Recuperó su fuego sagrado

Era muy importante para Atenas poder ganar este partido. La salida de Mario Milanesio, una situación que incluso puede erosionar la relación con Marcelo Milanesio, un equipo tocado en su orgullo y con deuda pendiente de juego. Todo eso en la previa y varias cosas cumplidas al cierre del partido.

Quilmes encontró espacios en los primeros tiros y sacó ventaja (2-5) pero Atenas fue muy duro a la hora de hacerle pagar las primeras dos pérdidas y desde allí edificar un parcial 13-4 para pasar a ganar 15-7.

La virtud de los cordobeses en el tramo inicial fue poder distribuir el goleo en varias manos y no utilizar una vía específica. Quilmes iba resistiendo sin su goleador Walter Baxley en el quinteto inicial.

Hasta que Fabián Shadi tuvo un gran pasaje desde la base y “Faca” dos tripes seguidos lograron el empate en 17 para que finalmente Quilmes termine ganando el primer cuarto 19-21

Las rotaciones desde el banco fueron intensas en virtud del calor que reinaba en un estadio que acumuló todo el sol del día y sin aire acondicionado. Facundo Piñero siguió intratable como goleador, marcando de dos desde los 5 metros, de tres puntos y de contraataque.

Atenas se animó a contestar bola por bola en una plena dinámica ofensiva hasta que perdiendo por dos (26-28) pasó a defender en zona. Quilmes pecó (como siempre) de una gran cantidad de pérdidas en la primera mitad (13), sumado a 5 rebotes ofensivos de Atenas le dieron la chance al conjunto cordobés de poder llegar varias veces al aro rival aunque su efectividad hasta allí venía muy baja (2/8 en triples).

De pronto se encendió Bruno Lábaque con dos triples, en una ofensiva que se apoyó Herrmann como faro sumado a un triple de Guaita le dio a Atenas una renta de cinco puntos que lo supo mantener hasta el cierre del primer tiempo (45-40).

Al comienzo de la segunda mietad Atenas tomó 10 puntos de luz (54-44) con una corrida ante una nueva pérdida de Quilmes. Lo mejor de “Griego” pasó en ese momento por Elsener en velocidad, Greg Lewis en el ataque fijo y Guaita en el ataque abierto. Es decir todos menos Lábaque y Herrmann que se llevaban siempre la atención defensiva.

De pronto la brecha se agigantó en virtud de las pérdidas de Quilmes. Se fue a un largo 67-46 a falta de 3:50 minutos con triples de Brussino y dobles de Herrmann. Quilmes no tuvo muchos cambios, aguantó con lo que tenía y erró hasta los libres. Porque la defensa de Atenas jugó un cierre completo de su juego interior, negando las penetraciones, los pases al juego interior y liberando un poco más el perímetro. Después de disfrutar una ventaja de 21 puntos al cierre del 3er cuarto la distancias fue de 14 (72-58) porque a pesar de todo, Quilmes nunca se rindió.

Los primeros dos minutos del último cuarto fueron un compendio de errores, donde nadie convirtió. Hasta que la defensa de Quilmes logró tomar ventaja y Baxley de contraataque puso la distancia a 10 (72-62). Martín “Polo” López paró inmediatamente el partido con un minuto para reacomodar las piezas.

En el regreso Bruno Lábaque tomó protagonismo con una asistencia de ensueño para Lewis, un doble largo y otro corto contra la marca que le dio a Atenas una serie de puntos justo cuando Quilmes amenazaba con descontar la ventaja.

Esa ráfaga de Lábaque lo sacó a Atenas de la sequía pero también lo potenció para la parte final. El técnico le dio descanso cuando su equipo aún conservaba la ventaja de 10 (78-68 a falta de 5 minutos).

Justo en el momento que Quilmes se puso a diez y tuvo 4 ataques seguidos con gol, Lábaque los frenó y luego continuó repartiendo el goleo en diferentes manos y de manera fluida. Leandro Ramella el DT cervecero no tuvo más opción que hacer uso de Fabián Sahdi casi todo el partido (37:23) quien lució literalmente fundido en el cierre. Para Quilmes las pérdidas fueron un gran problemas (27 en total) y sobre la parte final del último cuarto fue una constante. Sin ideas, sin aires y sin piernas finalmente Quilmes terminó entregando el rey ante una clara superioridad de su rival.

En el cierre se decoró el resultado que casi nunca estuvo en duda en todo el segundo tiempo. Las arremetidas del cervecero fueron más emocionales que de juego, pero para un Atenas herido dar una respuesta de orgullo era su mejor prueba. Y logró cumplir una tarea pendiente. Ahora le toca crecer. Material le sobra.

Síntesis
Atenas (91): Bruno Lábaque 16, Alexis Elsener 11, Walter Herrmann 22, Greg Lewis 18, Diego Guaita 12 (FI), Juan Brussino 7, Mariano Fierro 3, Nicolás Zurschmitten 2, Mauricio Prieto 0. DT: Martín López.

Quilmes (74): Fabián Sahdi 5, Federico Marín 5, Facundo Piñero 29, Mario Ghersetti 6 y Diego Romero 3 (FI) Maximiliano Maciel 4, Walter Baxley 12, Tayavek Gallizzi 10, Tiago Moledous 0. DT: Leandro Ramella.

Parciales: 19-21, 45-40, 72-58
Árbitros: Pablo Estevez – Fernando Sampietro y Diego Rougier
Estadio: Gustavo “Torito” Rodríguez

Fotos gentileza Demian Schleider (Infoliga)
Pablo Tosal
@Pablo Tosal
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