(Opinión) La llegada de Pau Gasol a San Antonio se vio minimizada por el detonante que causó la de Durant a los Golden State Warriors. No obstante, no hay que pensar que se trata de una noticia menor. El catalán mantiene a los Spurs en lo más alto y será fundamental ya que su filosofía va de la mano con la texana.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
Las redacciones arden, las cuentas de Twitter se sacan chispas minuto a minuto, segundo a segundo. El mercado de agentes libres de la NBA no da respiro para los que tienen la obligación de dar a conocer el detalle de cada transferencia, cada negociación entre los equipos y sus pretendidas estrellas.
Sin lugar a dudas el día tuvo su pico máximo cuando surgió la noticia que Kevin Durant dejaba Oklahoma City para ir en busca de su primer anillo junto a los Golden State Warriors. Desde ese preciso instante en el que la información fue cobrando eco, se hizo lugar y comenzó a desparramarse alrededor del mundo. La NBA tiene un nuevo equipo de elite.
Sin embargo atrás, allá escondido, parece haber quedado el arribo de Pau Gasol a San Antonio, cuyo impacto mediático se vio brutalmente opacado por la decisión de “KD”, pero no por eso se trata de una noticia menor.
En primer lugar no hay que perder de vista que con el catalán los Spurs continúan siendo un equipo vigente. Superados por el Thunder en las semis de conferencia de los pasados playoff, y con la incertidumbre cubriendo el futuro de Tim Duncan y Emanuel Ginóbili, el equipo texano parecía comenzar a retroceder un par de casillero para volver a tomar impulso desde un leve período de transición.
Sin embargo por segundo año consecutivo R.C Bufford y Gregg Popovich salieron al mercado a lo grande, algo que nunca fue de su estilo. El año pasado se llevaron a LaMarcus Aldridge y David West, ahora es Gasol el que se une a sus filas para continuar entre los equipos más poderos del Oeste.
Gasol es una pieza que encaja perfecto en la estructura de San Antonio, cuyo período de adaptación será mínimo y no tardará en darle réditos a “Pop”. La forma de entender y sentir el juego por parte del pivot de la selección española habla el mismo idioma que la del futuro entrenador del equipo estadounidense, como su hubiera nacido para ser un spur.
Su entendimiento de lo que pasa en el partido, la capacidad para pasar el balón, su juego de espaldas al aro, más su habilidad en ofensiva comenzarán a ser primordiales en el funcionamiento texano, sobre todo si los rumores acerca del retiro de Tim Duncan se hacen realidad. No Se trata solamente de un gran jugador, sino de uno que además cuenta con la experiencia de quince años y dos campeonatos en la elite, nada menos que con los Lakers.
La dupla interior que conformará junto a Aldridge será una de las más envidiables de toda la liga; aunque haya una tendencia muy marcada de jugar con formaciones bajas, se sabe que contar con dos internos de semejante calidad puede posicionar a un equipo por encima de cualquiera.
San Antonio nunca generó mucho revuelo mediático, por lo que esta operación reviste de dicha característica. Los Spurs saben que cuando las luces apuntaron hacia otro lado, desde atrás su básquetbol siempre se ganó un lugar.