Los crepusculares no dejaron pasar la primera oportunidad de celebrar el título ante la afición del Domo Bolivariano y se impusieron a Marinos de Anzoátegui en el sexto partido por 100-72 y consiguieron la primera LPB de su historia, añadiendo un nuevo trofeo a un año y medio de auténtico éxito.
Autor:Daniel Mérida (@baloncestero)
Los crepusculares no dejaron pasar la primera oportunidad de celebrar el título ante la afición del Domo Bolivariano y se impusieron a Marinos de Anzoátegui en el sexto partido por 100-72 y consiguieron la primera LPB de su historia, añadiendo un nuevo trofeo a un año y medio de auténtico éxito.
Guillermo Vecchio completó la revolución realizada en el equipo de Barquisimeto y los larenses concluyen la temporada con un balance de 22-5 desde su llegada, como muestra del cambio de imagen y la mejora desde que el entrenador argentino aterrizase en el banquillo crepuscular.
El Acorazado Oriental empezó fuerte el encuentro y tomaba las primeras ventajas con los triples de Isaiah Swann y el "Chamo" Pérez. Un tiempo muerto de Vecchio hizo reaccionar a los suyos y se pusieorn por delante con un parcial de 10-0, pero los visitantes tuvieron un último minuto de mucho acierto ofensivo y se quedaron el primer cuarto por 21-23.
El equipo presidido por Jorge Hernández vivió su gran momento en el segundo cuarto, donde barrió a su rival con un parcial de 33-18, fruto del acierto en los triples y las numerosas pérdidas de Marinos (hasta siete en los primeros veinte minutos). Guaros cerró la primera parte arriba por 54-41 y consiguió una ventaja que supo mantener durante la segunda parte.
El golpe final llegó tras el descanso donde Guaros se mantuvo firme y Marinos no consiguió recortar la ventaja mostrándose impreciso por momentos. El marcador de 75-57 para entrar en los últimos diez minutos daría paso a un último cuarto de puro trámite y los campeones se dieron el lujo de poner en cancha a José Martínez y los jóvenes Yohanner Sifontes y Amos Acosta y llevarse el parcial final para alegría de la afición que abarrotó el Domo Bolivariano.
Zach Graham fue el máximo anotador del encuentro, con 18 puntos, 2 rebotes y 4/7 en triples saliendo desde el banquillo local, mientras que Nate Robinson sumó 17 puntos, 8 asistencias y 2/4 en triples, Luis Bethelmy sumó 15 puntos sin fallo y Gregory Echenique y Néstor Colmenares volvieron a ser importantes en la pintura con 8 puntos y 10 rebotes. Nate Robinson fue nombrado el MVP de la serie final, al promediar 15 puntos, 2.6 asistencias y 2.3 rebotes en estos seis partidos.
Por el Acorazado Oriental, Jesús Centeno fue el mejor con 15 puntos, 4 rebotes y 4/7 en triples, seguido de los 11 puntos, 2 rebotes y 3/6 en triples del "Chamo" Pérez y los 8 puntos que sumaron Juan Herrera, Leon Rodgers y Michael Carrera.
Guaros de Lara levanta su primer título de la LPB en lo que fue su cuarta final, tras las perdidas en 2005 y 2015 ante Marinos y en 2006 ante Trotamundos. En sus 14 años de vida y 5 bajo la propiedad de Jorge Hernández, los barquisimetanos acumulan cuatro títulos en sus vitrinas, sumando esta LPB a los recientes dos títulos de Liga de las Américas y el conseguido en la Copa Intercontinental a inicios de temporada.