Vestigios del campeón

Hay cortes de balón y rápida resolución en el aro contrario. Tony Parker penetra con un primer paso imposible; Duncan se abre y tira, no falla. La bola viaja de un lado a otro en las ofensivas, su rival no la ve con nitidez. Manu se estira para robar una pelota. Kawhi Leonard está en cancha. Dejan desairado a un rival con serias aspiraciones. Definitivamente, esto ya se vio antes.

Los San Antonio Spurs mostraron el nivel del campeón en la victoria sobre los Portland Trail Blazers por 110 a 96, que no solo dejó a todo el AT&T Center de pie, sino que marcó el regreso del alero, una pieza fundamental.

Todo fue satisfactorio para los de Gregg Popovich, quienes desde un principio marcaron territorio: Se llevaron el primer cuarto con un festival ofensivo, 35-28, habiendo encestado el 56% de sus disparos con 12 asistencias grupales y el aporte desde el banco: Entre Ginóbili y Mills anotaron 17 tantos.

Claro que del otro lado la visita no se quedaba atrás; los Blazers proponían un duelo de ida y vuelta, con Aldridge como estandarte (9) y un ataque que también ardía (60% TdC).

El colchón de puntos obtenido durante los primeros doce minutos de juego le permitió a San Antonio no sufrir a medida que el entretiempo se acercaba. El segundo cuarto fue el peor momento de los locales en el partido, mientras que los Blazers no aflojaban (52.6%) y descontaron la ventaja hasta ponerse a 4 (37-41) a 8:20 del cierre.

Sin embargo San Antonio respiraría mediante un parcial de 8-0 que cerró Green con un triple. El local volvería a escaparse por 12 (53-41) y se iría al descanso largo arriba 60-52.

Durante el inicio del tercer cuarto, los Spurs se conectaron para tomar nuevamente el control del partido y nunca más perderlo. Poco a poco su rendimiento fue creciendo, sobre todo luego de un aluvión de triples consecutivos (uno de Leonard y dos de Green) que dejó el marcador 75-64. Más tarde, a falta de 2:06, Mills hundió un más y luego su segundo al hilo para que el anfitrión sacara una luz de 18 tantos (91-73), que significó una trompada a la moral de Portland.

San Antonio, a pura bomba (5/9), lograba reafirmarse en el liderazgo del marcador y también en el trámite del partido. Se les cerraron los caminos a Lillard (23 puntos, 5 asistencias) y Matthews (2, 1/4 de cancha), por lo que el equipo de Terry Stotts (30-10) se quedó sin gol.

El último parcial fue el momento que Leonard se debía en esta 2014/15 que lo ha tenido a mal traer. El alero, ovacionado por el público, se despachó con 9 puntos y varias jugadas que lograron que la gente se levantara de sus asientos. El MVP de las últimas finales terminó la noche con 20 tantos, 4 rebotes y 5 asistecias en 31 minutos.

Emanuel Ginóbili fue parte del mejor momento defensivo de su equipo aunque en ataque terminó con 4/12 de cancha para un total de 13 puntos. Asimismo reparto 7 asistencias, capturó 4 rebotes y robó 3 balones en 22 minutos.

Ésta fue la segunda victoria consecutiva para los Spurs, que mañana enfrentarán al Utah Jazz con la oportunidad de ganar tres seguidos por primera vez desde el primero de diciembre. Ahora poseen un récord de 25-16 para mantenerse séptimos en el Oeste.

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Sebastián Ciano
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