Inicia el camino Panamericano para las chicas

Desde la segunda edición (México 1955) es que el básquetbol femenino forma parte de los Juegos Panamericanos. Y si bien la cuenta no dará en primera instancia, este será el décimo quinto torneo para la rama, pese a que contando el corriente Toronto 2015, los juegos fueron 16.

El motivo de la discordancia de sumatorias se encuentra en Mar del Plata 1995. Entre el 19 y el 25 de marzo de ese año deberían haber jugado, pero dado el poco interés manifestado por gran parte de las selecciones, un par de semanas antes (el 3 de marzo), les llegó el telegrama a los cuatro equipos que sí estaban decididos a participar (Argentina, Brasil, Cuba y USA), sobre la cancelación de la disciplina.

Dejando de lado ese lunar, Argentina llega a su sexto Panamericano de forma seguida, sin tener registros previos de competencia. La primera vez para la celeste y blanca se dio en 1991 (Habana, Cuba), donde fue última, con marca de 0-4, por detrás de Canadá, Estados Unidos, Cuba y Brasil.

Pasando el fallido Mar del Plata, en 1999 (Winnipeg, Canadá) las nuestras sumaron sus primeras victorias. Con marca de 2-4 fueron quintas, por encima de República Dominicana, y teniendo arriba a Brasil, USA, Canadá y Cuba.

El 2003 (Santo Domingo, República Dominicana), tuvo para nuestras chicas la misma posición (quintas), con récord 1-4 y nuevamente quedando por sobre las anfitrionas. Canadá, Brasil, USA y Cuba completaron el clasificador.

Para el 2007 (Río de Janeiro, Brasil) el torneo recuperó los ochos participantes, algo que no ocurría desde 1975. Argentina fue sexta con marca de 1-4, superando a México y Jamaica en posiciones, aunque no así a Colombia, Canadá, Cuba, Brasil y USA.

Por último, en 2011 (Guadalajara, México), la celeste y blanca dio la nota en la jornada inaugural doblegando a USA por 58 a 55, para terminar el certamen con registro de 2-2; siendo quinta, y por primera vez en su historia, dejando tres equipos por detrás: Canadá, USA y Jamaica. Puerto Rico fue oro, México plata, Brasil bronce y Colombia se quedó fuera del podio.

De ese equipo, al que mañana se presentará en Toronto, se repiten seis nombres: Sandra Pavon, Paula Reggiardo, Agostina Burani, Melisa Gretter, Ornella Santana y Diana Cabrera. El resto de la plantilla la componen Macarena Rosset, Sthefany Thomas, Celia Fiorotto, Andrea Boquete, Gisela Vega y Débora González.

El cuerpo técnico es comandado por Cristian Santander. Su asistente Sebastián Silva. El preparador físico es Pablo Rótolo, el kinesiólogo Hernán Trotta y el utilero Facundo Vartanian.

Argentina comparte grupo con Cuba (16/7, 11:30 hora Argentina), Canadá (17/7, 19:00) y Venezuela (18/7, 11:30). Del otro lado, la zona la integran Puerto Rico, República Dominicana, Estados Unidos y Brasil.

El domingo 19, se disputarán las semifinales, como así también los juegos por el séptimo y quinto puesto; al tiempo que el lunes 20, serán los choques por medalla: 17:00, se pondrá en disputa la de bronce; mientras que a las 21:45 será el momento de la de oro.

Todos los encuentros se desarrollarán en el Ryerson Athletic Centre, un ícono del hockey sobre hielo, que por los Juegos Panamericanos, se transformó en el recinto que albergará al básquet y a la disciplina en sillas de ruedas durante los ParaPanamericanos.

De cara a estos Juegos nuestras chicas disputaron cinco encuentros amistosos en las últimas dos semanas. El equipo se trasladó a Puerto Rico, donde fue parte de un cuadrangular junto con las anfitrionas, Cuba y la República Dominicana.

En el debut doblegaron a las cubanas por 61 a 56 (Ornella Santana, 11 puntos y 7 rebotes); para luego caer ante las anfitrionas por 66 a 62 (Gisela Vega y Ornella Santana 10 puntos cada una). Cerrando el torneo, las chicas no tuvieron problemas en superar a las dominicanas por 75 a 46 (Sandra Pavon 14 tantos).

Antes de retornar al continente, se volvieron a medir con Puerto Rico, sacándose la espina e imponiéndose por 70 a 58 (Agostina Burani y Gisela Vega 14 unidades cada una). La delegación arribó a la villa panamericana el lunes a primera hora, y en la noche de ese mismo día sumó sus últimos minutos de fogueo ante Estados Unidos, con derrota por 90 a 49.

De cara al debut, y con la buena predisposición de siempre, el entrenador en jefe de la selección, Cristian Santander, se tomó unos minutos para dialogar con Pick and Roll. Aquí lo más saliente de la entrevista:

-Luego de una intensa Superliga que tuvo en movimiento a la gran mayoría del plantel, ¿Cómo viste a las chicas en estos fogueos?

“Las vi muy bien, con lo bueno del rodaje que generó la SuperLiga y lo lógico de algo de cansancio. Tomamos estos partidos con el objetivo de dosificar y distribuir minutos más allá de los resultados”.

-A la distancia, y a través de las estadísticas online, parecieron vivir altibajos, ¿A qué se los atribuís?

“Considero que el tiempo de convivencia como equipo nos irá llevando a nuestra mejor versión. Más allá de altibajos, el equipo por momentos jugó muy bien, y se lleva buenas sensaciones a Toronto. Por supuesto que siempre hay que mejorar”.

En la previa aparece como un torneo parejo, sobre todo el grupo de Argentina. ¿Por dónde pasarán las claves para llegar a semifinales?

“Yo pienso que para tener chances es vital poder mantener vivo el partido con nuestra intensidad defensiva, debemos multiplicar esfuerzos habituales, y que eso nos lleve a discutir el control del juego. Sin dudas para clasificar en el grupo de los últimos finalistas del FIBA Americas y entre los primeros 10 en el último Mundial debemos rozar la perfección”.

-Optaron con el cuerpo técnico por darles minutos a todas las chicas, en búsqueda de mayor rodaje y menor desgaste. ¿El plantel entendió esto? ¿Tienen asumido el rol que le corresponde a cada una?

“Yo no concibo un partido amistoso sin rotación completa de 12 jugadoras. Tengo la necesidad de que todas lleguen con expectativas de participación a un torneo. La tendencia también va a competencias oficiales de selecciones. Hoy todos juegan con un mínimo de 10 jugadoras”.

“Como pasa en muchos torneos se asignan roles iniciales que durante el desarrollo de la competencia misma pueden sufrir modificaciones. Tratamos de que la mayoría de las jugadoras mantengan todo lo bueno que hacen en sus clubes proporcional a los minutos de juego de una selección. Todas las jugadoras tienen claro, que no hay nada mejor que ponerse al servicio del equipo”.

-Por último, ¿Cómo se viene dando la evolución de juego de Gisela Vega luego del parate que debió afrontar por lesión?

“De menor a mayor, los partidos amistosos le van dando confianza, y esperamos siga en alza para que pueda darle jerarquía a nuestro juego interior”.

Emanuel Niel
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