Como en su momento Pau Gasol, Arvydas Sabonis o Peja Stojakovic deslumbraron en la NBA, el jugador top del momento en la liga que viene desde el Viejo Continente es el pívot serbio. En esta nota, conocé un poco más de él.
Autor:Juan Ignacio Alburquerque
En la ciudad de Denver hace ya un par de temporadas hay un nombre que suena cada vez con más fuerza: Nikola Jokic. Este gigante pívot provino de Serbia y sin mucho ruido, pero poco a poco se fue haciendo un lugar en la NBA, a tal punto de que es considerado uno de los mejores jugadores en su puesto.
Nacido hace 23 años en Sombor, una ciudad que cuenta actualmente con poco más de 50 mil habitantes, el joven hizo sus primeros pasos en el básquet en el KK Mega Bemax (ex KK Mega Vizura), equipo de Belgrado que juega la Liga Adriática. Allí permaneció tres años hasta que dio el gran salto. Sus números no fueron para nada malos y los scouts de la NBA no dudaron en ver las cualidades de Jokic eran dignas para formar parte de la liga estadounidense.
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En el año 2014, en un Draft donde el foco estaba puesto en Andrew Wiggins, Jabari Parker, Joel Embiid, Aaron Gordon, Dario Saric, entre tantos otros, el nombre de Nikola Jokic recién apareció en el puesto 41 de la segunda ronda, pero sin tener mucha prensa. Y así se mantuvo por un rato más.
En el año 2015 fue el momento en que el serbio llegó a la NBA. En su primer año con Denver, el jugador tuvo un rol suplente en la escuadra donde llegó a promediar poco más de 20 minutos por juego con 10 puntos y siete rebotes de promedio. En ese año, Denver quedó muy lejos de clasificar a Playoffs y le dijo adiós rápidamente a la temporada. Para Jokic, queda claro, fue una temporada para aclimatarse en un nuevo mundo.
En la temporada 2016-17 ya comenzó a sumar más minutos y poco a poco sus estadísticas personales mejoraron. En 73 juegos, el gigante serbio elevó a 16.7 puntos de promedio con un 57% en tiros de campo (hasta ahora su marca más alta), y su cantidad de rebotes (9.8) y asistencias (4.9) subieron considerablemente. De todas maneras, los Nuggets volvieron a quedarse afuera por muy poco de los Playoffs. De a poco, empezó a tocar la puerta grande.
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Ya en la temporada pasada, logró consolidarse en la NBA y su nombre se hizo más conocido en los alrededores de los pasillos. Ya como titular afianzado (32.6 MPP), Jokic se puso el equipo al hombro y con algunos triples-dobles en su haber ya su nombre se hizo eco en todos lados. Pero nuevamente los Denver Nuggets se quedaron afuera en el último día por tan solo un juego de diferencia. Pero Nikola ya sabía que había hecho lo necesario para asegurarse un buen contrato. Cumplió con 18.5 puntos por juego, 10.7 recobres y 6.1 asistencias.
En la presente campaña acordó una extensión de contrato con Denver por los siguientes cinco años y 146,5 millones de dólares, lo cual confirma que la franquicia apostaba en él como el líder de una camada que prometía mucho. Y hasta el momento eso se ha visto. Con una buena apertura de temporada, se logró acomodar en el primer lugar ya casi llegando a mitad de temporada ante equipos fuertes como los bicampeones Golden State Warriors y los siempre explosivos Oklahoma City Thunder.
El serbio, para no ser menos, es el jugador con mejores números a nivel personal en el equipo. Y tiene en claro como objetivo que este año no puede ser esquivo nuevamente la zona de postemporada. Denver Nuggets cuenta con un cúmulo de jugadores jóvenes y muy prometedores, donde Jokic es el más valorado. Con él, el equipo tiene fe en alcanzar (porque no) la gloria máxima.