(Opinión) Bahía Basket mostró argumentos de sobra para convertirse en tricampeón de la Liga de Desarrollo. Cada año fue variando en jugadores, pero con ideas y objetivos claros para llegar al resultado final. ¿Tiene alguna forma mágica? ¿Por donde pasan sus mayores virtudes? Un repaso de los torneos ganados y las formas por sobre todas las cosas.
Autor:José Fiebig (especial para www.pickandroll.com.ar)
Llegar al resultado, obtener los objetivos, generalmente son virtudes de un gran trabajo a largo plazo. Bahía Basket mostró los argumentos necesarios para llegar a lo pretendido. Sin dudas que no es algo que se consiga de un día al otro. Es un trabajo de constancia, priorizar lo que se pretende, y que las diferentes partes estén de acuerdo. Por un lado los dirigentes, por otro lado el cuerpo técnico, y como último escalafón los jugadores que lo desplegarán dentro de la cancha. Cuando esos factores están de acuerdo, y todo se cumple y se potencia, generalmente los resultados aparecen. A continuación el repaso de año a año de la evolución justamente para generar que las cosas a la larga den en la tecla.
Desde la aparición como franquicia, Bahía Basket impuso reglas claras. Impulsar a sus nuevos proyectos, generar valores de la ciudad, y potenciar los que llegaban de afuera. De a poco, de la mano de Pepe Sánchez y toda la cúpula, fue avanzando en materializar sus ideas. Por diferentes caminos aparecieron Fjellerup, Vaulet, y algo más atrás Redivo y Whelan. A eso sumarle jugadores del medio local casi inadvertidos como Filippa y Ramos. La presencia de la Liga de Desarrollo, fue el primer fundamento para hacer crecer a quien hoy deslumbran en la Liga Nacional ¿No es caso ese el resultado final? Potenciar jugadores para que luego tomen un lugar de preponderancia en nuestra Liga. No todos lo consiguen, pero en Bahía es una prioridad que se viene cumpliendo a raja tabla.
Las cosas estaban bien entendidas. De la mano de Mauro Polla, a quien se le confió la chance de ser entrenador del equipo, todo se fue llevando a cabo. Con el ADN de parte de la dirigencia, y el dibujo que bajaba desde la Liga Nacional, los resultados en juego fueron apareciendo. La defensa, intensidad, juego en conjunto, formar, mostrar jugadores y darle calidad merced a todo lo diseñado en la previa. Bahía de buenas a primeras se convirtió en el equipo sensación. Whelan - Redivo - Vaulet fue la columna vertebral que revolucionó de repente el mundo del torneo. Si bien la primera edición tuvo muchas dudas en su formato, y lo que pretendían los clubes, Bahía pudo proyectar y ganar al mismo tiempo. Un equipo que se potenció con su manera de jugar, con sus jugadores y la idea que fue inyectada y entendida. Lanus fue quien le colocó mayor oposición por tener una idea muy parecida. La final no dejó dudas de lo que sucedería luego. Una aplastante victoria para coronarse en la primera edición. La pregunta es ¿Que sucedió con esa columna vertebral? Hoy es el primer eslabón en la Liga Nacional. En conclusión, primer objetivo cumplido.
El resumen del primer campeonato de Bahía en la LDD
Redivo y Vaulet son de los jugadores más determinantes del equipo. Si bien hoy Whelan no es más parte, fue otro de los factores que fue ganando su lugar hasta ser el conductor titular en Liga. Los tres perimetrales se despidieron de la Liga de Desarrollo. Para ellos fue objetivo cumplido. Ahora les tocó a otros actores la posibilidad de mostrarse. Una cierta base se mantuvo, donde Fernández, Thygesen Nicolás y Joaquín Sanchez, más Filippa y Ramos continuaron. Se agregaron Corvalan, Vaulet y un potenciado Fjellerup. El camino a recorrer fue el mismo, y ya con otra mirada respecto del resto. ¿Los objetivos? Similares. Potenciar sus jugadores, competir, entrenar, constancia y profesionalidad. Superarse en defensa e intensidad. Los resultados sin dudas llegarán si se cumplen esas bases. Bahía volvió a ser candidato y el centro de atención del torneo. Una segunda edición mejorada, con elencos que tuvieron otra predisposición y calidad en sus elencos. Bahía se fue potenciando por el torneo, y sus players otra vez estuvieron por encima de lo esperado.
