Las palabras salen de la boca del jugador de Anzorena y en su voz todavía hay un tono de tristeza. El pívot fue operado por su rotura en el Tendón de Aquiles y ahora sólo tiene en la cabeza “volver lo antes posible pero bien”. Transita su tercer mes de recuperación.
Viene jugando su propio campeonato. Ese que no conoce de partidos ganados ni perdidos, goles en contra o a favor. En su torneo no figuran Junín, Rivadavia, Pérfora, Centro Español, entre otros. Su batalla, va contra él mismo y su peor rival sería bajar los brazos antes de tiempo. Estamos hablando de Maximiliano Torino, quien desde aquel 4 de noviembre, fecha en la cual su vida dio un giro negativo, lucha por volver rápido a los rectángulos de juego. Operado del Tendón de Aquiles y en plena recuperación, dialogamos con el interno de Anzorena para conocer cómo lleva estos días. “Estoy a full con la rehabilitación, voy dos horas por día a fisioterapia. Quiero volver a la cancha, la ansiedad es muy grande. El otro día hice algunos tiros al aro y pensé que ya estaba para regresar pero esto uno tiene que hacerlo a conciencia y de la mejor manera. Esto es largo y hay que volver de la mejor manera”.
Los días para él pasan entre su hogar, el Centro Kinesiológico de Juan Pablo Bordoy y el club. Aprovecha para “matar” el tiempo con sus compañeros y de paso mantener la cabeza en actividad. “Uno quiere acompañar a los chicos pero también vengo al club a hacer pesas por el tren superior que es lo que puedo ir haciendo. Me ayuda a estar con la mente ocupada y estar en el día a día con ellos”.
Recuerda con preciso detalle esa mala noche aunque intenta olvidarla de su cerebro. Por eso sólo habla de su vuelta. Quiere dar vuelta esa página: “El 22 de noviembre me operaron y luego de un mes de yeso, estuvo otros 30 días con la bota. Cuando me retiraron el yeso, recién ahí empecé a hacer fisioterapia; los primeros días fueron en mi provincia, Salta. Tengo bastante movilidad en el tendón, puedo caminar sin muleta pero por orden del médico la sigo usando. Va evolucionando todo muy bien, eso me ha dicho el médico (Alejandro Leiva). Esto me pone muy contento a mí, a mi familia y a todos los que me quieren ver de vuelta. Tengo que manejar la ansiedad nada más”.
Luego de la operación, las complicaciones llegaron. El día a día se hizo complicado. “Todo el tiempo estuvo mi novia, se hacía cargo de todo: si tenía que poner una silla en el baño para bañarme, lo hacía ella. Tuve que depender siempre de alguien. Lo que antes me era fácil, ahora ya no. Cuestiones sencillas, no las podía hacer. Se me hizo muy difícil el manejo del yeso. En Salta, me apoyó mucha mi familia”.
Sus ganas están intactas y eso se lo agradece al médico. “Todo comenzó con el médico que me dio mucha confianza. Me dijo 120 días a la vuelta, todo evoluciona para que vuelva en ese tiempo pero creo que voy a demorar un poco más. Tuve momentos malos, como en toda lesión. Hubo días en que lloraba porque me sentía inútil, me encerraba en la pieza y no quería hacer nada. El peor momento fue cuando me enteré que se me había cortado el tendón y que me perdía toda la temporada. Nunca me había lesionado de esta manera. Fue un golpe muy duro porque venía preparándome desde agosto para jugar y sólo pude hacerlo dos fechas. Estoy poniendo lo mejor de mi para volver con todo”.
-¿Ha significado todo un cambio para vos esto?
Fue una experiencia mala y me sirvió. Trabajé muy duro para volver no solo con la rehabilitación, sino también con las comidas. Esto me ha servido para futuro para seguir por esta línea y hacer las cosas bien.
-¿Cuáles son tus planes?
Espero poder jugar algunas fechas del Torneo Federal o ya el Local para tomar otro ritmo. Las ganas que tengo es demostrar acá en el próximo Federal al jugador que trajeron. Le debo mucha a la gente. Estamos lejos de eso, igual lo primero que quiero es volver a la cancha.
-¿Cómo ves al equipo?
Con la llegada del Caniche, el equipo se va a potencia más porque nos va a dar mucho abajo del aro. Ahora va a ser otra cosa teniendo a todos los jugadores.. Uno que viene todos los días acá, ve como los chicos se rompen el alma entrenando. Varios partidos más vamos a ganar. Lo importante es llegar bien a los cruces de playoffs.