Nadie lo frena

Cleveland llegaba con la confianza bien arriba luego de robarle la localía a los Celtics en el juego 1 y estar invictos en la postemporada. Esta noche, se jugó el segundo punto de la serie y los dirigidos por Tyron Lue no tuvieron piedad. Fue una paliza histórica, reflejada en el marcador por un contundente 130-86.

Por primera vez en la historia de los Playoffs, un equipo se va con ventaja de 41 puntos al descanso largo, en este caso, 72 a 31. Boston no encontró los caminos nunca, y los Cavs manejaron el partido a la perfección. Tarea dificil para Brad Stevens ahora. Tratar de encontrar soluciones rápidas para no ser barrido por un equipo que agarró la escoba y parece solamente enfocado en confirmar lo hecho en las finales pasadas.

LeBron tuvo un gran partido jugando tan solo 30 minutos por la enorme diferencia que hubo entre ambos conjuntos. Aportó 30 puntos, 7 asistencias, 4 robos, 4 rebotes y 3 tapones. Además, lo ayudaron las grandes tareas de Irving (23 puntos) y Kevin Love (21 puntos + 12 rebotes). Por su parte, Isaiah Thomas estuvo muy bien marcado a tal punto de que solo convirtió 2 puntos y debió ser retirado por una lesión que quizás lo margine por el resto de la serie. De igual forma su equipo ya no daba señales de vida.

Boston tan solo resistió los primeros minutos del partido, pero al final del cuarto inicial ya perdía por 14 puntos.

Los Celtics tendrán que reponerse rápido, aunque parece una tarea difícil. Ahora va como visitante y tendrá que robar un juego en esa condición para no quedar eliminado en una temporada que lo tuvo como número 1 del Este, pero está demostrando que todavía le falta bastante para competir de igual a igual ante el último campeón.

Esta victoria también permitió anotar otra marca en la historia de este deporte: los Cavs se anotaron 13 triunfos consecutivos en la fase de playoff, cantidad que solo habían conseguido Los Lakers de Los Ángeles, en 1989.

Flavio Ariel Ibarra