LeBron James confirmó estar abrumado y muy emocionado por haber podido jugar un partido ´para´ Barack Obama. La estrella de los Heat deja claro que para él era algo impensable: “Sueñas con jugar en la NBA y con anotar sobre la bocina una canasta, pero no sueñas con jugar para el presidente de Estados Unidos porque lo consideras imposible”.
El partido contra Brasil (80-69) sirvió a los Estados Unidos para algo más que sentirse halagados con la presencia de Obama. Competir contra jugadores interiores poderosos como Splitter o Varejo ha sido una buena prueba para los de Coach K.
El propio seleccionador de Estados Unidos lo ha valorado como un buen test: “Los brasileños han hecho un gran trabajo. Han peleado y nos hemos tenido que esforzar mucho con sus pívots. Durant y Carmelo han tenido que jugar con ellos y eso desgasta mucho más. Ellos han demostrado que pueden hacerlo”.
Chandler, el único pívot puro de EE. UU, también ha dejado claro lo positivo del encuentro: “Era algo que esperaba desde que llegamos aquí, desde que empezamos la preparación. No creo que estemos mal por la falta de interiores. Ha sido nuestra primera prueba real y ellos nos han mostrado diferentes formas de atacar y nos hemos ajustado bien”.
Una defensa, que consideran fundamental para sus aspiraciones al oro en Londres 2012: “Tenemos que seguir con esta intensidad defensiva tan alta, tan fuerte. Ese es el camino para que ganemos victorias. Tenemos algunos de los mejores tiradores del mundo y si nos mantenemos fuertes en defensa, seguro que causamos muchos problemas al resto de rivales”, explicaba Chris Paul.