Con Corea tampoco se cantó victoria

El comienzo del cotejo invitó a ilusionarse. Sin guardarse nada ambas selecciones salieron con munición gruesa, y de movida entregaron un trámite parejo, con promesa de goleo alto, al punto tal de ser Argentina quien encabece en los primeros tres minutos, por la mínima, 10-9.

Sin embargo el correr de los minutos frenó esa energía, y el match se tornó un tanto más chato, cambiando el líder al llegar a la mitad del primer capítulo, aunque sin grandes distancias (10-14). Incluso cuatro puntos en fila de Victoria Llorente volvieron a equiparar las acciones (14 por lado) restando 4:27, momento en el cual se produciría uno de los “clicks” del partido.

Corea construyó un 5-0 (14-19) en el minuto siguiente, consiguiendo mantener intacto el tanteador hasta los 2:24, momento en el cual Hernán Amaya solicitó un tiempo muerto, tratando de generar una variación en el trámite.

A pesar de ello, la celeste y blanca prolongó su sequía, siendo esto aprovechado por las asiáticas, que a falta de dos minutos estiraron la brecha a siete (14-21). En total las criollas pasaron tres minutos sin mover las redes ajenas, hasta que un doble de Sofía Chelini, seguido por un triple de la misma autora, arrimaron a cuatro, 19 a 23.

Sólo faltó la estocada final. De igual forma, y con mejor semblante, Argentina ingresó al segundo capítulo con otra perspectiva, pese a los seis tantos de distancia (19-25).

Los fantasmas del pasado se encontraban agazapados y nuestras chicas no se percataron de ello. Un flojo comienzo fue el detonante de un segundo cuarto cuesta arriba. En sólo un minuto y medio las coreanas marcaron un 6-0 que les dio 12 de luz (19-31), obligando al banco nacional a pedir minuto.

Si bien Chelini achicó a 10 pisando los primeros tres minutos, la constante no se rompió y por ello la brecha entre ambos equipos fue de 14 al llegar a la mitad del periodo (21-35). Y a pesar que con más ganas que básquet, entre Llorente y Marchizotti capitalizaron el corazón argentino en puntos, el conjunto coreano retomó una distancia de 13 (25-38) de cara al último minuto y medio.

En total Argentina pasó casi tres minutos sin anotar, hasta que desde la línea María Emilia García León sumó con uno de sus tiros (26-38), cosecha que finalmente no serviría de puntapié inicial para la remontada.

Terminando con un 4-0, Corea se fue a zona de vestuarios con 16 puntos de ventaja, 26-42, y un claro dominio de las acciones. Una vez más la celeste y blanca padeció sus malos porcentajes de tiro (10/38, 26%), pese a no tener una mala cosecha de triples (3/6). Esto fue una constante nacional, incluso con la goleadora del medio tiempo, Victoria Llorente (11), quien arrastró un 4 de 17. Del otro lado, el total indicó un 16/37 (43%), con un pobre 3/14 en tiros de valoración triple.

Con el retorno del descanso largo las acciones no mutaron. Las criollas volvieron a tener otro inicio de pólvora mojada, y para cuando lograron mover el tanteador (libres de Llorente), ya habían pasado tres minutos y el rival conseguido un parcial de 8-0 (26-50 previo a los libres) para sacar 24.

Siempre por encima de los 20 tantos de distancia, el juego regresó a la meseta del primer capítulo, y bajo un total dominio asiático, Argentina se mostró maniatada y sin ideas de ejecución efectiva, que pudieran romper esas cadenas y darle un giro al encuentro.

Ya en la recta final del periodo, Corea rescribió la máxima distancia (27, 33-60), quebrando anímicamente a las nuestras, y concretando un nuevo guarismo (7-4, en 4 minutos), que no sólo continuó dejando el match dentro de las aguas calmas que le convenía, sino que también, perfilándola de manera inmejorable de cara a los últimos diez minutos, máxime con el triple sobre la chicharra de M. Lee: 36-64 y 28 de diferencia.

Con orgullo deportivo, y dejando atrás el mal tercer cuarto, Argentina inició el último acto tratando de terminar lo más cerca posible de su rival, en la búsqueda de un resultado más decoroso.

Tan así se dio ese comienzo, que en apenas tres minutos consiguió un parcial de 9-4 (45-68), marcando más puntos que en todo el segundo capítulo (7), y a un tanto de igualar todo lo acumulado en el anterior (10). Esta arremetida, más pasional y romántica que basquetbolística, obligó al banco rival a solicitar un tiempo muerto.

De igual forma esa interrupción no frenó el accionar de las nuestras, en los siguientes 50 segundos continuaron recortando la brecha hasta bajar la barrera de los 20 (49-68), llevando el guarismo a 13-4, y prolongando la sequía de puntos de su adversario por tres minutos. La brecha llegó recortarse hasta los 16, 52-68.

En total pasaron 3 minutos, 34 segundos, hasta que Corea logró mover su tanteador (doble de M. Kim), recuperando los 20 tantos de luz a través de dos libres conseguidos por la misma jugadora (52-72, a falta de 4:41).

Argentina se volvió a desinflar, y no pudo sostener el ritmo frenético que le imprimió a los primeros minutos del cuarto. Con el tanteador y el reloj a su favor, el cuadro coreano volvió a tomar las riendas del match, lo adormeció, y poco a poco fue ampliando nuevamente la distancia, hasta pisar los 26 (53-79), con 2:21 por delante.

Con la suerte echada, los instantes cúlmines sobraron. El resultado final fue de 87 a 60 a favor de Corea; volviendo a pagar muy caro la celeste y blanca, sus lagunas ofensivas, principalmente generadas por una pobre eficacia en sus lanzamientos de valoración doble (hoy 17/54, 31.4%).

Mañana, nuevamente a las 7:30 (hs Arg.), se enfrentará con Mali, que en el arranque de esta jornada superó a Senegal.

Síntesis

Argentina (60): Micaela Sancisi 2, Victoria Llorente 21, Julieta Armesto 7, Sofía Chelini 14 y Mara Marchizotti 2 (inicial); Florencia Martínez 0, María Emilia García León 6, Magalí Armesto 3, Sofía Aispurúa 0, Julieta Ale 0, Agustina Ledesma 0 y Agustina Jourdheuil 5. DT: Hernán Amaya.

Corea (87): S. Kim 10, L. Kim 13, S. Ku 10, M. Kim 16 y J. Park 16 (inicial); J. Shin 4, S. Lee 3, S. You 0, H. Kim 0, M. Lee 8, E. Choi 3 y H. Park 4. DT: Wanki No.

Parciales: 19-25 / 26-42 / 36-64.
Árbitros: Spurlock – Wen – Vino.
Estadio: Švyturio Arena.

Foto: FIBA.com

Emanuel Niel
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