La banca solidaria

La racha negativa de los Indiana Pacers llegó a su fin. Luego de seis derrotas consecutivas el equipo de Luis Scola volvió a cantar victoria, esta vez ante los Utah Jazz por 97 a 86. Si bien el encuentro tuvo un nombre propio predominante en Roy Hibbert, autor de 25 puntos, la razón del triunfo se encuentra en otro lado.

El bando de suplentes fue el motor de los Pacers. Los suplentes se bancaron el momento más caliente del partido, sobre todo en el último cuarto, y aportó 39 puntos, de la mano de un inspirado A.J Price (contratado el jueves), quien sumó 22 tantos. El Luifa fue autor de 8 tantos y 8 rebotes en 25 minutos de juego.

Desde el comienzo había una situación difícil de resolver para Indiana: Los emparejamientos en la pintura. Scola iba con Kanter, un hombre pesado pero más altos, mientras que Hibbert – algo más ágil – defendía a Derrick Favors, quien tiene un buen juego de frente al canasto. Allí los Pacers comenzaron a sentirse incómodos.

El comienzo no fue el mejor para los del Luifa, con un ataque intermitente (4/12), con poco movimiento del balón, al tiempo que al otro lado Utah jugaba más cómodo, anotando tanto dentro de la pintura (8 de los 11 pts), como desde afuera, mediante un triple de Hayward. Así se adelantaban 14-8 y Vogel sacaba a Scola.

Hibbert llevó la lanza para los locales con 11 de los 17 puntos de Indiana. El pivot era el sostén de una ofensiva con muy pocas varias. Por su parte, Utah cometía muchos errores (5), por eso se fueron al primer descanso arriba 20-17.

El partido tenía el freno de mano puesto. Los Pacers no le encontraban la vuelta, y Utah, que creaba espacios y juego a través del pick and roll por el eje con los grandotes Kanter y Gobbert, no tenía puntería (1/6). La banca local no aportaba tantas soluciones pero mantenía en juego a Indiana 21-23 a 8:40 del cierre de la primera mitad.

Indiana logró pasar al frente 27-25 mediante un parcial de 6-0, pero el turco Kanter rápidamente le devolvió la ventaja a Utah (29-27) con buenos movimientos bajo las tablas.

No obstante, a través de su defensa, Indiana comenzó a hacerse fuerte y empezó a dominar las acciones. De esta manera, cerró el segundo cuarto con un parcial de 14-4 y al término del primer tiempo se iría victorioso 47-41.

El tercer cuarto se convirtió en un partido de rachas, ida y vuelta. En el inicio Indiana amplió su máxima ventaja a 8 (49-41), pero fue una alegría efímera. El Jazz reaccionó rápidamente con un parcial de 19-4 de la mano de Hayward (9) más la potencia de sus internos y retomó el liderazgo 52-51, que luego amplió a 60-53.

Si embargo los Pacers no se hundieron; Volvieron a las fuentes con Hibbert, quien siguió haciendo estragos en la pintura, y comenzó a tener el apoyo de Solomon Hill, quien aportó 6 puntos para igualar el partido en 63 (parcial de 10-3) con 3:05 por jugarse en el periodo. Pese al gran momento de Hayward, los de Frank Vogel volvieron a tener un gran cierre de cuarto y se fueron al último descanso arriba 72-69.

Los suplentes abrieron el cuarto parcial y aportaron su cuota con 8 de los 10 puntos. Indiana se mantenía al frente 82-77 aprovechando la salida de Hayward. Quin Snyder mandó de inmediato a su alero nuevamente al rectángulo, pero los Pacers mantuvieron su nivel. Con un triple de Price, que entró pidiendo permiso, sacaría la máxima de 87-79 con 6:06 por jugar.

A partir de ese momento Vogel se la jugó por sus reservas. Price, Rudez, Mahimi, más Hill – de buen segundo tiempo – y Hibbert cerraron el partido y lograron el mejor momento de Indiana. Por su lado, el Jazz (3-5) se desvaneció a medida que Hayward fue perdiendo el contacto con el balón; Terminó con 30 puntos, pero solo 4 en el último cuarto.

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Sebastián Ciano
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