Perdidos en Olavarría

A la selección le costó hacer pie hasta que de la mano de Brussino, después de dos minutos de juego, pudo anotar. El movimiento de balón era escaso y los tiros incómodos pero la defensa hizo su trabajo. La contención de Delia a Batista (con la ayuda en el poste bajo) fue muy buena. Argentina endureció el rebote en defensa y en ataque rápido encontró dos veces a Redivo abierto que anote sus tiros largos (7-2).

Estas primeras conversiones tranquilizaron al equipo, para que se dispare en el marcardor, primero 11-2 y luego 13-6 con volcadón de Brussino obligando al entrenador Marcelo Signorelli a pedir minuto.

La rotación llegó con Fjellerup por Redivo quien se sentó a descansar con un redondo 3/3 en de cancha (18-8). La idea de la selección uruguaya fue profundizar con sus internos, con Batista en el estacionado, con Calfani en movimiento y con Vázquez yendo a buscar los espacios del rebote ofensivo. Lo poco que logró fue emparejar el juego en el gol, pero nunca se hizo estable.

La diferencia se estableció en diez hasta el 27-16 del cierre del primer cuarto gentileza de una falta sobre la chicharra de Vidal a Laprovíttola. A la Argentina le salían todas y por el contrario Uruguay estaba con el freno de mano puesto.

El segundo cuarto empezó impreciso y desprolijo en ambos lados. Y en dicho caso, ganancia de la visita. Porque logró atar el juego ofensivo de su rival y el partido se puso en la velocidad que a Uruguay le convenía.

El ingreso de Vidal y Barrera le hicieron muy bien al equipo charrúa (30-20) y el técnico argentino ya olfateaba que la mano había cambiado a pesar de la distancia, por eso paró el partido con un minuto. Después del tiempo muerto del entrenador, entró Franco Balbi pero llegaron un rebote ofensivo con gol de Calfani, dos pelotas perdidas y más dudas.

Argentina jugó por 5 minutos como si tuviera una prohibición de pisar el la zona pintada rival. Todos tiros de 5 o más metros y básicamente con nulo porcentaje. Salvo por Lucio Redivo cuya dos acciones individuales le dieron 5 puntos de oro a la selección para aguantar la embestida charrúa (35-30). Hernández se vio obligado a hacer regresar a Luis Scola para tratar de generar algo en ofensiva desde el poste bajo.

Y desde allí Argentina jugó más ordenado y sereno, también con el regreso de Delia, si bien no tuvo tanto gol al menos emparejó el juego. Pero Uruguay había levantado su moral y entraron los tripes de Barrera y Gonzalo Iglesias para dejar el juego solo a dos (35-33). Batista erró dos libres para empatar y Argentina lo cerró mejor para llevarse el primer tiempo por seis: 42:36.

En el comienzo del segundo tiempo, Uruguay usó perfecto el viejo cuento de adentro y afuera y ante el paso atrás de la defensa nacional encontró dos triples bien parado de Parodi y Fittipaldo para empatar en 42.

El entrenador Argentino ya tenía demasiados problemas como para no meterlo a Gabriel Deck que entrenó diferenciado en la semana por dolor y estaba mermado físicamente, pero tuvo que entrar igual.

Fittipaldo calentó la mano y un doble con falta más dos triples suyos le dieron la delantera a Uruguay 46-53 con parcial 4-17. El oveja resolvió cambiar todo con una formación más alta y puso a Brussino de escolta, Deck de alero con Mainoldi y Scola en el poste bajo. Uruguay respondió con tres bases en cancha: Barrera, Parodi y Fittipaldo

La rotación uruguaya no tardó en llegar, por el calor y el desgaste y Calfani tuvo que salir con su equipo ganando 51-56. Oveja Hernández por el contrario, bajó los centímetros con Redivo por Mainoldi y Scola de pivote. Luego entró Vaulet para perseguir a Barrera.

