En el día en el que Sergio Hernández dejó entrever que podría estar en Río 2016, Emanuel Ginóbili se despachó con una destacada actuación en la victoria de los Spurs sobre Washington por 114 a 95. El bahiense terminó con 11 puntos, 8 asistencias y 3 rebotes en 18 minutos. Leonard volvió a ser determinante con 27 tantos. Fue la cuarta victoria consecutiva para los de Popovich.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
El rumor se propagaba vía Twitter y la esperanza floreció a pasos agigantados. Sergio Hernández, técnico de la selección argentina, dijo que cree que Emanuel Ginóbili estará disponible para los Juegos Olímpico de Río de Janeiro, el año que viene.
Esta noche, Manu demostró que está en un momento basquetbolístico muy bueno para poder aportar todo su talento y experiencia, y lograr retirare del seleccionado aún de una mejor manera. El bahiense cumplió una muy buen labor y sus San Antonio Spurs (sin Tim Duncan) derrotaron a los Washington Wizards por 114 a 95.
Ginóbili estuvo durante 18 minutos en cancha en los cuales sumó 11 puntos (3/4 en dobles, 1/3 en triples y 2/2 en libres), 8 asistencias - su marca más alta de la temporada - y 3 rebotes.
Durante el primer cuarto era Washington el que comenzaba más firma, de la mano de Marcin Gortat, quien sumó 10 puntos con 4/5 en tiros de campo. El corazón de la pintura sería un problema para los texanos en durante la primera etapa. John Wall estaba activo, con 9 tantos y 3 asistencias, al tiempo que Ramon Sessions desde el banco aportaba 6 puntos.
Así la visita llegó a adelantarse 16-10 a 5:36 del primer descanso. Pero los Spurs reaccionarían con el ingreso de Emanuel Ginóbili. El bahiense entró muy bien a la acción, y de inmediato su equipo metió un parcial de 9-2 con el que tomó el liderazgo del partido 19 a 18. Sin embargo la visita cerraría mejor, San Antonio no estaba lúcido en defensa, y terminaría el período abajo 31 a 25.
Manu continuó su faena en el inicio del segundo cuarto. Asistió a Marjanovic para una volcada, defendió y clavó cuatro puntos para una nueva ráfaga de los Spurs (8-0) que les devolvió la ventaja, 35-33. Además de Ginóbili, la razón por la que San Antonio lograba despegarse era la defensa.
Tras un minuto pedido, fue Parker el que dijo presente. El francés clavó seis puntos al hilo para que los de Popovich sacaran una máxima de 9 tantos (51-42) con 2:32 para el entretiempo. No obstante, los Spurs cerrarían mal el parcial. Los Wizards establecieron una ráfaga de 10-2 (6 puntos del novato Kelly Oubre Jr) para irse al descanso largo abajo solo 55-52.
Pero el segundo tiempo sería todo de los San Antonio Spurs. El dueño de casa comenzó enchufadísimo el tercer cuarto, y nunca sacaría el pie del acelerador. Mucha responsabilidad carga sobre los hombros de Kawhi Leonard, a quien nada le saldría fuera del libreto durante el tercer período. Anotó diez puntos en forma consecutiva – y sin fallar – para que el equipo de Gregg Popovich la primera gran ventaja de la noche, 71-60.
El alero continuó su trabajo en el costado defensivo cerrándole los caminos a Wall (2/6 de cancha, 2 pérdidas). Los Spurs por primera vez lograban clausurar la llave, y así la máxima fue cada vez más amplia, hasta llegar a tocar los 16 puntos (78-62) durante el cuarto. En su regreso, Manu siguió contribuyendo y cerró el período con un triple sobre la chicharra que dejó el marcador 86-71 para los texanos. Fue lo mejor de San Antonio en el partido.
Los doce minutos finales, en su totalidad, portaron el aroma a partido liquidado. Al margen de las muy buena intervenciones del rookie ubre Jr, el equipo que dirige Randy Wittman (10-14) jamás pudo regresar al juego. Otto porte nunca fue factor, al tiempo que Gortat ya no era el del primer tiempo (6 tantos en el complemento).
Los Spurs continúan teniendo uno de los mejores comienzos de su historia. Con la de anoche sumaron su cuarta victoria consecutiva, y ascendieron a un récord de 22-5, con el que se mantienen firmes en la segunda posición de la conferencia Oeste.