El documental The Last Dance mostró diversos trasfondos en la vida de los Bulls hasta su llegada a la cima. Uno de ellos fue la presencia de su GM Jerry Krause, quien ideó el equipo pero también quien le puso el punto final.
Autor:José Fiebig (@Josefiebig en twitter)
The Last Dance tuvo una repercusión fenomenal en sus dos primeros episodios. La vida íntima de los Chicago Bulls desde el origen del extraordinario elenco que hizo historia hasta su deceso tras el sexto anillo de campeonato. En ambos puntos lo situamos a Jerry Krause, el general Manager del equipo quien falleció en 2017 pero que quedó con el héroe y villano al mismo tiempo en dicha línea de tiempo de los Bulls de Jordan. Desde unir a todos y "crear" ese notable equipo hasta derrumbarlo con sus malas relaciones, mal carácter y prepotencia desde su lugar.
Krause no siempre tuvo ese puesto, sino que arrancó realizando scouting desde muy joven. Fue scouter oficial de los Baltimore Bullets, luego entrenador en lo que se denomina Asociación Continental de basquet, algo que realizó en los 70´ hasta el llamado del actual presidente de los Chicago Bulls, Jerry Reinsford para unirse a los Bulls como su nuevo Gerente General y una vez más trabajar en baloncesto profesional.
Sin dudas que su personalidad le dio amigos y enemigos. Fue un brillante explorador de jugadores, supo donde poner el ojo aunque tuvo errores graves que Jordan y Jackson se lo hicieron ver en diferentes momentos. Puso el ojo en dos pilares como Scottie Pippen y Horace Grant, ambos determinantes para iniciar el camino de rosas de Chicago a principios de los 90´.
Le costó escuchar consejos, prefirió escudarse en su capacidad y ojo técnico y dejar de lado lo que decía el resto. No logró buenos resultados con las elecciones de King, Perdue o Fizer (quien en 2012 jugó la Liga Nacional para Estudiantes de Bahía Blanca).
Logró dos fantásticos cambios que le dieron alegrías. Obtuvo en un intercambio al gigante australino Luc Longley y sobre todo se jugó una carta muy importante al tener entre sus filas al problemático Dennis Rodman tras su época de apogeo en los bad boys y sus recurrentes inconvenientes de conducta en la vida y Spurs, equipo del cual provenía. Ambos fueron estandartes para sostener la hegemoonía de Bulls, ayudar en grande a Jordan y seguir ganando títulos. Krause se atribuyó muchas veces su relevancia en todo momento lo cual cayó muy mal en el equipo y el cuerpo técnico.
En el medio se originaron dos situaciones que aparecen en el documental. Una de ellas fue el intercambio de Charles Oakley, no solo un jugador importante en las primera épocas de Chicago con Jordan sino gran amigo personal del propio MJ. La llegada de Bill Cartwright originó la furia de Jordan, quien hasta maltrató al propio nuevo interno en cada entrenamiento hasta ganarse su respecto.
Cartwright fue esencial en las finales ante los Knicks deteniendo a Ewing, y aunque Jordan dijo que el cambio terminó siendo bueno nunca le tuvo confianza a Krause y lo apodó "Crumbs" en referencia a su obesidad mórbida y apariencia descuidada, además de tener restos de donas en su ropa. Krause también fue clave en la llegada de Kukoc luego de los Juegos Olímpicos de 1992, donde Estados Unidos con Jordan y Pippen jugaron ante él con cierta bronca sabiendo que Krause lo tenía elegido para ser parte de los Bulls.
La gota que rebalsó el vaso fue su relación con Phil Jackson. Krause lo llevó al entrenador, primero como asistente a Chicago y luego como el coach principal hasta el último campeonato. Su relación se fue desgastando con el correr de los años, Jackson no aguantaba la prepotencia de Krause y se sumó una situación importante. La hijastra de Krause se casó y ni Jackson ni su familia fueron invitados cuando sí fue todo el equipo y dirigencia de Chicago. Krause no quería contar con Jackson para la 97-98 aunque Reindford lo dejó por una temporada más.
El General Manager dijo abiertamente que aunque Chicago gane los 82 partidos de la etapa regular Jackson no seguiría. Todo esto avivó el odio de jugadores y aún más cuando Krause lanzó frases como "Los jugadores y entrenadores no ganan campeonatos; las organizaciones ganan campeonatos". La declaración ofendió particularmente a Michael Jordan. Sin embargo, Krause dijo que su frase original era "Los jugadores y entrenadores solos no ganan campeonatos; las organizaciones ganan campeonatos".
Chicago Bulls ganó su sexto anillo de campeonato y todo se acabo. Si bien el equipo merecía una reestructuración, no quiso que Jackson continúe y que generó el retiro nuevamente de Jordan. Pippen fue traspasado y dejado salir como si no hubiese tenido el valor que realmente tuvo. Krause En 2003, Jerry Krause se retiró como gerente general acusando problemas de salud. Regresó como visor en baseball con los Yankees y luego se unió a los Mets en 2005.
Volvió a los Chicago White Sox y después en 2011, fue nombrado “asistente especial“. El 21 de marzo del 2017, Jerry Krause murió a los 77 años por problema de salud. Fue incluido en la clase del Salón de la Fama del 2017 de basquetbol a título póstumo. ¿Héroe o villano de los magníficos Bulls? Tal vez ambas, saquen ustedes las conclusiones...