Para cerrar la jornada del jueves, los Trail Blazers y los Mavericks obtuvieron su victoria Nº 34 de la temporada y se mantienen estables en la Conferencia. Ambos están a cinco encuentros de los Warriors y no quieren dejar pasar su oportunidad.
Autor:Lucas Barreña (@LucasBarrena)
La zona occidente de la NBA es, quizá, la más dura desde hace ya varios años. Equipos que juegan a la perfección y entienden lo que ejecutan; jugadores de renombre en todos los planteles; más de un jugador-franquicia por institución... La más pareja, la más difícil de sacar ventajas y la más incógnita, también. Pocas veces se puede afirmar, con certeza, que un equipo le ganará a otro. Todos tienen jugadores para pelear, y saben cómo hacerlo.
Uno de los cuatro partidos que se disputaron anoche reunía a los poderosos Mavericks, sin Nowitzki ni Rondo, frente a los Kings de Sacramento, que, pese a contar en su róster con Rudy Gay o DeMarcus Cousins, no tiene un recórd acorde a su plantilla (12º).
El resultado final, si bien podría ser para cualquiera, terminó siendo a favor de la visita, por 101 a 78. En un encuentro que comenzó parejo, terminando con el primer cuarto sin sacarse diferencias en el marcador (23 iguales), la segunda etapa previa al descanso separó a ambos conjuntos por 17 puntos. De ahí, los californianos no pudieron acercarse más a los tejanos y perdieron el encuentro.
Sin embargo, el goleador estuvo en el bando de Sacramento; DeMarcus Cousins anotó 23 unidades (además de capturar 11 rebotes), siendo escoltado por su contrincante Monta Ellis, con 21. El otro punto fuerte de la visita estuvo debajo del aro: Tyson Chandler, con 16 puntos y 16 rebotes fue el as bajo la manga del equipo dirigido por Rick Carlisle que le permitió sacar diferencias para terminar acomodándose en el sexto puesto del Oeste, acomplejado por las 18 caídas sufridas.
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En el encuentro que cerró la jornada de anoche, fue el local quien se adueñó del encuentro. Desde el Moda Center de Portland, los Trail Blazers, con su tridente ofensivo que da para soñar todavía más en un futuro, derrotaron por 108 a 87 a los Suns de Phoenix.
Encuentro reñido, si los hubo. Con el pasar del encuentro, nadie en todo Óregon imaginaba cómo iba a terminar el resultado final: tras un primer cuarto en el que Portland sacó una diferencia de 12, la segunda y tercer etapa mostraba un despliegue de la visita; ganó por uno al cierre del primer tiempo y arrancó el complemento con una distancia de 10 puntos. En la recta final del partido se definió todo: contundentes ataques del equipo negro, rojo y blanco lograron una diferencia de 20 puntos para terminar con un resultado abultado.
El Big Three local fue quien se llevó todos los aplausos; Nicolas Batum, la figura, terminó como líder goleador (20) y asistidor (7), mientras que LaMarcus Aldridge, además de convertir 19 puntos, capturó 13 rebotes, escoltado por su compañero Robin Lopez (con 12), que además conectó 4 tapones. Por su parte, Damian Lillard no tuvo una brillante actuación, pero sí aportó lo suyo: 13 unidades y 3 asistencias como lo más destacado del base.
En la vereda de al frente, los que más trabajaron fueron Markieff Morris, que anotó 18 unidades, y Eric Bledsoe, que contribuyó con 17. En donde sí tuvieron un líder fue en robos: PJ Tucker, el alero, se quedó con 5 balones.
De esta manera, los dirigidos por Terry Stotts se quedaron con su segunda victoria al hilo y se mantienen en la cuarta posición, diferenciado por sus 16 derrotas que lo dejan un mejor promedio.
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