Los San Antonio Spurs cayeron en el séptimo partido ante los Clippers por 111 a 109 y se despiden de la temporada. Fue un partido que quedará en la historia ganado por un Chris Paul que jugó desde la mitad del primer cuarto lesionado. Quizás haya sido la última función para el Big Three.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
En 1988 los Detroit Pistons se enfrentaban a los Lakers en las finales. En el partido 6, Isiah Thomas se torció fuertemente un tobillo, y tuvo que jugar gran parte del segundo tiempo rengueando. Aquel partido terminó – en una pierna – con 43 puntos, pero su equipo perdió el juego y la serie.
Esta noche, Chris Paul hizo recordar aquella actuación memorable del base de los Bad Boys con otra semejante, rengueando, para darle a su equipo una histórica clasificación a la segunda ronda de playoff al vencer a l campeón defensor, los San Antonio Spurs, por 111 a 109 con un doble suyo que sentenció la serie 4-3.
Paul ganó el juego en una pierna; anotó el doble de la victoria a falta de un segundo, sobre la marca y desbalanceado. Terminó la noche con27 puntos y 9/13 de cancha para que sus Clippers avancen a la segunda ronda para enfrentarse a los Houston Rockets de Pablo Prigioni
En el inicio del partido San Antonio salió muy metido al Staples Center; el balón pasaba por las manos de todos, y era Tony Parker quien se destacaba: En ofensiva anotando y haciendo jugar, y en defensa aislando a Chris Paul.
Con el francés en buen nivel y Dany Green muy activo, los Spurs sacaron una máxima de 19-11 a 8:30 del primer descanso. Sin embargo el local reaccionaría cuando Pop mandó a sus suplentes a través de un parcial de 9-0 y dieron vuelta el marcador para pasar al frente 20-19 (3:08).
Paul encendió la luz roja al tomarse la cara posterior de su muslo izquierdo e irse a los vestuarios. De todas formas, los Clippers continuaron dando lucha gracias al excelente cuarto de Barnes (10), la presencia de Griffin en la pintura y la aparición de Crawford (5) desde el banco. La brecha de L.A se amplió a 17-5, aunque San Antonio cerró los primeros doce minutos de juego con dos bombas seguidas (Green y Diaw) para irse arriba 30-28.
Los Angeles comenzó el segundo período sin la presencia de Paul, quien estaba siendo examinado en los vestuarios, aunque nadie se daría cuenta. Crawford se hizo cargo del asunto y tomó las riendas ofensivas de los Clippers (7 pts). Anotó cuatros tantos seguidos para darle el liderazgo a los suyos 38-37.
Griffin, ante Diaw, Splitter o Duncan, de espaldas o de frente al canasto, lograba anotar (13 en el primer tiempo), pero debió abandonar el rectángulo por tres faltas. Pero a pesar que los Clippers contaban con una de sus máximas estrellas en el banco, y la otra a media máquina, San Antonio no lograba sacar diferencia.
Duncan y Splitter sumaron en ataque y Green era de los más destacado, tanto en defensa como en ataque. Ante la situación e Paul, Popovich le cambió la marca – Leonard por Parker – y, en ofensiva, trataba de desgastarlo atacándolo con el propio francés. Sin embargo, los Clippers cerraron el cuarto con una ráfaga de 8-3 y se fueron al descanso largo arriba 57-52.
El tercer cuarto volvió a ser parejo, pero a diferencia del primer tiempo ninguno dispuso de un momento de superioridad. Parker volvería al juego como en el inicio, siendo una vía de gol para los Spurs (8); Duncan, mientras tanto, sacó la cara cuando San Antonio parecía perdido.
Manu creció, comenzó a meterse en el juego, pero Pop decidió sacarlo. Paul clavó un triple y dejó a Los Angeles arriba 79-78 para entrar a último cuarto.
Los últimos doce minutos fueron un canto al básquetbol, para grabar y recordar por el resto de la vida. De pronto, la emoción se adueñó del espectáculo. La tensión subió sus niveles al máximo, y todos los vivieron con nerviosismo.
Ginóbili (8 pts, 7 asistencias) parecía renovado. Popovich dispuso que jugara el pick and roll con Duncan para atacar la defensa local, y desde ese movimiento los Spurs consiguieron muchas oportunidades ya tanto el bahiense como el de Islas Vírgenes supieron elegir bien.
No obstante, ninguno de los dos lograba hacerse cargo definitivamente. Redick, muy bien marcado durante gran parte de la noche, se hizo presente en el último cuarto con dos triples consecutivos fundamentales, con el que los de Doc Rivers pasaron a ganar 100-99 con 4:20 por jugarse.
San Antonio vivía gracias a Tim Duncan. El ala pivot mostró una performance sublime. Terminó con 27 tantos – 10 en el cuarto período - y 11 rebotes, y sostuvo a San Antonio para llegar hasta el final. Pero la noche era de Chris Paul. Anotó 9 puntos en el cuarto chico, los últimos dos quizás hayan sido de los más importantes de su carrera. Las lágrimas tras la chicharra que marcó el final denotaban que dentro suyo, no era un momento más.
Los Clippers avanzan y San Antonio queda afuera en primera ronda. Quizás haya sido más que eso, ya que tras esta última derrota de la 2014/15 quedó olor a fin de ciclo. Todavía es muy prematuro hablar, pero las chances que éste equipo – y el Big Three – continúa armado parece muy complicado.
Lo resta esperar para ver cuáles son las decisiones que se toman. Hasta ese momento, y para siempre, quedará el recuerdo de haber sido contemporáneos de uno de los equipos más grandes de todos los tiempos.
Por Milimetros el partido no fue para los spurs. Estuvo a mm de tapar duncan esa bola. Creo que Duncan tiene para un añito mas y Manu también. Si bien se lo vio lento en esta serie, tranquilamente esta para jugar 20 minutos por partido. Ojala que siga. Además me ilusiona (ahora que quedaron afuera) que en ese 2% de volver a jugar en la selección se concrete. Quien te dice no?