Le sobró aire

Los Miami Heat dieron vuelta la localía de esta finales 2014 al vencer anoche a lo San Antonio Spurs por 98 a 96 e igualar la serie 1 a 1. Esta vez, las condiciones del AT&T Center fueron normales tras la reparación del sistema de aire acondicionado, y en un escenario cotidiano, LeBron James volvió a ser casi imparable.

El Rey dejó atrás los calambres del primer partido y fue la gran figura de la noche de San Antonio con 35 puntos, producto de 11/19 en dobles, 3/3 en triples y 4/5 en libres; Asimismo sumó 10 rebotes, 3 asistencias y 2 recuperos en 38 minutos de acción. De ésta manera, los dirigidos por Erik Spoelstra vuelven a Miami con el primer objetivo cumplido.

San Antonio había comenzado con todo, y llegó a estar al frente por 11 puntos en el segundo cuarto, pero terminó perdiéndose ante la muy buena defensa de su rival, frente a la cual le costó encontrar respuestas.

Durante el primer cuarto se vio un buen nivel tanto de San Antonio como del Heat. James, en el ojo de la tormenta durante los días pasados tras su descompensación en el primer partido, salió decidido a atacar el canasto y llevarse puesto a Leonard y cualquier otro que se cruzara por su camino. La estrategia no resultó como él y Miami seguramente habían pensado: Sumó más pérdidas (3) que puntos (2).

Los Spurs se nutrían del gran comienzo de Duncan (11), quien en la pintura comenzaba a imponer sus reglas ante Chris Bosh. Tras un inicio dominante (14-8), Miami logró igualar el marcador en 15, pero San Antonio reaccionaría con cinco puntos consecutivos de Tony Parker para comenzar un parcial que fue de 11-2 y que le dio una ventaja de 26-19 al término de los primeros 12 minutos.

La racha se extendería a 15-4 para alcanzar una máxima de 30-19 en lo que ya era el mejor momento de los Spurs. Sin embargo, la visita volvería al juego gracias a su defensa, una de las mejores de la liga. El ingreso de Chris Andersen para custodiar a Duncan resultó un acierto de Spoelstra, San Antonio comenzó a lanzar incómodo y el Heat metió un parcial de 9-0 para acortar la brecha a dos (28-30).

LeBron empezaría a desplegar su talento con 11 puntos en el cuarto (5/7), y junto a Bosh (10) pusieron a Miami al frente 34-33 a 5:06 del entretiempo. Ginóbili cometió tempranamente su tercera falta, pese al simulacro de golpe en la cara de Wade. Los de Spoelstra dejaron a los Spurs en un 30.4% de cancha en el segundo segmento y le provocaron 4 pérdidas (9 en el primer tiempo) para que el juego quede igualado en 43 tras los dos primeros cuartos de acción.

El tercer período tuvo un protagonista excluyente: LeBron James. El Rey tomó las responsabilidades, clavó 12 puntos en forma consecutiva y el Heat pasó a ganar 69-64, la ventaja más larga que habían gozado en todo el encuentro. San Antonio no encontraba la manera de detenerlo, porque le negaban la penetración luego de lo que habían visto en el primer tiempo, pero “LJ” castigaba a media y larga distancia.

Los 12 minutos finales fueron electrizantes y el partido terminó definiéndose por cuestiones puntuales. A falta de 6:43 para el final, los Spurs ganaban 87-85 y los árbitro cobra como flagrante un codazo de Chalmers a Parker, pero el francés falla ambos tiros libres, y en la reposición fue Duncan a la línea, y también volvió sin nada. Al otro lado LeBron clavó un triple, y de lo que podría haber sido una ventaja de 6 puntos para los de Popovich terminó en 88-87 para el Heat.

Ginóbili comenzó a tomar las riendas de su equipo (7 pts), pero Spoelstra hizo un muy buena lectura de esto y mandó a James sobre el bahiense para dejarlo sin juego, y a San Antonio sin desequilibrio. Con dos bombas consecutivas (Diaw y Parker), los Spurs pasaron al frente 93-92, pero luego Manu no pudo anotar y Bosh castigó con una daga desde la esquina que dejó el marcador 95-93 para la visita.

En la jugada siguiente Ginóbili perdió la bola, pero LeBron los perdonó anotando solo uno de sus libres (96-93). No obstante, el bahiense volvió a errar y en la jugada siguiente Wade (14 pts) anotó bajo el aro en una jugada en la que la defensa local quedó muy abierta cuando Green le negó la Línea de pase a LeBron casi en mitad de cancha.

El Heat cortó una racha de 9 triunfos seguidos de San Antonio como local y cumplió su objetivo de robar al menos uno del AT&T Center para invertir la ventaja de cancha. Los Spurs deberán viajar a Miami con la misma misión si es que quieren volver a gritar campeón.

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Sebastián Ciano
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