Un guiño a la historia

Ante más de 3000 personas que colmaron el mítico estadio Héctor Etchart, este sábado se realizó la Fiesta del Basquetbol de Ferro Carril Oeste.

A la presentación del plantel que disputará la próxima edición del Torneo Federal y la nueva camiseta, se le sumaron homenajes a las glorias del club, a Carlos Griguol, al recuerdo de León Najnudel, Fabián Tourn y Sixto Tartaglia.

Una de las tribunas llevará el nombre de Miguel Cortijo, el emblemático base que condujo al club de Caballito a la conquista de sus tres títulos en la Liga Nacional: 1985, 1986 y 1989.

Todo pintaba para una noche mágica y emotiva. Y la verdad que no le faltaron los condimentos. Desde la multitudinaria respuesta de socios, hinchas y amantes del básquet hasta la presencia de todos los que de una manera u otra hicieron de Ferro una marca indeleble relacionada con el basquetbol.

El Etchart lucía fantástico, con las plateas pintadas a nuevo por un grupo de socios (Hinchas por Ferro), quienes están dejando el mítico templo de manera impecable. Una carpa estilo “kindergarden” para los más chicos, sonido y juego de luces de impecable ejecución.

Casi con la inglesa puntualidad de los fundadores del club de hace 109 años comenzó la fiesta, llevada de manera impecable por el “gallego” Fabián Pérez, acompañado por la histórica voz del estadio en LNB del Etchart, Enrique Venturini. Fue así que primero los chicos de la Escuelita de Básquet hicieron una muestra de lo que aprenden día a día ante la emoción de los papas que inundaban el estadio con flashes.

Una vez terminado esto, fue el turno de que el estadio entrara en penumbras para que ingresaran Sebastián Álvarez y Marcelo Piuma con las camisetas nuevas, acompañados por dos modelos. Los chicos de mini y pre infantiles terminaban de vestir la escena haciendo un camino por donde, minutos después aparecieron los integrantes de la plantilla actual que disputará el TFB, junto al cuerpo técnico.

Tras cartón, la presentación de las leyendas. Antes se habían juntado en el muy cómodo vestuario que utiliza el fútbol profesional, donde mientras se cambiaban combinaban bromas sobre los estados físicos de cada uno. En un costado Luis Martínez sonreía mirando a sus ex dirigidos.

La presentación de los históricos fue para la gente, romperse las manos aplaudiendo. Así fue que desfilaron Javier Maretto, Federico Kammerichs, Sebastián Uranga, Gabriel Darrás, Luis González, Luis “Chuzo” González, Hugo Belli, Jorge Martín, Vicente Pellegrino, Arturo y Martín Budding, Gabriel Moravansky, Fabián Sacchi, Hernán Tettamanti, Gustavo Fuente, Mauricio Beltramella, Daniel Aréjula, Leonardo Zanassi y Santiago Roson.

Y se hizo un silencio, una pausa para la ovación. Fue cuando anunciaron al ídolo, al ícono, a Miguel Cortijo. Fueron varios minutos de sostenido aplauso, gritos y hasta una vieja canción (...“que de la mano, de Miguelito, todos la vuelta vamos a dar..”) que decoraba el cierre del juego final de 1989 ante Atenas, donde Ferro cosechó su última Liga.

Además entre los invitados estuvieron los ex entrenadores verdolagas Luis Martínez, Horacio Seguí, Antonio Gornatti, Pablo D´Angelo, Horacio Pérez, Gustavo Cullinan y Pedro Fernández. El doctor Daniel Corvalan, quien integró cuerpo técnico en esa época también asistió a la fiesta.

Siguió la noche con el partido entre los históricos enfrentando a los actuales, donde hubo mucha risa, divertimento y varios de las glorias mostrando todavía manos picantes y algunos chiches. Los árbitros internacionales Fernando Sampietro y Daniel Rodrigo también participaron de la fiesta.

También fue momento para un homenaje postergado, ya que la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, meses atrás, habían destacado a Carlos Griguol como Personalidad Destacada del Deporte de la Ciudad. Y el querido “viejo” recibió, una vez más, la ovación del hincha de Ferro.

Hubo lugar obviamente para el recuerdo de los que físicamente no están. Sixto Tartaglia, el utilero de la época gloriosa del básquet. Luego el turno de recordar a Fabián Tourn, quien estuvo representado por sus hijos. Y finalmente León Najnudel, padre de la Liga Nacional, en este caso con Iván, su hijo, recibiendo la plaqueta correspondiente.

Hubo menciones significativas para Federico Kammerichs, Ramón Machado (actual utilero y ovacionado por todos, en especial por los chicos de las formativas), a Luis Martínez y a Fernando Porres, directivo del club que puso el hombro en las malas épocas.

Hasta que llegó el plato fuerte final. Al término del partido entre las glorias, se descubrió lo que será de ahora en mas, el homenaje eterno a Cortijo: la tribuna local llevará su nombre. Se cerró el festejo con el santiagueño llevado en andas por sus colegas.

Luego de todo esto, en el VIP hecho para invitados y prensa, se compartieron, además de un impecable catering, enormes momentos emotivos con fotos y recuerdos. En el mismo VIP, se armó una carpa donde se mostraban los tres orgullos verdolagas del basquetbol: las tres copas de la LNB.

Fuente: Prensa Ferro