El emblemático escenario de Libertad de Sunchales es sede otra vez de un certamen de relieve. La organización del Súper 4 de la Liga Argentina, a cargo de la Asociación de Clubes y supervisada al detalle por Andrés Pelussi, manager del anfitrión, redunda en un evento de calidad.
Autor:Martín Pellegrinet (@SoyElPelle)
Libertad es un club centenario, fundado en 1910, y que llegó a la máxima categoría del básquetbol argentino hace dos décadas. Tuvo su apogeo deportivo hace casi diez años, cuando se alzó con su campeonato de Liga. La realidad económica actual le reconfiguró los objetivos para el desarrollo de deportes y estructuras profesionales, lo que obligó a bajar el perfil, fundamentalmente en basquet y en fútbol. Por esto, la entidad “aurinegra” migró desde la Liga Nacional hacia la Liga Argentina, ex TNA. En su vuelta al ascenso, los santafesinos consiguieron forjar un equipo que, más temprano que tarde, tomó forma de tal y los resultados no tardaron en aparecer.
Tras haber ganado la licitación para organizar el Súper 4, el club de Sunchales puso a disposición de los equipos técnicos y profesionales de la Liga lo necesario para la promoción y difusión. Este certamen es una de las novedosas apuestas que se hacen desde la Asociación de Clubes en pos de otorgarle mayor jerarquía a la segunda división de básquetbol profesional, y otorgará al ganador la chance de disputar a un partido ante el campeón de la temporada de la Liga Argentina, una plaza para entrar a la Liga Sudamericana. Nada menos.
Desde la AdC se instalaron en el lugar con anterioridad para tomar posesión y posición. Así, el gerente de Marketing y Patrocinios Juan Diego García Squetino, y el director de Comunicación Rodrigo García Squetino, llegaron a Sunchales con sus equipos de trabajo y promovieron con diversas actividades el evento.
Los jugadores de Libertad compartieron la iniciativa y acompañaron. Lo saliente de esto es que se pone de relevancia a la Liga Argentina con estándares de nivel de Liga Nacional, y se la intenta posicionar como competencia.
A primer turno en la jornada inaugural se vieron las caras Villa San Martín de Resistencia frente a Deportivo Viedma.
Cada equipo estuvo acompañado por sendos grupos de hinchas que no dudaron en recorrer los largos caminos para llegarse hasta Sunchales. La vasta geografía Argentina indica que desde la capital del Chaco hasta esta ciudad la distancia es de 570 kilómetros, mientras que desde la capital de Río Negro hasta aquí, hay 1300. Casi nada. El basquet, otra vez, puntal del federalismo.
Con banderas, globos e inflables, ambas parcialidades le dieron color a un partido que fue disputado hasta la última bola. Los chaqueños se acordaron en varias oportunidades de su clásico, Hindú.
A raíz de un paro por parte de los trabajadores del canal DeporTV el evento no pudo ser televisado por la mencionada señal. Rápidos de reflejos, desde la organización montaron una transmisión vía streaming a cargo de los periodistas Carlos Altamirano y Matías Traversa manteniendo los niveles técnicos para lograr una emisión acorde a la circunstancia.
Una fuerte tormenta de lluvia -y hasta granizo- sacudió a la ciudad la noche previa al comienzo del torneo, por lo que para el sábado las temperaturas no fueron tan altas como acostumbran por aquí en esta época del año. A la hora del comienzo del juego inagurual, el termómetro marcaba 29 grados, mientras que para el segundo, señalaba 24.
El Hogar de los Tigres, que ha ganado en infraestructura con el correr de los años, posee equipos de aire acondicionado establecidos en lo alto sobre los cuatro lados del estadio. También hay gran cantidad de ventiladores. Todo esto en funcionamiento hizo que el clima dentro de la cancha para el desarrollo de los juegos fuera más que ameno.
También se llegaron hasta aquí los hinchas “calamares” de Platense, con camisetas y banderas. Hubo una que llamó particularmente la atención ya que en verdad era del Saint Pauli alemán, un equipo de fútbol de una ciudad portuaria con quienes los de Vicente López comparten colores.
Para la hora del comienzo del segundo juego, el marco era muy bueno. Desde el club local confiaron que habían logrado vender mil trescientas entradas, que sumadas a las entregadas por protocolo y a los niños de la colonia de vacaciones, daba un aforo aproximado de dos mil personas.
Para el partido final, donde Libertad puede coronarse campeón, el anhelo es, de mínima, repetirlo.
A Sunchales llegaron para acompañar el desarrollo del certamen los directivos de la Asociación de Clubes Sergio Guerrero, director Deportivo, y Patricio “Pato” López, quien es el referente de la Liga Argentina. Ellos se sumaron al tesorero de la entidad Andrés Pelussi, quien además como anfitrión estuvo hasta en el último de los detalles.
También dieron el presente algunos agentes de jugadores, como Ángel Cerisola y Juan “Pipa” Gutiérrez. Por su parte, el ex jugador de Libertad Jorge “Chino” Benítez, llegó desde temprano a la cancha para no perderse detalle.
A Sunchales, los Reyes Magos llegaron en el etretiempo del segundo partido. Una excelente iniciativa por parte del club local hizo que todos los niños y niñas que concurren a la colonia de vacaciones pudieran ver el partido y, una vez finalizado el segundo cuarto, entren a la cancha junto a Melchor, Gaspar y Baltasar para entregar regalos a los hinchas apostados sobre los laterales del escenario de juego. Una vez que terminaron, además de llevarse el reconocimiento, todos juntos se fotografiaron dentro de la cancha junto a los Reyes Magos para inmortalizar el momento.