En el arranque de la semifinal del Oeste entre Houston y Utah, los Rockets se impusieron por 110-96 con 41 puntos de James Harden. Los Jazz acusaron el cansancio acumulado tras su disputada serie ante Oklahoma City y la baja de Ricky Rubio, cuyo retorno tras sufrir una lesión muscular se mantiene como incierto.
Autor:Flavio Ibarra (@Flaviorocambole en Twitter )
En el arranque de la semifinal del Oeste entre Houston y Utah, los Rockets se impusieron por 110-96 con 41 puntos de James Harden.
Los Rockets anotaron el 53% de sus triples y mantuvieron su habitual eficacia cara el paro para dominar desde el principio con rentas que en el primer cuarto ya eran de 13 puntos. En la segunda mitad, con el partido controlado y diferencias tranquilizadoras, los texanos experimentaron fases de relajación que permitieron a Utah recortar hasta once. Un triple frontal de Harden a 8 minutos del final neutralizó ese empuje visitante para sellar la victoria de su equipo.
Chris Paul, con 17 puntos y 6 asistencias, secundó a Harden en el equipo local mientras que el más destacado en el conjunto que preparar Quin Snyder fue el novato Donovan Mitchell, con 21 puntos. Mitchell se retiró antes de concluir el partido con ligeras molestias que no se cree que tengan graves consecuencias.
Los Jazz, que jugaron sin el base español Ricky Rubio, baja por una lesión en el tendón de la corva de la pierna izquierda, no tuvieron nunca respuesta a la inspiración encestadora de los Rockets, que además se aprovecharon de su mayor descanso y mayor poder físico al no haber jugado desde el pasado miércoles cuando eliminaron a los Timberwolves de Minnesota.
La ausencia de Rubio dejó a los Jazz sin una aportación importante tanto en la dirección del juego como de unos promedios de 14 puntos, 7,3 rebotes y siete asistencias que había logrado el jugador de El Masnou en la primera ronda.
Además que los Jazz tuvieron que jugar el viernes el sexto partido ante los Thunder de Oklahoma City y prácticamente, con las horas de vuelo desde Utah, no tuvieron apenas tiempo para descansar y recuperarse del esfuerzo realizado.
La victoria fue la cuarta consecutiva que los Rockets conseguían en los playoffs por 10 o más puntos de diferencia y la quinta seguida ante los Jazz con promedio de 16,8 de diferencia en el marcador final.
Como equipo los Rockets lograron un 45 (37-82) por ciento de acierto en los tiros de campo y el 53 (17-32) en los triples, comparados al 50 (38-76) y 32 (7-22), respectivamente, de los Jazz, que perdieron la batalla dentro de la pintura con 37 rebotes por 43 para la franquicia de Houston.
Aunque los Jazz lucharon con sus titulares hasta cuando quedaban dos minutos por jugarse, cuando el entrenador Quinn Snyder, dio ya por perdido el partido, al final nunca pudieron recuperarse del abismo en el que se metieron al concluir la primera parte.
La ausencia de Rubio se notó demasiado a la hora de mover el balón y las 18 pérdidas que tuvieron los Jazz, por 14 de los Rockets, tampoco les ayudó.
Rubio informó previo al juego: "No creo que pueda estar para el segundo partido y luego ya veremos. Aunque tenga que forzar mi presencia en el campo, mi deseo es salir y ayudar al equipo".
Mientras el escolta Donovan Mitchell con 21 puntos, los mismos que tuvo el alero reserva Jae Crowder, fueron los dos mejores encestadores de los Jazz, que también tuvieron el apoyo del alero australiano Joe Ingles al conseguir 15 tantos.
El pívot francés Rudyt Gobert llegó a los 11 tantos, capturó nueve rebotes -el mejor del equipo en esa faceta del juego-, dio una asistencia y recuperó un balón.
El base brasileño Raul Neto, que tuvo ocho minutos de acción como reserva de los Jazz, destacó al conseguir cuatro puntos después de los dos tiros que hizo a canasta, capturó un rebote y cometió una falta personal.
El segundo partido se jugará el próximo miércoles, en el mismo escenario del Toyota Center, de Houston, donde los Rockets saldrán con la ventaja de 1-0.