La casa está en orden

Nunca des por vencidos a los Grizzlies ni aún vencidos, esa es una reglar que seguramente conocen todos los equipos de la NBA; Anoche, los San Antonio Spurs controlaban el juego a gusto luego del segundo cuarto, pero necesitaron de un suplementario para derrotar a Memphis 93-89 (85) y asegurar su ventaja de localía con la serie 2-0 a su favor.

Luego de una diferencia muy holgada en el primer juego que nada tiene que ver con lo que se espera de esta serie, San Antonio volvía a sorprender con 15 puntos de diferencia (46-31) al término de la primera mitad. Su capacidad defensiva dejó a la visita en un escandaloso 26% de cancha, mientras que la solidaridad en ataque – 16 asistencias en 18 conversiones – los llevó a un parcial de 12-0 con el que tomó las riendas del juego.

Pero las cosas cambiaron en el último cuarto. Los Spurs se secaron, y Memphis lo aprovechó para volver al juego y empatarlo con un acción individual de Mike Conley, quien también enmudeció a todo el AT&T Center. Pero en el suplementario apareció el interminable Tim Duncan, con 6 de los 8 puntos de su equipo. Los Spurs sacaron rápido una pequeña luz de 4 puntos y nunca más cedieron el liderazgo.

El primer cuarto tuvo el trámite que todos esperan para una serie de éstas características, sobre todo tratándose de una final de conferencia. Todo muy parejo, donde las defensas estuvieron por encima de las ofensivas. Ambos erraron mucho: San Antonio convirtió solo 7 de 22 lanzamientos, mientras que Memphis encestó apenas el 28% de sus disparos al aro (5/18).

Marc Gasol comenzaba a hacerse dueño en medio de un trámite sin muchas luces (6 pts y 6 reb), pero Randolph mantenía la misma tónica del primer juego (1/3). Para el local ya no había tanta fluidez en ofensiva, Parker no lograba ser la manija (2/7) y el banco no aportaba muchas soluciones.

El segundo cuarto fue distinto porque San Antonio tomó cartas en el asunto, y mientras los Grizzlies seguían sin calibrar la mira, los Spurs castigaban en el aro ajeno. Así fue que metieron un parcial de 12-0 para escaparse 43-30 y tomar definitivamente el liderazgo del juego, en el marcador y en el trámite. En defensa dejaron a Memphis con un 26% de cancha, mientras que en ataque los de Gregg Popovich le mostraron a mundo cómo es jugar en equipo, y anotaron 18 goles de campo producto de 16 asistencias. De esta manera se fueron con ventaja de 15 (46-31) al descanso largo.



En el tercer cuarto San Antonio se mantuvo de la mano de Tony Parker, factor desde el armado con sus hirientes penetraciones y subsiguientes asistencias (8 en el parcial), aunque también tenía tiempo de anotar y sumaba 4 tantos. Con dos triples seguidos, de Leonard y Green, sacaron una ventaja de 54-37 que llegó a ser de 18 (59-41) a 7:31 del final del período; Pero en el último chico cayeron en la garras de los Grizzlies.

Parker, figura con 15 puntos y 18 asistencias (marca personal en playoff) dejó de gravitar, los Spurs se perdieron y comenzaron a ceder terrero; Tiraron 4/19 de cancha (21.1%), y con un parcial de 14-5 la visita se colocó 78-83 a cinco minutos del final.

Zach Randolph fue clave en dos doble y faltas, luego Ginóbili le cometió una flagrante a Tony Allen que permitió que Memphis se pusiera a dos (85-83) y le dio paso a Mike Conley para empatar el juego a falta de 18 segundos.

Con los nervios de punta, a los Spurs les costaba tragar porque sabían que viajar a Memphis con la serie 1-1 no un buen escenario. Sin embargo, todavía había tiempo para el show de Duncan. Metió 6 puntos consecutivos y le dio vida a San Antonio; Una vez más se hicieron fuertes en su propio aro y permitieron solo dos goles de campo de los Grizzlies; Así, lo definieron desde la línea.

San Antonio mantuvo la ventaja de localía, un dato para nada menor. Con una supremacía irreal en el primer juego y con mucho sufrimiento en el segundo, aunque con destellos de muy buen nivel. El sábado volverán a verse las caras, ahora en el FedExForum, donde todavía los Grizzlies no perdieron en lo que va de los playoff.

Solo cuatro equipos lograron ganar una final de conferencia tras haber perdido el primer juego por 22 puntos o más. San Antonio no querrá que Memphis siga haciendo historia.

Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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