Dentro del esquema y los sobresalientes, Vaulet y Fjellerup fueron los esenciales. El resto acompañó, la defensa e intensidad no se negocio en ningún momento. Todos lo entendieron a la perfección y el camino fue prácticamente de rosas. Lanus otra vez fue la piedra en el zapato. Un elenco con una idea acorde a Bahia e intentando ponerse dificultades. De a poco la nueva camada empezó a mechar minutos en Liga. Por ende, no solo se potenciaban jugando y mostrando sus virtudes en Desarrollo, sino también en Liga Nacional. Dominó el Final Four, y empezó a tener una experiencia formidable en los instantes claves. La final fue sumamente diferente, y necesitó de jugadores maduros y con buen nivel para deshacerse de un mejorado Lanus. En conclusión, otro campeonato y con mayores objetivos cumplidos. Fjellerup MVP y despedida de la Liga de Desarrollo. Otro eslabón que hoy es significativo en la Liga Nacional.
Lo que dejó la gran final ante Lanus en la segunda edición de la LDD
¿Algún cambio para la tercera edición? En lo absoluto. Polla con su libro en mano, variando sus jugadores, pero con el objetivos en primera plana. Sustentar la idea, lo que se pretende desde Bahía Basket y redoblar la apuesta a la hora de jugar y engrandecer sus dirigidos. No es menor pensar que los mismos que entran a la cancha en la Liga de Desarrollo, entrenan a la par que los mayores y tienen minutos en Liga Nacional. Esa experiencia y calidad que cada uno consigue, es determinante para conseguir los resultados finales. Tanto personales como colectivos. Algunos necesitaron mantenerse una temporada más para que su desarrollo sea completo. Son los casos de Ramos, Filippa, Fernández y Corvalan. A ellos se sumaron muchos chicos nuevos para formar y desarrollar. Una gran virtud fue que cada uno entendió a la perfección lo que buscaba Bahía para su desarrollo y como funcionar dentro de la estructura ya constituida. Fue una temporada diferente debido al resto. La competencia se fue mostrando más dura, mas equilibrada, y todo eso jugó en favor del bahiense. Potenció más su juego, sus ideas, sus jugadores y a la larga lo benefició. En conclusión, nuevo torneo, Corvalan como MVP, despedida del torneo y completarse para la Liga.
El resultado le volvió a dar la razón al desarrollo y la idea inicial. Un Final Four sumamente exigente, de mucha calidad y que le sirvió a todos para potenciarse. Bahia con argumentos de sobra, y la rotación mas larga y sólida del torneo otra vez pudo hacer la diferencia. La banca por momentos mejor que los iniciales, la defensa como bandera, la intensidad a todo motor, y la calidad ofensiva a flor de piel. ¿Parece todo muy fácil no? Nada de eso. Fortalezas que se construyen con el tiempo, y con diferentes factores que contribuyan a la misma. Todo debe estar comunicado. Desde el primer escalafón hasta el último. Todo lleva su tiempo, pero mientras se entienda que el desarrollo de los jugadores está por encima de los resultados, todo funcionará. ¿Todos queremos ganar? Si. ¿Todos pensamos algún día en levantar una Copa? Si. ¿Nos gusta ser protagonistas y liderar? Si. El tema es el como hacerlo, como llegar a todo eso. El camino a recorrer. Bahía Basket confirmó su éxito en cada temporada, todo desde el desarrollo...
Lo mejor de la tremenda definición ante Ferro en el Etchart
Enviado especial a Caballito, José Fiebig
@Josefiebig
»GD20/05/2017 15:25
El primer equipo de Bahia era impresionante, no por nada arrazo ese primer torneo. Era una seleccion.
Es increible también que todas las finales hasta aca fueron entre Bahia y algún equipo en el que estuvo Gramajo. Dato no menor, tiene mucho talento.
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»Julian20/05/2017 16:24
Aburre la lamida a Pepe. Hay otros 19 equipos, no importa el campeón.
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12.5 %
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»Carlos de Capital20/05/2017 22:02
No es lamida es RECONOCER a quien hizo bien las cosas. Lo tuyo es el rencor envidioso clásico de los incapaces.-
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»kebueno21/05/2017 18:55
para mi parecer este es un torneo que no sirve......solamente juegan los equipos cuyos equipos de primera digamos....aunque muchos distan de serlos....siendo que en el país hay muchos chabones que son buenos jugadores y solo son vistos en campeonatos argentinos.y....bahía cantera....si son casi todos reclutados...no mientan
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15.4 %
84.6 %
»JG21/05/2017 23:09
La verdad que tenés razón, diganle a Manu Ginobili que es un fraude porque su club de desarrollo fue Estudiantes de Bahía y en su momento debuto en primera porque lo recluto Andino de la Rioja.
Hagamos una cosa ya que estamos: que todos los jugadores vuelvan a su club de origen y que si tienen la mala suerte de que su club no juega en la liga nacional, que no se desarrollen, asi tenemos un desarrollo aún más mediocre de nuestra selección pero eso sí todos se quedan con la conciencia tranquila.
No se para que digo esto, si siempre los mediocres encuentran alguna razón para envidiar lo que se hace medianamente bien y con seriedad.