Con la frente en alto

Se suele decir que en todo torneo hay que soportar una noche con malos porcentajes. Esa noche la tuvo argentina ante un rival que no lo perdonó. A veces se puede ganar igual, pero Lituania es una selección de suma calidad que fue comiendo de lo que Argentina le daba. Se erraron tiros libres (16/28) que en el volumen nos costaron el partido y además 7/26 en triples. En un juego de tanta calidad dar esa ventaja es condenatorio,

Para suplir los malos porcentajes se apeló al plan “energía - meter – Luchar” y se estuvo cerca pero los estocas finales de los tiradores lituanos decidieron el ganador. Ya pasó fue una buena prueba para Argentina que tuvo este desarrollo:

Sergio Hernández se decidió por Roberto Acuña en el quinteto abridor para medirse mano a mano con Valanciunas. Esto lo sacó del equipo a Garino pero acomodó a Scola de 4 y Nocioni de 3.

Por primera vez en el torneo Argentina salió a jugar control y poste bajo, a diferencia de los otros dos partidos, donde hizo de la dinámica ya la aceleración una bandera. Acuña con el poste, Scola en las cortinas y abierto al tiro y cortes perimetrales. Luego de un primer paso parejo (7-6) la selección se recostó un par de ataques a zona, para cambiarles el ritmo al rival.

Ginóbili erro de manera increíble cuatro libres seguidos pero apareció Scola con una seguidilla de puntos con su sello para darle gol a la selección (15-14). Ambos equipos mantuvieron la premisa que los trajo a la tercera fecha invicta: gol en diversas manos. El primer cuarto cerró 15-16 arriba Lituania

Para el segundo cuarto saltaron al campo Laprovíttola, Garino, Delfino, Delia y Mainoldi. Una escuadra suplente que debía bancar un partido que ardía. Pero Kalnietis empezó a hacerse dueño del partido y con puntos propios y asistencias se hizo dueño del juego para disparar por primera vez una distancia (18-25).

El “Oveja” aguantó todo lo que pudo y mandó a Scola y Nocioni a la cancha pero la suerte no mejoró (21-27) hasta que regresó Ginóbili por Garino en busca del gol perdido. Lentamente mejoró la defensa del rebote y la salida de Kalnietis le quitó a Lituania su volumen de juego.

El primer tiempo cerró con una leve ventaja de 3 (27-30) a favor de los europeos y con Argentina tirando 3/15 en triples y 8/18 en dobles. Además tomando una muy buena selección de tiros sin oposición, el camino estaba bien pero no ayudaron los porcentajes. Diferente a Lituania que a pesar de tirar 2/14 en triples, no le gusta tanto depender del tiro de tres.

Para el segundo tiempo Hernández confió en el mismo quinteto del inicio y esta vez tuvo una respuesta más certera de los tiradores, sobre todo Ginóbili que salió encendido para que Argentina pase al frente 37-34.

Pero aparecieron Maciulis y Kalnietis y una mejoría defensiva de los europeos y Argentina empezó a chocar, toda vez que sus porcentajes de tres puntos volvieron a caerse. No hubo muchas más soluciones que el tiro largo para equilibrar un equipo Lituano que controló muy bien el rebote defensivo.

El partido se puso aún más difícil cuando Lituania empezó a encontrar gol, mucho más arriba del ritmo requerido. Se encendieron sus tiradores y marcaron 4/7 en triples en el tercer cuarto para un total de 27 puntos en el segmento. Demasiado.

Argentina había perdido la brújula defensiva y corría siempre por detrás de las intenciones lituanas, que disfrutó de un parcial (27-22) fantástico. Dos libres de Ginóbili sobre el cierre del tercer cuarto achicaron la diferencia a 8 (49-57)

Para el cuarto final jugado por jugado Scola fue de pivote y se puso en cancha el equipo con más jerarquía posible. Y Allí Argentina tuvo una racha que fue del gol a lo anímico sin que Lituania entendiera lo que estaba pasando. De ganar 49-59 en apenas 2:10 minutos llegó el empate en 59. Fue una ráfaga tremenda que se extendió a parcial 12-0 con un doble de Ginóbili.

Desde allí Lituania pudo frenar el temporal y poner el juego nuevamente en un tono de paridad. A falta de 4:40 el juego estaba igualado en 64 y Lituania encontró un triple de Maciulis, doble de Seibutis y doble de Kalnitis para marcar un parcial 7-0 que le devolvió la confianza. Entró Delfino, y una protesta de Nocioni terminó en técnico (64-72). Fue el único momento que pareció en todo el partido que Argentina se fue de la cabeza.

Las opciones ofensivas argentina se redujeron a una combinación de Scola-Ginóbili pero con poco juego asociado y pocos pases pero un enrome corazón otra vez se volvió a recuperar la desventaja hasta y dos veces nos pusimos a tres puntos. Pero lo dicho, no era el partido y todo lo que se tiró para ganar dio dos vuelas en el aro y salió.

A veces eso le pasa hasta a una generación que vale Oro. El básquet es así. Seguramente el repaso frío dará los errores y las situaciones a corregir. Pero en un juego que se llevó con el corazón el único análisis posible es esperar el siguiente partido.

Síntesis
Argentina (73): Facundo Campazzo 10, Emanuel Ginóbili 22, Andrés Nocioni 14, Luis Scola 12, Roberto Acuña 2 (FI) Marcos Delía 0, Nicolás Laprovittola 3, Carlos Delfino 10, Leonardo Mainoldi , Patricio Garino 0. DT: Sergio Hernández.

Lituania (81): Mantas Kalnietis 17, Marius Grigonis 7, Jonas Maciulis 10, Domantas Sabonis 7, Jonas Valanciunas 6 (FI). Mindaugas Kuzminskas 23 , Adas Juskevicius 0, Renaldas Seibutis 9, Paulius Jankunas 2, , Vaidas Kariniauskas 0. DT: Jonas Kazlauskas.

Parciales: 15-16, 27-30 y 49-57
Estadio: Carioca Arena 1
Árbitros: Belosivic (SRB), Javos (SLO) y Viatros (FRA)

Fotos FIBA

Pablo Tosal
@pablotosal