Borrón y cuenta nueva

La derrota con Uruguay ya es pasado y lo mejor que puede pasarle a la selección es tener en apenas 72 horas la chance de poder salir a corregir errores y tomar nuevamente un sendero positivo. Los puntos en juego son muy importantes y es un partido que suma como visitante.

Si bien Paraguay es el rival más débil del grupo y Argentina ya le ganó en el debut en Superdomo de La Rioja 96-63 son puntos que no puede perder en el camino. La obligación de ganar para esta noche es absoluta. Jugar en Olavarría será otra ayuda, ya que será de local, porque Paraguay aún no tiene listo su escenario para jugar en casa y cede la localía. La selección no tuvo que viajar, pudo entrenar, limpiar la cabeza y focalizarse en lo que sigue.

Lo más esperable para hoy es que la selección salga muy concentrada en tratar de ejecutar al 100% el plan trazado, para imponer primero su ritmo y luego maniatar al rival, no sufrir desde el principio ni dejarle a Paraguay la posibilidad de especular con el resultado. La paridad juega a favor de la visita.

Para esta noche no estará Gabriel Deck. El primer parte médico que dio el cuerpo técnico de la selección sobre “Tortuga” fue: “evoluciona favorablemente de su tobillo izquierdo, pero ahora refiere dolor por un golpe en la pierna derecha”.

Horas después, tras haberle realizado estudios en profundidad el parte médico sostuvo: “Deck presenta un cuadro secuelar por un esguince de tobillo izquierdo, sumado a una molestia en gemelo contralateral. Se decide preservarlo en el partido contra Paraguay para respetar los tiempos de recuperación. En estos momentos está retornando a Capital”.

Por lo tanto sin un jugador clave, que jugó como pudo ante Uruguay en el segundo tiempo, la selección tiene que ponerle proa a sus ilusiones de mejoría. Material y deseos sobran.

Las palabras del capitán Luis Scola siempre son oportunas y lejos de tratar de quedar bien o acercar posturas realiza un diagnóstico preciso de la situación: “Nos hubiera gustado ganar, pero la verdad es que no estamos jugando bien y cuando eso sucede pasa esto. Ganar a veces oculta los problemas, tal vez que Uruguay haya expuesto nuestros problemas nos puede llegar a venir bien como una reacción”, soltó el porteño.

El capitán profundizó sobre los déficits del combinado nacional y sostuvo: “Me inquieta la falta de claridad para jugar, la difícil que se nos hace todo, tanto anotar como nos complican con poco en defensa. Los equipos que juegan bien son los que generan cosas fácilmente y a nosotros nos está costado todo, son cuestiones que hay que solucionar”.

A la hora de referirse al compromiso con Paraguay, y la comparativa del antecedente inmediato con victoria 96-63 en La Rioja, Luis manifestó: “A priori es inferior a Uruguay, pero hoy está jugando mejor que el partido en el Superdomo y nosotros un poco peor. Puede ser una ventaja o desventaja enfrentar ahora a Paraguay, porque si llegamos al vestuario en paridad estaremos en un momento horrible y ellos crecidos. Prefería que los partidos hubiesen sido al revés, porque si ahora ganamos por treinta era lo que tenía que pasar y no nos va a quitar la sensación de haber jugado mal contra Uruguay. Así como si perdemos se va a acrecentar esa sensación”.

Por su parte, Paraguay viene de perder en Panamá ante el local 82-62 en un partido que se resolvió recién en el último cuarto (30-13). El equipo guaraní entró abajo solo por tres puntos al último segmento. Paraguay estuvo liderado por el doble-doble de Guillermo Araujo con 17 puntos y 10 rebotes, pero lanzó un bajo 5/17 en triples (29%) y tuvo 18 pérdidas que conspiraron contras sus chances de ganar.

El conjunto que dirige el entrenador argentino Luis Oroño perdió sus tres presentaciones (vs Argentina 96-63, vs Uruguay 67-49 y vs Panamá 82-62) con un bajísimo promedio ofensivo de 58.0 puntos (los tres partidos los jugó de visitante, al igual que hoy) mientras que le convierten 81.6 pts por juego.

Pablo Tosal
@pablotosal