Estados Unidos cerró su participación en China con una victoria sobre Polonia por 87 a 74 para finalizar en la séptima posición, la más baja de su historia. Donovan Mitchell se destacó con 16 puntos y 10 asistencias. El equipo europeo termina redondeando un muy buen torneo.
Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)
Al menos desde el imaginario popular, este partido quizás haya sido distinto en la consideración para los Estados Unidos y para Polonia. El séptimo puesto como premio mayor no es lo que los NBA estaban buscando en tierras asiáticas, pero han sido los laureles que supieron conseguir.
De todas formas derrotaron a Polonia por 87 a 74 para quedarse con una posición que les deja un sabor muy amargo en la boca por ser la más baja obtenida en su historia en campeonatos mundiales. En contrapartida, los polacos lucirán orgullosos su octavo lugar.
Hubo una diferencia muy notoria entre ambos equipos durante la primera mitad, que se dio en los lanzamientos de larga distancia. Estados Unidos se fue con una ventaja de 47-30 al cabo de dos cuartos disputados luego de lanzar un excelente 62% en triples, producto de 8/13, mientras que del otro lado los aros terminaría despintados tras el 1/15 polaco (7%).
No obstante, ninguno de los equipos se mostraba muy contraído en defensa. Si bien el equipo europeo no encontraba el triple, cada vez que buscó la pintura tuvo éxito. Adam Waczynski nuevamente empezaba a liderar a los de Mike Taylor con 6 puntos durante los primeros 10 minutos de acción, en los que Polonia finalizaría con un 67% en dobles.
Pero la diferencia era abultada desde el comienzo ya que del otro lado Estados unidos no aflojaba. Toda la precisión que necesitaron a lo largo del mundial había parecido en el primer cuarto; Middleton encabezaba a los de Popovich con 7 puntos para irse al primer descanso arriba 28-14.
La tónica no cambiaría durante el segundo período. El ingreso de Lopez por Turner le dio otra vía de gol más a los norteamericanos a larga distancia; El pivot de los Bucks, quien incorporó ese aspecto del juego durante la última temporada en Brooklyn, entró y clavó una bomba en la primera jugada. Estados Unidos sacaría una máxima ventaja de 38-19 con 6:10 en el reloj.
Durante el tercer cuarto se dio un cambio sustancial que tuvo que ver con la precisión polaca desde la media luna. Con cinco conversiones en seis intentos triples el equipo de Mike Taylor, si bien no puede decirse que encendió la alarme de los Estados Unidos, al menos hizo que debieran agudizar su concentración.
Con sus perimetrales filosos - 6 de Waczynski, 5 de Slaughter y 4 de Ponitka – Polonia bajó a 7 una diferencia que supo ser de 19 en el inicio del segundo cuarto. Tras un tiempo muerto pedido por Gregg Popovich, Estados Unidos encontró un bálsamo con cinco puntos al hilo desde las manos de Middleton y Mitchell. El tercer parcial finalizaría con los norteamericanos arriba 63-55.
Durante los diez minutos finales el esfuerzo mancomunado de los Estados Unidos surgió para mantenerse siempre en el liderazgo. Cada una de sus conversiones llegaron como consecuencia de una asistencia (8/8); Mitchell, White y Brown sumaron 5 puntos cada uno, al tiempo que Harris añadió otros 6 y Barnes 3.
Pese a que sus porcentajes decaerían, Polonia siempre mantuvo la tención para que Estados Unidos no volviera a edificar una diferencia tan abultada. Ponitka, que fue de mayor a menor durante el mundial, convirtió 8 puntos para cerrar su planilla con 18.
Un doble y falta de Damian Kulig dejó a su equipo a solo 7 ()63-70 con 5:34 para la finalización del partido, sin embargo eso sería lo más cera que el equipo de Taylor iba a poder acercarse.
Polonia cierra un muy buen mundial, finalizando octavo y por encima de equipos como Lituania, Italia, Grecia, Rusia o Brasil. Por su parte, en Estados Unidos las historia es bien diferénciate, y solo buscarán tomar nota de lo ocurrido para comenzar a planear sus nuevos objetivos en el futuro.