Jerry Krause decidió diseñar un nuevo Chicago Bulls luego del nuevo tricampeonato. Prácticamente se fueron todos los guías que dominaron por años la NBA buscando un elenco joven que jamás fue hallado. ¿Que hubiese pasado si el equipo se mantenía?
Autor:José Fiebig (@Josefiebig en twitter)
Michael Jordan fue consultado en The Last Dance sobre lo que hubiese sido seguir una temporada. Él mismo afirmó que hubiese firmado por un año más y que seguramente todo el equipo también con Jackson y Pippen acompañándolo para un séptimo anillo. Dentro del documental, Jordan mostró aún su enojo por no haber competido por otro logro y haberse retirado de esa forma en un gran pico de rendimiento. Jerry Krause prácticamente había tomado la decisión y no hubo vuelta atrás. Se fueron los líderes que marcaron el camino y todo quedaba dispuesto para una reestructuración que nunca llegó.
Tras el segundo tricampeonato, Chicago Bulls se desmembró por completo. Desde el principio todos sabían que era el último baile como el propio Phil Jackson tituló. Si bien hubo una intención de sostener al entrenador luego de vencer al Jazz, las cartas ya estaban echadas. Jerry Krause, quien ideó al fantástico e histórico elenco, también le puso fin con sus palabras en el inicio de temporada. Ahora bien ¿Tuvo razon? ¿Como le fue a los ex campeones en sus otros equipos?
Chicago perdió a 11 jugadores, incluido su entrenador, para la temporada 98-99. Jordan se retiró, Pippen fue traspasado con 33 años a Rockets, Rodman con sus 37 años fue a Lakers, Longley en un intercambio a Suns y Kerr en otro intercambio a Spurs entre los pilares. Jackson se tomó un año sabático antes de ir a Lakers. También dejaron el equipo Burrell, Rogers, Kleine, Salley y Buechler. Llegó Tim Floyd como entrenador, jugadores novatos y Brent Barry como opción en el perímetro.
La 98-99 de Chicago fue realmente muy pobre. Se vino a pique en números, quedó último con marca de 13-37 en lo que fue una temporada diferente por ser de lockout donde solo se jugaron 50 encuentros. Kukoc pasó a ser el líder del equipo con 18.8 ppp, 7.0 rpp, 5.3 app seguido de Barry con 11.1 ppp, 3.9 rpp y 3.2 app. Un cambio total donde necesitó seis temporadas para volver a récord positivo y de ingresar a playoffs.
¿Y si se hubiesen quedado todos al menos un año? Rodman le dio la razón a Krause definitivamente. Jugó solo 23 partidos en los Lakers, luego fue intercambiado a Dallas en la 99-00 donde le fue peor. Apenas 12 partidos, 6 faltas técnicas, 2 expulsiones y encima cortado. Perdió el apadrinaje de alguien como Jackson y la hermandad conseguida en Chicago. Pippen siguió en un interesante nivel a pesar de solo jugar un año en Rockets.
Las cosas no salieron como lo esperaba en protagonismo y logros juntándose con Barkley y Olajuwon en su etapa final. Eso lo hizo desembarcar en Blazers por cuatro temporadas con discretos números en temporada regular pero brillando en playoffs (En la 2002 terminó con 16.3 ppp, 9.7 rpp, 5.7 app). Luc Longley apenas jugó tres años más en la NBA (dos en Suns y una en Knicks). Sus números fueron todos por debajo de lo realizado en Chicago y peor aún en Knicks donde apenas pisaba cancha.
Kukoc fue traspasado a Sixers con 31 años y buscando el equipo picks mucho más altos para la reestructuración. El croata jugó seis años más en la NBA, los últimos cuatro en Bucks aunque su presencia en Atlanta en la 00-01 fue descollante con 19.7 ppp, 5.7 rpp, 6.2 app, números que nunca volvió a repetir.
Steve Kerr fue el único que siguió con títulos. Llegó a Spurs y se consagró campeón con Duncan y Robinson. Sus números también fueron imperceptibles en general por cuatro temporadas más. Phil Jackson mantuvo su marcha ganadora tras el año que no dirigió. Llegó a Lakers, logró un tricampeonato y luego un bicampeonato en la 08-09 y 09-10 también con los Angelinos.
El recambio y la reestructuración esperada no funcionó. Muy posiblemente haber sostenido a Jackson junto a Jordan y Pippen más Kukoc que se mantuvo y de ahí comenzar la historia habría cambiado. Además de Longley con solo 29 pts pero Rodman con 37 años y sobre todo con sus años siguientes magros por todas partes. Si bien fue la despedida ideal nos queda la sensación de que pudo haber habido un capítulo más.