Ramella: “No es un buen momento institucional”

El soñado ascenso

En relación a Lucas Ortiz sostuvo: “Lo digo con mucho respeto, pero era un jugador que pedí porque sabía que se podía desempeñar de uno o de dos, que para mí era muy importante. Sabía que tenía un gran potencial, de mucha proyección y que si se lo ponía bien de la cabeza podía rendir bien. Las dos cosas se dieron y, si bien es carente en algunas cosas, tiene potencial para mucho más. En general, había algunas críticas, se preguntaban para que venía, pero tenía otros planes para él porque sabía que podía dar muchas cosas si estaba contento. En las primeras charlas que tuve con él me demostró mucho interés de venir a Quilmes y eso se motivó mucho. Relegó otras ofertas, resignó plata por venir a Quilmes”.

Sobre lo que significa jugar en Quilmes, indicó: “Maxi Ríos resignó plata, Cadillac también, igual que Ortiz. Eso también hace que los jugadores tengan un plus, porque por algo eligen esto y si lo económico no es la prioridad, por algo juegan. La ciudad influye, Quilmes tiene una historia en la Liga Nacional y a los jugadores que les gustan los desafíos los seduce. Cuando el jugador elige venir a un club como este tiene que tener un desafío y por algo vienen”.

También habló en primera persona: “La clave es el entrenador y uno, que recién está empezando en esto, está aprendiendo y aprender esto es muy difícil. Me gustaría preguntarle a la Oveja Hernández como maneja a Leiva o Gutiérrez y no como defiende el pickandroll. Eso es tener manejo de grupo, de trayectoria, de intuición más que de conocimiento. Lo que le diría a un entrenador que empieza es que tiene que conseguir eso en el jugador, que deje sus cosas personales en pos del equipo, que deje de querer hacer veinte puntos. Nosotros hicimos eso con Ríos que venía de ser el goleador del TNA, hacer veinte puntos por partido le daba de comer y lo relegó en pos del equipo. Se entiende si está en una estructura, en un sistema, ahí nadie va a decir nada y tiene que estar acompañado de un sacrificio defensivo. Si pasa eso, no hay conflictos, si los tiros están bien tomados y alguno tira más o menos que otro, no hay conflictos”.

En relación a las grandes virtudes de Luca Vildoza afirmó: “Lo dije el primer día y lo digo ahora. Vildoza terminó demostrando que podía ser el base del equipo y ganó una final de TNA. Mi función solamente fue sacarle la presión y que se preocupe por jugar. El talento le sobra y no tenía que tener la presión de llevar el equipo adelante. Tenía que tener la posibilidad de hacerlo, no la presión. Hubo momentos en los que trastabilló pero no tenía que jugar siendo el líder, la presión pasaba por el Tolita, Ortiz, él solo se preocupó por jugar y terminó siendo una bestia, haciendo lo que él hacía con una tranquilidad grande en este nivel. Ayuda que le digan que es una bestia, que esté tranquilo, que juegue, que no tenga presión, no la tiene que tener, ya va a estar preparado para tenerla. No tenemos que darle la responsabilidad de que sea el base titular de la A porque eso es mandarlo al frente, hay que acompañarlo en el proceso”.

También analizó sus defectos: “Está claro que su defensa no es su virtud, pero es mejorable. Tiene lo más difícil, el talento, la defensa se mejora. Y lo otro que le falta es partidos y tiempo para transformarse en un conductor. Muchos partidos lo tuvimos corridito de dos y fue donde mejor respondía. En el cuarto partido en Instituto mete tres triples fundamentales jugando de dos con Cadillac de uno. Y cuando lo dejaron, demostró quien es. Me preocupo por eso, lo demás lo tiene, el talento, el físico, es obediente, caradura, es un pibe excelente. Hay que tenerle paciencia, no hay que hacerle quemar etapas, porque ya demostró que está capacitado”.

Otro de los pibes quilmes, Tayavek Gallizi, fue analizado por el coach: “A Taya no le sobra talento, pero no va a necesitar mucho talento. Tiene una proyección tremenda, cumplirá un rol y va a ser uno de los futuros pivotes de nuestro país porque en esa edad no hay muchos jugadores de 2,06 que hagan lo que hace él con la edad que tiene. Hay que estar atentos a las cosas que pasan, problemas institucionales, trabajé muchos años con chicos y soy muy prudente con ellos, pero cuando creo que pueden demostrar algo le doy la posibilidad de hacerlo, pero sin mandarlos al frente”.

El futuro

Fue contundente a la hora de analizar lo que se viene: “Lo que veo es que estamos en una situación que no es ideal para afrontar la A, no es un buen momento institucional. Hay muchas ganas y sacrificio de parte de los dirigentes pero tuvimos muchos problemas este año. Los dirigentes se desvivían por solucionar los problemas, pero no es el mejor momento para afrontar este desafío. Ojalá se pueda acercar gente al club y estar más tranquilos, pero lo que siento hoy es que me gustaría que el año que viene a esta altura Quilmes siga en la máxima categoría y después que Dios diga cual será el futuro de Quilmes y el mío”.

Sobre la posibilidad de anular los descensos sostuvo: “A Quilmes le conviene, no sé si está bien mal. Sean las reglas que sean voy a buscar un equipo competitivo y que se identifique con la gente, que sepa que su equipo va a competir, aunque pierda, esas son las cosas a cumplir. Este año busqué lo mismo, después vinieron mejores resultados. La gente se identifica con el equipo con la entrega, si voy a ver a mi equipo y pierde pero dando todo, no me voy enojado. Si no da todo, te vas con un poquito de bronca, me parece que es así, eso es personal de cada uno”.

En relación al próximo plantel afirmó: “Está claro que Piñero era una de nuestras fichas a traer, pero tenía otras prioridades, no es que no lo queríamos. Compartí sus desafíos y me parece que estaba bien plantado en lo que quería y por eso se fue. Vildoza tiene contrato, Gallizi tiene contrato por cinco años. Hay que ver si la dirigencia va a asumir la dirigencia de tener dos extranjeros, este año con uno costó mucho. Me animaría a jugar con Ortiz de uno y Vildoza de dos, pero no es la ideal. No va a haber condiciones de renovarle a todos los que quiera la gente, porque habría que mantener a todo el equipo y hay mucha diferencia entre el TNA y la A”.

Por último, dejó una gran frase: “Cuando me siente con los dirigentes voy a intentar imponer que haya un reclutamiento de dos o tres jugadores pensando en el futuro. Me sacarán parte del presupuesto, pero jugadores como Vildoza o Gallizi van a ser muy aprovechables en el futuro”.

Foto: La Capital

Leonardo Chianese
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