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31/10/2015 02:00 | NBA

De la mano de Towns

Este viernes por la noche, en Denver, los Timberwolves lograron su segunda victoria de la temporada. En un duelo que anticipa lo pareja que será la conferencia oeste, el que pudo sobreponerse fue Minnesota, liderado por el novato Karl-Anthony Towns con 28 puntos y 14 rebotes (segundo doble-doble en dos partidos jugados). En el local se destacó el rookie Emmanuel Mudiay con 15 unidades.
Autor:Agustín Cañete (Especial para www.pickandroll.com.ar
De la mano de Towns

En un juego que fue más peleado que lo que muestra el marcador, los Minnesota Timberwolves lograron la segunda victoria como visitantes. El vencedor, guiado por Rubio (12 pts. Y 8 asistencias) y por los jóvenes Wiggins y Towns, supo imponer una defensa intensa que cortó las vías de ataque de los Nuggets (Gallinari y Faried combinaron sólo 19 puntos). Esa intensidad llevó al rival a cometer muchos errores y a un bajo porcentaje de eficacia (29-95), claves para obtener el triunfo.

Tras un inicio arrasador de Towns (3-3 de cancha y 2 bloqueos), Denver pudo atacar el aro con determinación, superando la defensa de Minnesota que salía lejos para impedir el tiro exterior, de la mano de Gallinari y Harris (4 pts. De cada uno). Los Nueggets intentaron ajustar en defensa para contrarrestar el pick and roll manejado por Rubio, pero el base español se encargó de encontrar tanto a Wiggins como a Towns que le dieron la ventaja a la visita por 15 a 10.

Denver no encontró efectividad ni con los titulares ni con los suplentes (7-20) y Minnesota, con una buena rotación del balón, lo aprovechó para distanciarse por 10 puntos. En un cierre de cuarto que tuvo pérdidas por ambos lados y acciones individuales la banca de los Timberwolves se aseguró de mantener la ventaja, 26 a 16.

Los primeros minutos del segundo período fueron una consecuencia del final del primero: ambos con bajo porcentaje de cancha y muchos errores; en 4 minutos de juego cada equipo convirtió sólo 5 puntos. Con el regreso de la formación inicial, la defensa de Denver pudo ajustar las marcas, correr la cancha y, tras perder por una máxima de 13, limar la diferencia a 6.

Los errores del novato Mudiay eran solventados por la energía que aportaban Faried y Gallinari. Al querer impartir un ritmo vertiginoso al juego, el contacto físico fue incrementando y los cuantiosos roces (incluida una falta técnica a Faried por protestar) hicieron lento el partido. A pesar de las idas a la línea de libres (Min 21, Den 14) el marcador se mantenía bajo: 49 a 39 (42% de cancha para Minnesota, 31% para Denver). Al cierre de la primera mitad los novatos lideraban las estadísticas: Towns con 14 puntos y 8 rebotes, Mudiay con 9 puntos y 2 robos.

La segunda parte arrancó con Towns dominando nuevamente, tanto con su tiro exterior como en penetración; Lauvergne no le salía a marcar el tiro a distancia y, cuando lo hacía, perdía en velocidad, regalando la zona pintada. Mudiay, por su parte, fue clave para convertir y manejar un parcial favorable a Denver 7 a 0. Los menos experimentados sostenían los hilos de cada equipo.

El juego estuvo detenido unos minutos por una rotura del reloj de tiro; el descanso le cayó mejor a Minnesota que estiró la ventaja a 14. La defensa del visitante se mostró siempre activa, presionando y saliendo a molestar en los tiros externos: los Nuggets convirtieron solamente 13 puntos en 6 minutos. En el otro costado, el juego de pases de los Wolves fue preciso, encontrando siempre tiros cómodos y abiertos; el trabajo silencioso (en las estadísticas) de Garnett fue el engranaje de una ofensiva fluida y eficaz.

El técnico de Denver, Malone, no podía encontrar la forma de detener el juego interior del rival, que se escapó 71 a 52 (parcial de 16 a 4). Recién sobre el cierre del período apareció Jameer Nelson para imprimirle velocidad al ataque y los Nuggets se sintieron, por primera vez en el juego, cómodos en ofensiva. Sin embargo no pudieron capitalizar los tiros descubiertos de marca y los Timberwolves se llevaron el cuarto por 6 puntos.

El último episodio comenzó con errores de ambos lados. Muchas pérdidas en ataque para los Wolves (varias faltas ofensivas) y poca efectividad en tiros sencillos, de contragolpe, para Denver. El control del juego parecía ahora tenerlo el local, que logró un mejor ritmo ofensivo de la mano experimentada de Nelson; la ventaja que supo ser de 20, era ahora de 12. Mitchell hizo regresar a los titulares, pero los Nuggets, con mayoría de suplentes, parecían decididos a remontar el partido; mejoraron en defensa y en ataque la contribución de Barton fue clave en la recuperación.

Denver tuvo muchas oportunidades pero se desesperó en el intento de recortar la diferencia y falló ataques favorables. La figura de Rubio se fue acrecentando en ambos lados de la cancha, recuperando, anotando y asistiendo a sus compañeros y la diferencia volvió a ser significativa tras un doble y falta de Wiggins (18 pts.). El tiempo hizo su labor y los Timberwolves, con paciencia y atención en defensa, se llevaron una nueva victoria a casa, 95 a 78.

Síntesis

Denver (78): Mudiay 15, Harris 4, Gallinari 10, Faried 9, Lauvergne 10 (FI). Barton 14, Foye 0, Nelson 3, Arthur 3, Jokic 10, Miller 0, Green 0, Hickson -.

Minnesota (95): Rubio 12, Wiggins 18, Prince 2, Garnett 4, Towns 28(FI). Dieng 2, Martin 14, Bjelica 3, LaVine 10, Muhammad 2, Payne -, Rudez -, Miller -.

Parciales: 16-26, 23-23, 24-30, 15-16.

Estadio: Pepsi Center, Denver.

Agustín Cañete

En Twitter @agustincanete12