “celeste” estaba atado. Ahora 9 de Julio sabe que si pierde deberá volver a un 5to en casa donde cualquier cosa puede pasar, por eso deberá gasta la bala que le falta esta noche con inteligencia.

Formaciones
Quilmes: Nicolás Ferreyra, Phillip Mac Hopson, Gregorio Eseverri, Axel Weigand y Clarence Matthews. DT: Luciano Martínez.

9 de Julio: Diego Gerbaudo, Gastón Luchino, Josimar Ayarza, Jazwin Cowan y Sam Clancy. DT: Sebastián González.

Hora: 21:30
Árbitros: Alejandro Ramallo, Roberto Smith y Fabricio Vito.
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
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Pablo Tosal
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