Nuevamente Cleveland comienza una serie ganando. Pese a ser visitante, demostró todo su potencial, robó la localía de forma temprana y el 117 a 104 quedó corto. Los Celtics tendrán que reponerse rápido si no quieren ser barridos. LeBron James y Kevin Love combinaron 70 puntos entre ambos.
Autor:Flavio Ibarra (@Flaviorocambole en Twitter e Instagram)
Hoy ante un T.D Garden repleto, comenzaba la final de Este entre el mejor de la temporada regular y el 2º clasificado: Boston y Cleveland. El local llegaba tras batallar en unos arduos 7 juegos ante Washington (4-3), mientras que los Cavs llegaron invictos en la postemporada, tras barrer sus dos primeras series.
Cleveland hizo un partido magnífico en Boston y superó al equipo de Stevens por un contundente 117-104. La diferencia pudo ser mayor, pero en los últimos minutos el local decoró el resultado. LeBron James y Kevin Love fueron las figuras del ganador, mientras que Avery Bradley fue el mejor de un apático Boston.
Ya en el primer cuarto se pudo visualizar una gran diferencia: los dirigidos técnicamente por Tyron Lue hicieron una defensa terrible sobre el perímetro de los Celtics y ganó el primer chico 30-19. Cuando se esperaba una reacción, la efectividad de tres puntos del visitante dio por tierra todas las esperanzas verdes y se cerraba el primer tiempo con una paliza: 61-39.
El segundo tiempo, LeBron y compañía, manejaron los tiempos a placer y recién en el último cuarto y con el partido definido, Boston se acercó para decorar el resultado. Thomas fue controlado, pero terminó con un doble-doble (17 puntos + 10 asistencias). Por su parte, LeBron terminó con 38 unidades y tuvo un ladero de lujo: Kevin Love (32 puntos, 12 rebotes).
El próximo sábado se jugará la revancha en el mismo escenario. Los Celtics tendrán que reponerse rápido, porque la confianza de Cleveland parece crecer más y más. Este equipo joven, ¿estará a la altura de las finales del Este ante el último campeón?