El campeón sigue imparable

En la previa se esperaba un gran encuentro entre los últimos dos invictos de la Conferencia Oeste de la NBA. Porque comenzaron la temporada de gran forma, porque son dos de los equipos más atractivos para ver y porque los lideran dos de los mejores bases de la liga.

El pronóstico se cumplió con creces. De arranque el partido fue parejo y cambiante. Paul lideraba a los de Los Ángeles (9 puntos en el parcial) y en los Warriors todos hacían puntos (9 jugadores convirtieron en ese primer cuarto) liderados por un Festus Ezeli, que nuevamente tuvo un gran juego y está haciendo olvidar fácilmente al australiano Bogut.

Se alternaron en el marcador en varias oportunidades pero una ráfaga en el último minuto y medio le permitió a los locales irse al primer descanso con una pequeña luz de ventaja (31-25).

El comienzo del segundo cuarto mostró lo mejor de los Warriors en el partido. Paulatinamente fueron alejándose en el marcador y 9 puntos consecutivos de Curry (2 triples + 3 libres) llevaron a GSW a tener la máxima del encuentro (46-29). Sin embargo, los Clippers comenzaron a recortar diferencias en la segunda mitad de ese período y nuevamente Paul, ahora acompañado por Blake Griffin, hicieron que la distancia fuera mucho más corta para entrar en la segunda parte del juego (63-56 para GSW).

En la primera mitad del tercero los campeones manutuvieron la ventaja que traían de la primera mitad, hasta que una corrida de 11-0 (pasaron de perder de 77-68 a a ganar 79 -77) puso en juego de nuevo a los Clippers y a partir de allí empezó otro partido. El tercero terminó 83-82 a favor de los visitantes y el último cuarto se presagiaba vibrante y emotivo.

La segunda línea de los Clippers fue más que la de GSW en el comienzo del último y con conversiones de Crawford, Rivers, Smith y Pierce se alejaron a falta de 8 minutos por 10 (97-87), pero el ingreso de los titulares y 9 puntos seguidos de Harrison Barnes emparejó definitivamente las acciones (98-97 para LAC).

El final fue de playoffs. Y un festival de Stephen Curry. El base de los Warriors tomó las riendas del partido y no las soltó nunca. Convirtió 8 puntos seguidos (2 triples + 1 doble) y con el partido abajo por 1 (106-105) y 1 minuto por jugar, convirtió un triple de 8 metros que puso a su equipo arriba y a un paso del triunfo (valga el juego de palabras: Como hace para hacer lo que todos saben que va a hacer y lo hace igual). Luego una gran defensa de Iguodala sobre Griffin y un tiro de tres malogrado de Paul, le permitieron a los de Oakland cerrar con libres y conseguir la hasta aquí más trabajosa victoria del arranque de la temporada.

Síntesis:

Golden State Warriors (110): Stephen Curry 31, Klay Thompson 16, Draymond Green 10, Harrison Barnes 17 y Festus Ezeli 12 (FI) André Iguodala 6, Leandro Barbosa 9, James Mc Adoo, Marreese Speight 7, Shaun Livingston 4 DT: Luke Walton

Los Angeles Clippers (106): Chris Paul 24, Blake Griffin 23, Lance Stephenson 7, J. Reddick 13 y D. Jordan 11(FI) Paul Pierce 4, Jamal Crawford 8, j. Smith 5, Austin Rivers 8, y W. Johnson 5. DT: Doc Rivers

Parciales: 31-25, 63-56, 82-83.

Estadio: Oracle Arena

Pablo Carranza

En Twitter: pcarranza8