La defensa del último período le dio cierre a una buena producción ofensiva de los Spurs, que derrotaron a los Clippers por 115 a 107 para alcanzar la quinta victoria consecutiva. Emanuel Ginóbili terminó con 5 puntos en 21 minutos de juego, al tiempo que Pablo Prigioni no ingresó. LaMarcus Aldridge fue el goleador de San Antonio con 24 tantos. El equipo de Gregg Popovich continúa invicto como local.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
A medida que los partidos transcurren, San Antonio se muestra cada vez más afianzado a su sistema. De la mano de una muy buena producción ofensiva y la capacidad defensiva en el último cuarto los Spurs salvaron el invicto del AT&T Center, que ahora ascendió a quince partidos, tras la victoria frente a los Clippers por 115 a 107.
El equipo de Gregg Popovich contó con varios puntos altos, entre los que se destacó LaMarcus Aldridge, autor de 24 puntos y 12 rebotes en 32 minutos de juego. El ex ala pivot de Portland fue el elemento más visible en el marco de un funcionamiento ofensivo impecable, que solo perdió un balón en todos el segundo tiempo.
Sin embargo eran los Clippers lo que comenzarían más sólidos el encuentro. De la mano de Blake Griffin, los californianos establecieron una primera diferencia importante en el juego de 7 puntos (11-4); sin embargo su duelo ante Aldridge se presentó rápidamente, y “LA-Train” no tardó en constar. Tomó las riendas de su equipo, que rápidamente dio vuelta el marcador para pasar al frente 19-18 a 4:19 del primer descanso.
Per los de Doc Rivers no solo dependía de Griffin. Durante el primer cuarto tuvieron un goleo repartido, y así fue que con alta eficacia terminaron arriba en el marcador 30-26.
En el segundo cuarto comenzó a engranar el ataque de los San Antonio Spurs, sobre todo cuando comenzaron a conectar los tiros a larga distancia. Primero un triple Emanuel Ginóbili y luego dos de Danny Green le daban a los locales la ventaja de 40-37 a 8:09 del cierre de la primer mitad. No obstante, aparecieron las pérdidas en San Antonio. Chris Paul estaba inspirado, encestando y moviendo a sus Clippers, por lo que se bajó el telón del primer tiempo con el marcador igualado en 55.
San Antonio comenzó amostrar debilidades defensivas, sobre todo en el perímetro. J.J Redick (6) empezaba a ser factor ya que Green no podía con él. Leonard había hecho una buena tarea, pero ante la presencia de Mbah a Moute debía irse con el camerunés.
Así fue que Pop cambió de marcas; después de Green fue Parker, y luego Mills. Pero Paul era una pesadilla, y lideró a los Clippers, que se escapaban 82-76 a 2:38 del cierre del período. Pero volvió a aparecer Aldridge en su duelo ante Griffin. Con 4 puntos de su autoría más un triple de Simmons san Antonio achicó 83-84, y terminó abajo el tercer cuarto 88-85.
Las buenas acciones en ataque por parte de los Spurs se trasladaron al costado defensivo durante el último cuarto. Los texanos comenzaron los doce minutos finales con un parcial de 11-0 con el que establecieron una máxima diferencia de 96-88, que resultó lapidaria para los Clippers.
Como había hecho durante el tercer período, Popovich volvió a emplear al “Hack a Jordan”, con lo que envían a la línea al gigante, que solo promedia un penoso 39% en libres. De todas formas, la táctica de cortar con falta a DeAndre Jordan no le daría tanto resultado, y los angelinos lucharon hasta el final.
Parker terminó siendo uno de los más destacados en San Antonio gracias a su último cuarto, en el que anotó 10 de sus 21 puntos - algunos decisivos - y capturó un rebote ofensivo clave.
Griffin enmudecería al estadio con un triple que dejó el marcador 11-107, todavía con 15 segundos en el reloj. Pero San Antonio logró salir airoso cuando Leonard, primeros, y Aldridge después fueron a la línea y convirtieron sus lanzamientos.
De esta forma, los San Antonio Spurs se mantienen como únicos escoltas de los Warriors con un récord de 23-5 tras cosechar su quinta victoria en fila. Por su parte, los Clippers se ubican cuartos en el escalafón del Oeste con un registro de 16 triunfos y 11 derrotas.