Le costó mucho cerrarlo a los Mavericks pero finalmente lograron derrotar a Boston por 118 a 113 en tiempo suplementario. La figura fue Dirk Nowitzki con 31 puntos, 25 de ellos entre el segundo tiempo y la prórroga. Deron Williams también fue decisivo en los cinco minutos finales. A los Celtics se les cortó una racha de tres triunfos seguidos.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
Lo que comenzó siendo una paliza que hacía pensar en una noche aburrida terminó convirtiéndose en un partido vibrante, de resultado incierto. Con mucho sufrimiento, los Dallas Mavericks lograron vencer a los Boston Celtics por 118 a 113 en tiempo suplementario.
El equipo texano controló el juego tanto en el primer tiempo como en la prórroga, sin embargo Boston siempre corrió desde atrás para dar vuelta las acciones, o lograr mantener el suspenso hasta el sonido final de la chicharra. A punto tal que el local necesitó de la mejor noche de Dirk Nowitzki en lo que va de la 2015/2016: el alemán sumó 31 puntos (máxima este año), 25 de los cuales los anotó luego del entretiempo.
Dallas comenzó a escaparse rápidamente en el juego, ya que en los primeros minutos había sacado un margen de 17-2, en gran parte gracias a su esfuerzo defensivo que mantenía a los Celtics en un 13% de cancha. Asimismo, poco a poco los triples iban cayendo para los texanos; primero Parsons, luego Matthews con dos y tres, respectivamente.
Si bien los Mavericks dominaban el juego en el amanecer del mismo, Boston no perdería el foco; iba a tener dos parciales – ambos de 8-0 – con los que lograría no irse del partido. El primero llegó entre el final del cuarto inicial y el comienzo del segundo. Allí se acercó 24-32.
Steven mandó a la cancha una media cancha rápida (Isaiah Thomas, Avery Bradley y Marcus Smart) con la que logró cambiarle el ritmo a Dallas. Pero el local volvería a imponer su peso individual, nuevamente desde las manos de Matthews. Luego de los 11 puntos del primer cuarto, el ex Portland clavó cuatro más (consecutivos) que le dieron algo más de aire a los Mavs (48-31).
En Boston Smart fue sobre Williams, decisión que le sirvió para confundir a su rival y lograr establecer el segundo parcial de 8-0 con el que volvió a limar la distancia (37-48). No obstante, Dallas logró sostenerse hasta el final, y se fue al primer descanso arriba 52-39.
Boston reescribió el guió del partido en el tercer cuarto, que terminó ganando por 33 a 18. Una de las causas fueron los 20 puntos convertidos en la pintura, en principio con el empuje de Sullinger (6) y también mediante penetraciones. La segunda causa principal tuvo nombre y apellido: Isaiah Thomas. El base explotó durante el período con 12 puntos, 4 asistencias y 3 rebotes, y logró que los Celtics, que comenzaron a defender muy bien, pasaran al frente por primera vez 65-64.
Viendo que su equipo perdía el rumbo, Rick Carlisle dispuso nuevamente los ingresos de Williams y Nowitzki, que terminarían siendo claves a partir de ese momento. Con los Mavericks abajo por dos de cara al último cuarto del período regular, el alemán se vistió con la ropa de héroe, algo que supo hacer durante toda su carrera.
Metió 14 de los 28 puntos de Dallas en el último cuarto para sostener a un equipo que parecía caerse. Del otro lado Boston continuó elevando la vara, ofreció resistencia hasta el final y tuvo su premio. Raymond Felton le cometió falta a Jae Crowder cuando lanzaba un triple, lo mandó a la línea y le permitió igualar el marcador en 98 al hundir los todos sus lanzamientos.
Ya en la prórroga, la jerarquía de los Mavs pareció superar al más modesto equipo celta, aunque la definición se haría esperar. Williams salió enchufadísimo a jugar los últimos cinco minutos, en los que sumó 9 de sus 20 puntos. En una seguidilla que pareció lapidaria, “D-Will” metió dos triples, y Nowitzki anotó uno más para que Dallas se escapara 112-105 a 35 segundos del cierre. Pero no sería la última palabra.
Los dirigidos por Brad Stevens, lejos de darse por vencidos, apostaron a la rápida definición de larga distancia, y tuvieron éxito. El canadiense Kelly Olynyk metió dos triples en posesiones consecutivas de Boston, que a 17 segundos del final se encontraba a solo tres, 111-114. Como no podía ser de otra manera, Nowitzki – en dos oportunidades – llevaría tranquilidad al American Airlines Center desde la línea (4/4).
Con esta victoria, los Mavericks (24-19) se mantiene sextos en el escalafón del Oeste. Por su parte, Boston vio frustrada su racha de tres triunfos seguidos, y ahora quedó con un récord de 22-20, todavía octavo en el Este.