Volvió el campeón

Volvieron LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh. Volvió el campeón. El Miami Heat derrotó a los San Antonio Spurs 109 a 93 e igualó las finales a dos victorias por bando. Los dirigidos por Erik Spoelstra realizaron un partido casi perfecto, en el que se destacaron por su enorme defensa y por la gran actuación de su Big Three.

Nadie pudo con James y Wade, incontenibles para cualquiera que se les pusiera en frente. El Rey terminó la noche con 33 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias, al tiempo que se sacó la mufa en ofensiva con 15/25 en tiros de campo. Hizo goles de todos los colores: Encestó ese tiro a media distancia que Popovich le otorga por diseño de sus defensivas, penetró, se posteó y anotó en contraataque.

Por su parte, el escolta volvió a calzarse la pilcha de estrella y lo acompañó con 32 puntos, producto de 14/25 en tiros de campo y 4/4 desde la línea, 6 rebotes, 4 asistencias, 6 robos y 1 tapa en 40 minutos. Una actuación digna de una estrella. Asimismo, Chris Bosh huyó de los fantasmas y completó su planilla con 20 tantos (8/14) y 13 tableros en 38.

La primera mitad fue de alto voltaje y terminó igualada en 49 puntos. Los minutos iniciales fueron una continuidad del tercer partido, con un San Antonio dominante que encestó los primeros tres triples que lanzó para sacar una ventaja de 15-5. Parker estaba en duda, peo las despejó con un arranque a puro gol: 5 puntos y 3/4 de cancha, cuando Miami no lograba comprar una canasta (1/5).

El equipo de Popovich estaba aceitado en ofensiva (70%) a pesar de la presión y concentración que mantenía el Heat de espaldas a su propio aro. Sin importarle la precisión de su rival Miami siguió ejecutando su plan, y poco a poco eso le fue dando sus réditos. Siguió presionando como siempre en la primera línea y picks directos, al tiempo que mostró una clínica de cómo rotar al aro y ayudar ante cada penetración. Así, a Splitter y Duncan les fue imposible sacar ventajas en la pintura.

James y Wade encendieron sus motores y comenzaron a desplegar todo su repertorio, que había aparecido en cuentagotas en los primeros tres partidos. Entre ambos sumaron 29 de los 49 puntos de su equipo en la primera mitad; Anotaron de todas formas, y esta vez Leonard no lograba contener a LeBron, que sumaba a media distancia, en contraataque y de espaldas al aro.

Los de Spoelstra sacaron una máxima ventaja de 10 puntos (41-31) a 7 minutos del entretiempo extrayendo jugo a su contraataque. Sin embargo San Antonio tenía una carta más ante de irse a los vestuarios, y llegó desde las manos de Parker. Metió dos asistencias seguidas y acercó a los Spurs a 5 (41-36). Luego Diaw clavó un triple desde la esquina, y más tarde su compatriota anotó un doble acrobático.

El tercer cuarto fue, más que ningún otro, un período de rachas; Cada vez que San Antonio se acercó a menos de cinco puntos de diferencia Miami respondía sin perdonar ningún error de su rival. Primero Green clavó su segundo triple y dejó a los Spurs arriba por uno (61-60), y de inmediato el Heat contrarrestó el ánimo del AT&T Center con un parcial de 7-0 que estableció una diferencia de 68-61.

Luego Leonard cerró una muy buena jugada colectiva de su equipo para quedar a tres, pero Miami rápidamente hizo cinco puntos al hilo y se escapó 74-66 cuando Manu podría haber achicado a uno. Más tarde llegaron dos triples, uno de Green y otro de Neal, pero eso tampoco quebró al Heat, que se fue al último descanso 81-76.

Emanuel Ginóbili continúa desconectado. El bahiense anoche volvió a mostrarse falto de confianza y terminó con 5 puntos, producto de 1/2 en dobles, 0/3 en triples y ¾ en libres, 2 rebotes y 2 asistencias en 26 minutos de acción.

En el último cuarto la defensa visitante se hizo aún más agobiante para San Antonio, que solo anotó 17 tantos y encestó 5 lanzamientos en 15 intentos al aro (33.3%). El Heat pareció sentenciar la historia cuando sacó 15 puntos de diferencia (100-85) cuando restaban 5:16 minutos para el final. Ya no había respuesta por parte de los Spurs, quienes terminaron con 18 pelotas perdidas, un suicidio ante estos Miami Heat.

Ahora está todo como al principio, ya que los de South Beach igualaron la serie y recuperaron la ventaja de localía. Habrá un descanso hasta el domingo, cuando se juegue el quinto partido de la final, el último de la temporada en San Antonio. Cuando regresen a casa, ojalá los Spurs puedan tener el Larry O’Brien entre sus manos.

Boxscore oficial

Sebastián Ciano
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