El técnico uruguayo siguió apostando al tridente bajo con Vidal, Fittipaldo y Parodi en la media cancha con mucha movilidad y gol (58-61). La selección tuvo claro en el momento del fdisfrute había pasado y el partido lo tenía que luchar. Dejando la piel en defensa y una bomba de Redivo le dio la mínima con que cerró el tercer cuarto: 62-61. El parcial volvió a favorecerle a la visita, esta vez 20-25.

El comienzo del último cuarto fue a puro Luis Scola que le dio un respiro a la selección en ataque (66-61) y mejor que eso encendió al público de Olavarría que atronó el estadio con su aliento.

De un lado Scola-Deck, del otro la conexión Base-Batista (68-65). El partido ganó en intensidad y se hizo maravilloso. Después del minuto del técnico visitante, un triple de Gonzalo Iglesias y un robo con gol de Pepo Vidal sobre Laprovíttola le dio ventaja de dos a Uruguay (68-70).

La selección nacional reaccionó con los cambios y una andanada perfecta de doble de Scola, triple de Brussino y volcada de Delia con asistencia de Balbi (75-70).

Pero Uruguay, voluntarioso y corajudo, respondió con una secuencia igual de fantástica: volcada de Batista con falta incluida, triple de Fittipaldo, y doble de Batista (75-78), ante una Argentina que no tenía gol en el poste bajo y chocó en casi todas las acciones más que encontrar tiros cómodos. Para ingresar al minuto y cuarenta segundos finales.

Después del minto, llegó una jugada con tres rebotes ofensivos para la Argentina que le permitió meter dos libres a Brussino pero la contra de Uruguay fue un escopetazo de Barrera (77-71) a falta de 59 segundos.

El triple lanzado por Scola quedó largo y Brussino cayó encima de Barrera en el rebote sacando por contusión al base de la cancha (que se retiró en ambulancia con protección de cuello ortopédico y máscara de oxígeno). Fittipaldo cobró una falta con dos libres (77-83) a falta de 34 segundos. Y “Oveja” Hernández diagramó el cierre con un minuto.

En la reposición Balbi encontró un hueco preciso para Deck en el poste bajo que arrugó la defensa y abrió para que Brussino pudiera meter el triple para dejar las cosas 80-83. Pero Fittipaldo respondió bien con dos libres (80-85). Scola apuró las acciones con un triple (83-85) a falta de 13 segundos.

De todos modos Uruguay le puso un moño preciso al partidazo que jugó. En la reposición final, argentina levantó su defensa y casi le hace cometer campo atrás a su rival. Pararon con falta a Batista y Scola se fue de protesta (reclamando justamente el campo atrás) contra los árbitros ganándose un técnico. Batista metió uno de dos, Fittipaldo el libre adicional (83-88) y en la siguiente reposición Scola paró con falta a Batista que erró los dos, pero ya sin tiempo, Argentina no tuvo tiempo de nada.

Uruguay se llevó una victoria de oro de la Argentina jugando mejor que su rival, aprovechando mejor sus armas y teniendo gol en diferentes manos. Argentina cerró sin su base titular el partido, mostrando que si algo faltó fue el rumbo por dónde ir, carencia de todo el equipo, y que lo terminó pagando con una derrota dolorosa.

Sintesis:

Argentina (83): Nicolás Laprovíttola 11, Lucio Redivo 18, Nicolas Brussino 23, Luis Scola 23 y Marcos Delia 4 (FI) Máximo Fjellerup 0, Franco Balbi 0, Leonardo Mainoldi 2, Javier Saiz 0, Juan Pablo Vaulet 0 y Gabriel Deck 2. DT Sergio Hernández

Uruguay (88): Luacino Parodi 8, Bruno Fittipaldo 25, Sebastián Vazquez 2, Mathías Calfani 8 y Esteban Batista 17 (FI) Santiago Vidal 5, Gustavo Barrera 10, Gonzalo Iglesias 6, Juan Ducasse 0, Hatila Passos 7. DT Marcelo Signorelli

Parciales: 27-16, 42-36, 62-61
Árbitros: ghillerme Locatelli (BRA), Krishna Dominguez (MEX) y Fabiano Huber (BRA).
Estadio: Maxi Gimnasio del Parque Carlos Guerrero – Olavarría.