Canadá mostró sus credenciales

El arranque fue vertiginoso y a mucha velocidad. Montenegro apostando al contraataque, aunque con variantes desde el perímetro, y encontrando espacios para lanzar con comodidad. Canadá con mucha fiereza física, y cargando bien al rebote ofensivo. El partido fue sumamente parejo, aunque Montenegro tuvo buen juego elaborado, y levantó al público con una enorme volcada en contragolpe (9 – 5 en medio cuarto). A pesar de eso, Canadá insistió yendo fuerte al aro, se conectó con su juego interno, y le trajo problemas al elenco europeo.

El conjunto canadiense elevó su defensa, presionó 2-1-2, y Montenegro bajó su calidad de juego, y tuvo pérdidas de balón (5). Un parcial de 8 – 1 para tomar las riendas 13 – 10 del marcador. Marinovic y Tomasevic sirvieron como opción, Montenegro volvió a profundizar sus ofensivas, y trató de controlar la potencia física de Canadá. Pudo pasar al frente, aunque fue poco claro, Canadá respondió con mucha agresividad defensiva para igualar en el cierre. El partido fue friccionado, con mucha energía, y finalmente 15 – 15 en el global.

Canadá fue agresivo y contundente en el arranque. Patterson tomó las riendas, el equipo fue hacia adelante, y tuvo claridad para llegar al aro. Montenegro con problemas en los cristales, sufriendo adelante, bloqueado ofensivamente, no pudo pasar la bola y encima cedió ante la defensa alta de Canadá. Un parcial de 8-0 para adelantarse en un abrir y cerrar de ojos 23 – 15. Montenegro se recuperó, defendió cerrado, aunque el costó mucho anotar en continuidad.

Canadá muy firme en defensa, físicamente sacando diferencias, y encima Hemmings sacó un bombazo para escaparse nuevamente 29 – 20 en casi cuatro minutos. Montenegro exigió demasiado sus ofensivas, Canadá ajustó muy bien cuando el rival fue hacia el aro. El elenco europeo sin gol externo (2-10t3), sumado al goleo repartido, y el movimiento veloz de balón del canadiense. Patterson y Hemmings como líderes absolutos (18 pts entre ambos), y pudieron descifrar al defensa rival para cerrar 38 – 29 finalmente.

El partido mantuvo su agresividad y buen andar. Montenegro con decisión para atacar el aro, en velocidad poder pasar la bola, y tratar de generar su espacio para lanzar. Canadá no perdió el foco, fue incisivo cerca del cristal, donde Bediako hizo valer sus centímetros. Montenegro abusó del tiro externo, el costó entrar a la defensa en bloque del rival, y atrás padeció sus errores. Canadá estiró a 44 – 36 las acciones en casi cuatro minutos, con paciencia y velocidad para poder seguir al frente. Montenegro mantuvo su vértigo, trató de resurgir en defensa, tuvo un par de recuperos, cortó línea de pase, pero siguió con muchos vaivenes adelante.

Canadá no dio respiro, Patterson volcó una pelota impresionante a una mano, y el partido continuó para los canadienses. Vlahovic le dio un respiro a Montenegro, pero dentro de un marco desfavorable, de pocas ideas y mal lanzamiento externo. Moncrieffe fue letal en Canadá, lanzó bien, mostró versatilidad de movimientos junto a Rathan Mayes. Montenegro sin variantes, y con un final para olvidar. Canadá inteligente en su juego, y con la bola de cierre. Los grandes llevaron mucha atención, la rotación fue buena y Sakota clavó un bombazo para quedar 58 – 49.

Canadá tuvo un arranque demoledor. Aceleró en ofensiva, mostró muchos recursos de juego, y defensivamente fue un muro. Montenegro continuó con números muy bajos, no supo como buscar el aro rival, y Canadá cada error lo cambió por gol. Rathan Mayes con un bombazo, Patterson un todo terreno, y el gigante Mnott en la pintura como poste. Un parcial de 9 – 0 en solo 3m30s para tocar un techo de 20 unidades (69 – 59). Montenegro pasó poco la bola, no supo como salir de la presión extensa en zona, y padeció cada minuto. Canadá pudo recuperar, salir en velocidad, y con mucha elasticidad de juego elevar aún más la brecha.

Montenegro trató de dosificar el resultado, apostó al tiro externo, pero con poca fortuna. Un buen ingreso de Mc Neilly (8 pts, 2-2t3) dejó a Canadá con el total control de las acciones. El equipo estuvo muy concentrado, no dejó dudas, tuvo confianza con sus lanzamientos, donde su defensa agresiva fue determinante. Tocó un techo casi impensado de +25 (85 – 60) con tres minutos por jugar, e inclinó la balanza. Montenegro con excesivos desniveles en ambos costados, Canadá muy firme, y redondeando un final con todas las luces.

José Fiebig

@Josefiebig