Que nadie se sorprenda si el base Derrick Rose forma parte de la expedición norteamericana que aterrizará en Bilbao para disputar la fase preliminar del Mundial de Baloncesto FIBA que se jugará en España.
La estrella de Chicago Bulls, después de dos temporadas prácticamente en blanco por las lesiones, causó una gran impresión el primer día de entrenamiento de la selección estadounidense concentrada en Las Vegas.
"Me he emocionado viéndole", reconoció el entrenador del equipo norteamericano, Mike Krzyzewski, hablando del jugador que ayudó a los estadounidenses a conquistar el título mundial en 2010.
"Es mejor que hace cuatro años. Hace cuatro años tenía 21 y estaba justo a punto de convertirse en lo que iba a ser”.
"Entrenó muy bien hoy (por el lunes). No se ven sesiones de entrenamientos como estas todos los días”.
“Hace mucho que no participa en entrenamientos de este tipo. Veremos lo que hace en los próximos días”.
El presidente de USA Basketball y director técnico del equipo, Jerry Colangelo, también fue testigo de la actuación estelar de Rose.
"Cuando sabes que va a estar un ex MVP de la Liga, como es Derrick Rose, que ha estado fuera tanto tiempo, y con todas las cuestiones que le rodean... ¿Dónde estar si no?" Declaró Colangelo.
“A simple vista en el entrenamiento casi pareció que no se había perdido demasiado. Mostró entusiasmo y cierta despreocupación, entró a canasta y jugó con una sonrisa”
"Se le veía feliz de estar en la cancha y nosotros también estamos felices de verlo de nuevo".
Claramente Rose estaba encantado de formar parte de la escuadra estadounidense.
"Simplemente estoy feliz de estar aquí. Eché mucho de menos el baloncesto. Mi aprecio y sentimiento por el juego es mayor. Cada vez que pongo un pie en la cancha va a ser un show. Estoy feliz de que Coach K me invitara al campus. Sólo estoy tratando de sacudirme el óxido", explicó Rose.
¿Cómo de importante fue para Rose estar en Las Vegas?
"Tengo metas y estar en este equipo es una de ellas. Estos chicos me empujan a un nivel totalmente distinto. Es un honor estar aquí y jugar con todos ellos".